Los detectives y la policía acudieron al sitio del choque de la unidad forense que llevaba el cuerpo de la única víctima del juego enfermo, Megumi. El conductor de la unidad, estaba inconsciente al igual que herido luego que estrellara su cara contra el parabrisas. Afortunadamente el hombre recupero la conciencia antes de que fuera llevado por los paramédicos en su unidad.
-¿Que fue lo que paso? -pregunto Levi arriba en la ambulancia a solas con el joven conductor.
-No recuerdo bien -tenia su cuello un collarín medico para los golpes -solo vi que un auto venia atrás... cuando lo volví a verlo por los espejos estaba a lado de mi, el maldito me saco de la carretera y me estrelle...
-Viste su rostro a caso -le pregunto.
-Sus ventanas estaban oscuras, y siendo de noche no creo poder haber visto mas -era todo lo que tenía que contar.
La información que le dio no era de mucha ayuda, mas lo recalco su compañero cuando le pregunto a Levi luego de que lo sacaran los médicos para llevarlo con tiempo al hospital.
-Supongo que no conseguiste nada de información -dijo Erwin apenas volvió su compañero.
-Dijo poco -exclamó Levi -pero deduzco que el que haya sigo sabía que llevaban el cuerpo de la chica.
-Pudo haber sido un forense o uno de la escena del crimen que este vinculado con Euphoria, alguien involucrado a él o incluso pudo haber sido él mismo -exclamó Erwin sacando un cigarrillo de su gabardina, lo cual produjo una reacción asquerosa a Levi -no fumas verdad.
-Es obvia mi cara -uso sarcasmo para responderle -como sea hay que encontrar a ese chico Komuro antes de que sea tarde.
¿Porque querrían encontrarlo? No estaba con las demás chicas en el hospital a caso.
-No será que él sea Euphoria -comento Erwin cuando Levi quería entrar al auto en el que vinieron para volver.
-Con que te basas para decir eso -lo escucho como una estupidez.
-Digo... Las mujeres que desaparecieron son culpables de una u otra forma conforme lo que hicieron a sus padres, es como si fuera un hipnoto que vengarse contra todos en los que confíaba, investigo a cada una de ellas y construyó cada trampa para su gusto -no tenía muchos fundamentos lo que decía Levi lo veía como una deducción de un amateur, y él era un profesional.
-También creía eso la primera vez -comentó y le contó de nuevo -investigue a Megumi y no hallé nada al respecto, su familia no era rica o que tuviera terrenos en Japón que pudiera usar... -entonces se dió cuenta de algo, por lo que se veía, parecía haber encontrado un rastro que no vio venir hace mucho -¡hay que volver a la estación!
-¿Que descubriste? -pregunto Erwin en cuando lo vio entrar rápido al auto -¿Levi?
-Si, Arturia -hablaba por teléfono con otra detective -aun estás en tu oficina... necesito que me envíes el archivo sobre el caso de Sakura Matou a mi correo... Lo necesito ya, es urgente.
En lo que ellos se dirigían de regreso a sus oficinas de investigación. En el hospital de Tokonosu. Una de las pacientes rescatadas del caso en una habitación de cuidados intensivos custodiada por dos guardias en la puerta había despertado la pobre chica luego de una siesta después de ser cuestionada por los detectives. Así como a las demás, no solo fue interrogada, también le contaron como unía a cada una de las mujeres que fueron víctimas del enfermo juego del que las culpaban de la muerte de los padres de Komuro Takashi. Lo cual hizo sentir odio y repulsión a si mismas. Unas más que a otras.
-Niki... -exclamó cansada la amiga, casi gemela de la chica.
-Misuzu... -se sorprendió de ver a su amiga luego de casi doce horas encerrada allí -¿que haces aquí?
-Eres mi mejor amiga, tengo que preocuparme por ti -dijo la castaña de primer año sonriendo. Ambas traían encima batas de la enfermería, solo que Misuzu tenía un catéter con ella, igual que Niki -¿que dijeron tus padres?
-Se alegraron por encontrarme, pero están enojados por; ya sabes... -se detuvo Niki.
-Salimos con vida, gracias a senpai -dijo Misuzu pero pronto se detuvo ella también -¿crees que lo encuentren?
-¿Acaso estas preocupada por él? -sonaba molesta luego de oírla preguntar eso -escuche de los policías que posiblemente él este detrás de todo esto.
-Solo es una hipótesis, no creo que senpai nos halla hecho a propósito lo que vivimos -esto solo enojo mas a su igual físicamente.
-¿Es broma? Porque lo defiendes -no podía gritarle, se sentía débil como para levantar la voz a como quería -no importa si tuvimos que ver o no con lo que paso con sus padres yo no quería que fuese así -tampoco Misuzu quiso que fueses así pero, ocurrió; así ocurrió.
Hechos antes de que fueran rescatadas del juego luego de llegar a mas de la mitad de su desarrollo. Llego el momento de escoger a una nueva participante para la séptima prueba, y quedando solamente tres candidatas para escoger solo uno podía elegir quien le acompañaría a jugar.
-Yuki, Niki, Rei... -Saya nombro a los que aun quedaban cuando fueron colocadas aparte de las que ya habían concursado -¿quien? Takashi.
El varón al igual que todas esas mujeres no tenia mucho tiempo para escoger, ninguna les quedaba mucho tiempo. La desesperacion estaba por desatarse de una vez.
-Niki... -tomo una decision, una que tal vez que dio un corto alivio a las otras dos, pero solo alargaba su sufrimiento. Pero el sufrimiento para una acababa de empezar.
Niki se tornaba tensa, nerviosa y temerosa de lo que fuera a pasarle dentro de la nueva habitación. Ella se adelanto, fue hasta la siguiente puerta, parada e inmóvil delante de la próxima sala cuando su mente iba a ser sumida en la perdición, alguien la saco de esos pensamientos turbios.
-Misuzu... -dijo pasiva cuando su amiga apareció detrás de ella y le toco el hombro después de que todas se dispersaron tras aceptar la elección de Komuro -tengo miedo.
-Se fuerte, Niki, aquí estaremos cuando salgan -abrazo a su igual, amiga -senpai puede ser rudo pero, todo es para que salgamos de aquí.
-Ni siquiera se porque estoy yo aquí, no hice nada malo -quería llorar la pelinegra.
Mas allá del par de amigas que de cerca parecían gemelas, Takashi la miraba indiferente en lo que tenia una conversación con Saya.
-¿Porque la elegiste? -pregunto siendo la tsundere de siempre.
-Tengo curiosidad, no se porque están aquí también y quiero saberlo. Así como tu -dijo y atrajo levemente la atención de la pelirrosa -sabes, saber que la genio de la escuela altero mi examen por envidia... es honorable y despreciable -la hizo sentirse culpable otra vez.
-Si hubiera sabido que necesitabas el dinero para ayudar a tu madre, te hubiera ayudado a estudiar idiota, nunca hablas con nadie. Siempre actúas como un lobo solitario desde que Miyamoto... -exclamo en su represalia pero cuando menciono a la única castaña que dejo huella en Komuro se detuvo al ver que una señal de fracaso se reflejo en su cara -date prisa y sacanos de aquí -luego de mirar de reojo que nadie les miraba para darle un beso en la mejilla -tonto -le dejo, entendió que era momento de volver a jugar.
Con valor, o mas bien deber. Fue hasta la puerta que daría paso al siguiente juego.
-Senpai... no estoy lista... -pronuncio Niki al ver que Takashi apareció.
No contesto a sus palabras, solamente la tomo de la mano con fuerza y ambos se pararon delante de esos sensores en la puerta que reconocían con los collarines las identidades de quienes iban a jugar.
-Jugadores detectados, Komuro Takashi, Toshimi Niki -dijo esa voz mecánica para así abrirles la puerta.
-Se fuerte Niki -grito en consuelo su amiga antes de que la puerta se cerrara apenas ellos dos entraron.
La habitación se ilumino y lo que dentro había era extraño al igual que aterrorizante, una mesa para autopsias con cinturones para amarrar a alguien, ella tal vez. Lo intrigante era que en el cuarto había una maquina de decibeles sonoros con micrófonos alrededor de la habitación, lo inquietante era que donde debía ir amarrada la cabeza de la persona, dos tubos de fierro oxidado se hallaban a menos de un metro. Todo esto era igual visto por las mujeres que se quedaron fuera del juego desde la primera sala en la pantallas.
-¿Que es ese olor? -pregunto Niki, cosa que llamo la atención de Takashi.
-Tu también lo sientes -exclamo sorprendido, primera que una de las chicas le decía que reconocía que había un aroma peculiar en la sala que entraban.
-Es aceite de orquídea tántrica... -dijo la pequeña pelinegra.
-Desde la primera sala siento ese aroma, pero las demás no ¿Por qué tu si? -pregunto.
-Hace poco salí de una gripe, mi nariz esta destapada, senpai... -decidió contarle lo que sabia de esa flor -la orquídea tántrica tiene efectos afrodisiacos y violentos si sabes como liberar su esencia. Hay parejas que hacen aceites y se lo untan en sus partes para sentir mas calor, pero si es quemado el aceite, lo que se respira varia en cada sexo... -conto, ahora entendía porque de un momento a otro se volvía rudo con las chicas cuando pero de repentinamente Niki se encontraba... caliente -si un hombre lo respira se vuelve sadomasoquista y mientras que la mujer se vuelve mas ansiosa... -su cara se veía roja y sus piernas las juntaba mucho, pero a pesar de eso Takashi veía como el jugo de su intimidad manchaba sus piernas.
Niki también le miro y noto que bajo el pantalón del pelinegro él ya estaba duro, se dio cuenta que ella se había mojado. Hicieron de la vista gorda acerca de eso, y prosiguieron con el desarrollo del juego. Como en cada nuevo cuarto de juego, una reproductora de casete portátil los esperaba. Saco el casete que tenia Niki oculto en su falda y pusieron el audio que tenia grabados para ellos, la voz que provenía de esos casetes no era agradable nunca.
-Bienvenidos a su séptima prueba, pero antes de seguir déjenme felicitarlos por llegar lejos se requiere una voluntad fuerte para seguir sin quebrantar la voluntad sabiendo que les espera -decía Euphoria -esta es una prueba especial para ti Niki, para agradecerte por brindarme las orquídeas para hacer efectivo estos juegos.
-¿Como? -dijo desconcertado Komuro cuando oyó eso se iba a ir directo contra Niki.
-Espera senpai, puedo explicarlo, no es lo que dice... -Niki camino asustada por la expresión de Takashi que se le aproximaba sin detenerse -mi familia manejo una florería y siempre atendemos a muchas personas, pudo haber sido cualquiera ¡Kya! -grito despavorida cuando Komuro puso sus brazos contra la pared y su puño golpeo el muro.
-Lo que ven detrás es una maquina de decibeles sonoros, el marcador indica cuanto intensidad de sonido hay en la habitación -informaba la cinta -para comenzar el juego, súbela a la cama -tal como le decían, lo hizo. Subió a Niki y la amarro, cuello, piernas, brazos -cuando el reloj la llave en la pequeña bóveda sobre el escritorio se abrirá luego de que la hayas humillado cuatro veces -con eso se refería a violarla -pero no será tan sencillo, si tu o ella hacen mas del ruido debido los dos tubos de alado se moverán una vez que la maquina sonara capte sus gemidos, se moverán lo suficiente para atravesar el cráneo de Niki y esas esposas no se soltaran hasta que hayan cumplido con la prueba, si quieres salvarla tendrás que violarla.
La maquina se comenzó a calibrar bajo su programación automática, el juego estaba a unos cuantos minutos de empezar.
-Sin embargo no es lo único por lo que decidí ponerte aquí -siguió hablando el enfermo mental arquitecto de estos juegos -después de todo, eres igual a tu mejor amiga Misuzu, siempre guardando silencio cuando la otra guarda silencio, hablando al mismo tiempo que la otra lo hace.
Sabiendo que Misuzu era responsable de recoger el dinero robado por Yuriko aun siendo extorsionada para entregarlo, ¿tendría que ver algo ella con todo esto?
-Sabes mucho de flores y plantas gracias a la florería de tu familia, sabes cuales de ellas tienen efectos afrodisiacos y cuales son drogas -contaba Euphoria -decidiste hacerte ingresos extra, así que vendías flores de procedencia dudosa a compañeros que lo repartían en la escuela.
-¿Eso que? -dijo Komuro justo cuando la maquina se calibraba y pronto funcionaria al máximo.
-Senpai...
-Drogas que también llegaron a manos de la capitana de kendo que gano de forma ilegal la competencia -revelo y entendió, las drogas que le sabia que Saeko consumía para su problema provenían de distribuidores de la misma escuela -cuando ocurrió lo del robo, decidiste apartarte sabias que uno de los que te habías involucrado era responsable de la extorción a Yuriko cuando robo el dinero.
-Tu... tu sabes... -dijo incrédulo ante la aparente niña inocente.
-No se quien esta detrás, solo mandan a una para recoger las plantas cuando me ofreció dinero por darles esas hierbas -exclamo toda asustada Niki.
-Dime ¡quien! -grito Takashi poniendo sus manos en la parte despejada del cuello de la kohai.
-Miku... Miku-senpai... -dijo débil.
Miku Yuki, la otra castaña de las dos mujeres que quedaban por elegir, ahora sabia contra quien debía ir en el próximo juego.
-Solo tendrán 30 minutos para jugar si no mueren por las varillas será por el explosivo del collarín de tienes Niki, vivir o morir que empiece el juego.
Lemon Hardcore
-¡Senpai! -gritó aterrada en cuanto el cronometro comenzó a correr y la máquina de decibeles se encendió, los tubos oxidados comenzaron a moverse a cierta velocidad cuando Niki grito.
-Cierra la boca -le tapo la boca con fuerza -cierra la boca... -los tubos dejaron de moverse y el medidor de decibeles bajaron sus niveles. El tiempo seguía corriendo, solo había una forma para liberarla -voy a sacarte, pero solo hay una forma -la expresión de su rostro era de furia contenida que descargaría con Niki, hablaba bajo, lo suficiente para que la máquina no pasará de su nivel del rojo y a amarillo -solo... Hago... Lo necesario... -tenia las piernas abiertas gracias a la mesa, le fue fácil levantar su falda sin quitarle la mano de encima -debe ser una maldita broma... -exclamó al ver que tenía más húmeda su vagina.
-Senpai... Por favor... -apenas si podía hablar, pero la voz de ambos era detectada por los decibeles.
-Allá voy... -rompió su gimen como el berserker en el que se transformaba.
-Mmmmmmm... Mmmm... -comenzo a llorar Niki cuando su primera vez fue tomada sin su consentimiento. A pesar de ser ahogado su grito de dolor, los tubos afilados volvieron a moverse, poco; pero lo hicieron.
Takashi movió sus cintura apenas la vio callarse y detener sus lágrimas.
"No solo en actitudes, hasta sus coños son iguales" comparó a Niki con Misuzu en sus pensamientos "sino fuera por esta maldita prueba... Si tuviera a ambas..." No paraba de penetrarla aunque su sangrado no parecía detenerse "...compararía si ambas gritan igual..."
"Porque..." Pensaba Niki a medida que le era robada su virginidad "...porque tuvo que ser así... Mamá... Papá... Misuzu..." Quería que alguien la salvará, sin embargo no sería así "se fuerte... Se fuerte..." Dijo a si misma.
Desde las pantallas no todas miraban las escenas del desarrollo del juego. A pesar de ya haberlo vivido (o similar) no tenían la fuerza o el desgarre metal para ver a la pobre Niki, ni siquiera Misuzu miraba por completo la pantalla.
"Que es esto... Porque se puso más grande" de pronto el pene de Komuro se agrando dentro de Niki, sentía que le rompería las paredes de su vagina "que va a pasar..."
"Mierda... No lo aguanto, se siente genial... Mejor que Misuzu" decía en su cabeza "¡mierda!" Incrustó con más profundidad al momento que se corría dentro de la pequeña pelinegra.
"¡¿Que es esto?! ¿Es... Su semen?" -dijo cuando su grito de dolor fue ahogado "siento que me llena... Es... Demasiado caliente" de nuevo salían lágrimas de sus ojos.
Takashi se detuvo para mirar la máquina y a pesar del ruido que llegó a hacer Niki aunque le tenía tapada la boca, está por poco y detectaba los decibeles. El semen brotaba de la vagina de su kohai, mezclado con la sangre de su gimen roto.
-Apenas una -decía casi susurrando Komuro -faltan cinco -casi diez minutos pasaron con la primera descarga que hizo en Niki.
Sin tregua ni señal de paz, otra vez volvía a mover su miembro dentro de la sensible vagina de Niki, seria una larga sección. Y como ambos podían oler ese aroma de la orquídea tántrica que venía de los ductos...
"...No soy yo... Es la orquídea tántrica... No soy yo quien lo disfruta..." Decia Niki luego de haber recibido ya la segunda descarga dónde se vino pocos segundos después de que Takashi la llenará con su semen -¡No soy yo! -logro quitarse la mano de Komuro pero con eso, casi los tubos llegaban a perforar su cabeza.
-Guarda... Silenció... Yo igual quiero oírte gritar... -volvió a taparle la boca.
"Maldito..." Vocifero cuando vio su rostro endemoniado de Takashi.
Tenía que resistir. Ya casi salían de la trampa.
"Tres..." Contaba para saber que tanto le faltaba resistir.
"Cuatro..."
"Cinco..."
Y termino la prueba... pero no el efecto del afrodisiaco sobre uno de ellos. La pequeña bodega que se abrió luego que el detector capto que las cinco corridas se habían cumplido una por una, con la cual iba resolviendo uno por uno los códigos que abrían la caja fuerte. La maquina de decibeles se apago, los tubos se dejaron de mover, y la desato.
-Lo logramos... -dijo Takashi quitándose de sobre Niki pero antes de que se bajara de la mesa, ella se abalanzo, un orgasmo quería salir de ella y con el efecto de esa extraña orquídea aun en su cerebro -¿Niki?...
-¡Maldito! -grito y se abalanzo sobre el pelinegro, su pene apenas si aun le quedaban energías pero cuando fue quien decidió violarlo, bueno...
-¡Niki! -Takashi había pasado el efecto que a él lo envolvía, a ella todavía le quedaba. Quiso hacerla entrar en razón pero fue un intento en vano.
-¡Maldito cabron! -grito y ella ahora fue quien puso sus manos en el cuello -dámelo... que esperas ¡dámelo!
Desde la puerta a esta nueva sala, Saya, Misuzu y Shizuka veían estupefactas que ella estaba fornicando a Takashi.
-¡Que carajos! -grito Saya sin poder desviar su atención de ambos.
-Aquí viene puedo sentirlo... puedo sentirlo... -Niki iba a obtener su segundo orgasmo -¡si! -grito cuando recibió la leche del único varón entre tanta mujer -si siente tan...
Fin del lemon hardcore
-...Bien... -Niki de nuevo estaba sola en su habitación del hospital, un medico vino y saco a Misuzu para devolverla a su propia sala en la habitación. Ahora sin visitas de familiares, amigos o de los médicos, Niki estaba tocándose debajo de la sabana de su cama medica. No podía pensar en otro cosa mas allá de lo bien que se sintió cuando fue ella al final cuando domo al berserker que habitaba entre los pantalones de Takashi.
No obstante en otras salas del hospital, donde algunas de las jugadoras descansaban en una misma habitación. Misuzu era devuelta por una enfermera que la cacho cuando fue a visitar a su amiga.
-Por favor debe quedarse en su cama hasta que el doctor diga -regañaba a la kohai.
-Perdone -se volvió a meter a la cama.
-Tenga -le dio un vaso pequeño con una pastilla y un vaso con agua.
-¿Que es esto? -pregunto por el medicamento.
-Anticonceptivo -informo la medica -para evitar cualquier inconveniente no deseado.
Fue algo pedido por los inspectores del caso, pensaban que esas mujeres no querían tener un bebe luego de ser profanadas, en especial las que aun eran estudiantes. De las nueve, ocho tomaron el anticonceptivo sin mucho pensarlo, solo una de ellas la tiro, Yuriko.
Los detectives decían estar mas cerca de la mente maestra detrás del juego, según por lo que decían y dijeron, Takashi estaba aun en manos de la persona que ha orquestado estos crimines antes. ¿Sabrían el motivo detrás de todos sus juegos? o la perderían otra vez. Salvarían a Takashi o seria tarde.
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