Film #4

 Soredemo tsuma wo Aishiteru

Reunidas en un café, Rias fue citada por la directora de la productora Oppai por un asunto importante.

—¿Quiere que haga una secuela? —una propuesta que Rias no esperaba escuchar, pero debió haber venido.

—La gente quedo cautivada con tu atractivo y tu voz, querido. Nos han llegado mucho correos pidiendo una continuación a la filmación —los lentes de Kiryuu reflejo la luz del sol—. Incluso muchos de nuestros mas leales suscriptores han hecho generosos donativos para que se realice la segunda parte. Aun que el director ya lo tenia escrito, solo faltaba que la gente criticara tu primera película

—Escucha, Kiryuu-san. Acepte hacer únicamente una primera para complacer a mi esposo pervertido, no a un montón de pervertidos desconocidos —de brazos cruzados, fue la respuesta que Rias dio a la representante de la compañía Oppai.

—Vamos, hazlo por tu esposo. Seguramente querrá verte en pantalla otra vez~ —decía sugerente, así que saco una hoja con cuentas donde cierto número podía ser tentador para la carmesí—, solo mira, con todos los donativos. Este sería tu próxima paga.

La cantidad que vio Rias era demasiado buena para ser verdad, era el doble de lo que consiguió en esa primera filmación, incluso lo dudo un poco.

—Es… una oferta muy tentadora.

—Raiser-kun será tu co-estrella sin duda —agrego Kiryuu.

—Deja que lo piense, después te enviaré una respuesta.

La codicia es uno de los siete pecados capitales por una razón. Así como también lo es la lujuria, ese pecado que bien reencarna el esposo de Rias, ahora mismo Issei había adquirido un nuevo empleo gracias a Kiryuu, ejercía ahora la labor como manager de una dama del mundo del doblaje de la industria del sexo. La hermana mayor de su esposa Koneko: Kuroka.

—No~ para, mi vagina no va a aguantar, van a destrozarla si siguen así desgraciados… —leía las lineas de su papel, Kuroka mientras los tecnicos detrás de la cámara de grabación recolectaban el audio e Issei miraba con mucha atención los gestos orales de su protegida—… detente, no quiero volver loca.~

No lo estaba disfrutando, lo estaba analizando Issei instante por instante, asegurándose de que fuera perfecto. Que el tono de voz, los gemidos y los segundos de sincronización fueran correctos por parte de Kuroka con la animación para adultos producida.

—Vaya, no había tenido un manager tan comprometido con mi talento, no pense que fueras bueno para esto —caminaba Kuroka junto a su cuñado por la vereda de la avenida, luego de casi cinco horas de estar grabando voces para una nueva producción—, ni que ese manager fuera el esposo de mi querida Shirone.~

—Si bueno, solo cumplo con mi trabajo —exclamo Issei ruborizandose por el cumplido. Sentía la mirada pícara de la pelinegra sobre él—. Solo puedo decir que tienes una voz muy talentosa.

—¿Sabes? Hay ocasiones en las que necesito practicar. Hay escenas de gemidos y gritos que no alcanzo, me gustaría poder practicarlos —sugería de forma pervertida Kuroka abrazando al castaño de su brazo frotando su pechos y exponiendo mas de cerca su escote a él—, pero hay algo que debo decirte, cuñado~ —al oído le susurró—. Me gusta hacerlo en publico.~

Caminando por la misma vereda pero viniendo desde el otro lado, Rias venía a encontrar a su esposo buscando el sitio de grabación donde su esposo debía estar con esa otra mujer de quien era ahora representante.

—Bien, el estudio de grabación debe estar mas adelante según esta dirección —decía Rias avanzando por la vereda. Notando que mas adelante de ella, los hombres iban a un callejón mucho antes de donde estaba el estudio que buscaba la carmesí—. ¿Que esta pasando?

Se pregunto ante la acumulación de personas. No eran muchas, pero estaban viendo algo que los estimulaba con solo la vista, la curiosidad matarían al gato. Se acerco Rias a ver que era lo que llamaba tanto la atención, eso sería su condena.

—¿Eh, Issei? —quedo perpleja con la vista.

Sus palabras no destacaron para nada entre la multitud, mucho menos lograron llegar a su esposo quien era centro de atención de todos los pervertidos y pervertidas se excitaban viendo a Issei teniendo sexo con Kuroka en el callejón. Contra la pared, con su ropa japonesa abierta casi en su totalidad y gimiendo como gata en celo era como tenía su castaño a Kuroka.

—Eso es, empuja mas fuerte~ —no solo le gustaba una buena verga la follara a Kuroka, que otros la terminarán viendo la mojaban más.

Entre sonrisas pervertidas y personas filmando el momento para después. Rias tenia las pupilas dilatadas del enojo, olvidando por completo que ella en un principio le puso los cuernos a Issei, sin embargo. Parecía que era imperdonable que él lo hiciera.

La película de Rias fue grabada y llego a los cines para adultos en muchas plataformas como cines de la misma. Una producción de la que no informo a su esposo dado sus celos sin justificación. Como si fuera un plan de venganza por verlo con Kuroka. Pero ni siquiera supo Issei que su esposa se encontraba en medio de todos los espectadores aleatorios que estuvieron esa tarde disfrutando del espectáculo callejero.

Su segunda película de Rias empezaba con la carmesí subiendo a una camioneta por el lado del copiloto, usaba un vestido negro de mangas anchas sobre sus hombros, ajustado a su cuerpo. Resaltando la firmeza de sus pechos dado que los mantenía apretados haciendo de estos mas voluminosos que de costumbre, mostrando una corta abertura en el escote. Quien era su esposo en dicha película subió para “conducir”. Era efecto de una pantalla verde detrás del auto.

—Querido, hoy es nuestro aniversario~ —dijo Rias, usando su voz seductora cuando su esposo falso conducía.

Sin mucha pena, o era que Rias comenzaba a tomar mas enserio su papel como actriz para adultos. Saco uno por uno sus pechos por encima de su vestido oscuro comportandose mas atrevida de lo que seria en la vida real, pensaba Issei.

Levantando la parte de la falda de su vestido completo, revelando su prenda interior negra de encaje semi transparente. Una sonrisa falsa de su esposo “actor”, sin que dejará de conducir, Rias acortó el espacio que había entre ambos y sin dejar pasar lo caliente que estaba (en el papel). Saco la polla de su marido falso y sin pena, su lengua comenzó a pasar por la punta de su pene hasta que segundo a segundo de estar saboreando su polla, Rias comenzó a chuparla toda en su boca. Claramente se veía como lo disfrutaba Rias, a y su segundo estelar masculino también, quien en su papel, trataba de mantener la línea mientras conducía.

—Rias, no me dijiste que habías aceptado filmar una segunda parte de la película —pregunto Issei, dejando de ver la pantalla un momento cuando miraban la acción en la pantalla estando sentado en el borde de la cama estando solos.

—Bueno, Kiryuu-san supo convencerme —mentía—, además. Veo que te gusta la nueva película. Issei.~

Puso su mano sobre el creciente empalme de su esposo frotando poco, dejando su mano aquí para seguir mirando su nuevo filme.

En la pantalla que tenían en la habitación, Rias entro con su supuesto esposo en lo que era la misma casa de la primera película. Sin llegar a la sala, se iba besando con su esposo quien la ponía contra la pared con sus pechos debajo de su vestido nuevamente, pero la carmesí invirtió los lugares, poniendo al peliblanco contra la pared de madera, agachándose de nuevo para bajarle los pantalones y otra vez, chupar su pene.

Ángulos desde abajo y desde la vista que tenía el actor peliblanco, captaban de buena manera la actuación de Rias como una esposa pervertida que le gustaba el sabor de un buen pene, casi llevando al éxtasis muy pronto a quien actuaba como su esposo. Pero antes de que se viniera. La carmesí dejo de chupar su pija para besarse con él mientras la empujaba hacia el sofá de la cama (rentada para la filmación).

—Querido, estás muy emocionado~ —pronunció Rias con mucha lujuria cuando este saco sus pechos por encima de su vestido, esta vez.

—Como no estarlo con mi sexy esposa y tus pechos seductores —apretaba y jugaba con ellos delante de la cámara, cuales globos de agua fueran.

—Si, son una niñas malas~ —quito las manos del hombre de su cuerpo con amabilidad—, deja que las preparé para celebrar nuestro aniversario.

Con ese vestido negro la belleza carnal con la que nació Rias se hacia más evidente y llamativa. Así que cuando el camarografo capto como la carmesí se iba hacia las escaleras hasta subir a la habitación en tomas de cámara lenta, con tomas mas cercanas de Rias haciendo sonrisas picarás presumiendo sus pechos expuestos con sensuales movimientos rebotantes de izquierda a derecha para la película.

En la habitación, la carmesí cambió su vestido por un juego de lenceria del mismo tono, salvó que era un juego de encaje de dos piezas, resaltando sus pechos justo como su vestido lo hacia. El vestido que le proporcionaron las de vestuario para la grabación. Se colocó unos tacones negros para a completar su figura y estaba lista para bajar de regreso, apreciando su figura y si se había puesto bien el conjunto.

—Vaya, es un regalo para mi~ —la voz del amante de Rias. Gracias al espejo, vio al rubio de piel casi bronceada entro por la ventana.

—¡Raiser! —sorpresa falsa desde el papel de Rias—. ¿Que haces aquí, mi esposo esta abajo?

—Y eso que.

Se acerco a Rias y puso sus manos en la cintura para ir besando su cuello al comienzo, mostrando la carmesí que poco podía resistirse a la tentación de su amante, como dictaba el papel.

—Esta bien, esta bien —Rias cedió por buena manera, froto su mano con mas interés en su pene que el de su marido—, solo una mamada y te vas. Que mi esposo me debe estar esperando abajo.

De nuevo de rodillas estaba Rias, mas apresurada de que su esposo sospechará. Fue con todo al chupar la polla de Raiser, hacia mas sonidos sucios con él que con su marido falso. O es que le gustaba el sabor de su polla pues como se mostraba a Rias le gustaba el sabor de sus líquidos preseminales, pronto el rubio fue follando la boca de la esposa de Issei, una toma desde enfrente de ambos mostraba a la carmesí como una sumisa amante de los penes. Subió a la cama Raiser con Rias que no quería dejar se saborear la polla de su amante, así que siguió cepillando sus dientes con el pene de Raiser. Tanto le gustaba que hasta sus pechos buscaban respirar de tanta emoción.

—¿Rias, te falta mucho? —su esposo (falso), hablo desde abajo.

—¡Ya voy querido! —grito, dejo de complacer a Raiser para ir con su actor designado. Acomodo su sostén y fue corriendo hacia el balcón de las escaleras.

—¿Que? ¿Me vas a dejar así? —Raiser quedo duro sin que llegará al clímax en ningún momento.

Desde el segundo piso, se asomó Rias inclinando su busto para mostrar cuan grande era gracias a la gravedad teniendo una expresión atrevida.

—Te hice esperar~ —dijo la carmesí alentando a su esposo.

Pero sin que ninguno se diera cuenta, Raiser salió detrás de Rias en silencio, ella sintió como su amante le bajaba sus bragas y ponía su pene en su coño.

—Ouh~ —un gemido cubierto libero Rias con la cámara captando la desde abajo.

—¿Todo bien? —pregunto su esposo sin mover su trasero del sofá.

—Si, he estado esperando este día por mucho mi amor.~ Mi cuerpo se siente emocionado —exclamo.

Captado por una cámara colocada en el techo, Raiser follaba a la carmesí sin que le diera a su marido sospechas, ni ruido hacia el amante de Rias de que estaba allí él.

—Ven aquí entonces —dijo arrogante su tonto ignorante esposo.

Hizo atrás a Raiser sin dar indicios de él en su casa y se acomodo de nuevas cuentas su bragas Rias, con el mismo efecto de cámara lenta, bajo Rias dando una nueva imagen a su cuerpo. Una mas seductora gracias a su conjunto.

La beso sin saber que acababa de chuparle el pene a otro hombre con harto deseo, pero detrás de cámaras Rias se había lavado los dientes para quitarse el sabor a marisco que desprendía un pene para esta escenas consiguientes, pero con el corte final parecía que no.

Desde arriba Raiser les miraba. El supuesto esposo de Rias la complació a como el guión dictaba, primero saboreo sus pechos tirando por allí el sostén en la sala, después consintió la vagina de su “esposa” con su boca. Para quien lo veía, su esposo (actor) estaba lamiendo una vagina que acaba de tener el pene de otro.

—Ven, querido. Quiero sentirte~ —en cuatro con el trasero en alto como buena perrita estaba Rias a lado de su actor en el sofá mientras Raiser desde arriba miraba aguantando la risa.

Se mostró como Rias era follada por fin por quien interpretaba el papel de su esposo en esta historia. Desde enfrente de Rias destacando su senos que rebotaban conforme la segunda ley de la gravedad. Según recuerdo. Pero también se incluyo un angulo frontal donde se dejaba ver todas las curvas de Rias estando en cuatro.

—Vamos no te detengas~ —dijo la carmesí, donde el guion marcaba que su esposo le sacaba la polla para que pasaran a la siguiente pose.

—Ven y tomalo tu —exclamo arrogante su esposo ingenuo.

Lo montó y dejo que el hombre con la cámara captara desde el punto de vista de su vagina como ella se comportaba muy sucia a como era Rias en realidad. Su talento hacia que fuera tan buena, con Rias haciendo que su “esposo” se viniera en ella.

—¡Oh si! —grito el actor debajo de Rias.

Ella se levanto y se grabo como de su vagina se escurría un poco del semen de este sujeto disparo en Rias, antes de grabarla tomando con toda su boca el pene de su “esposo” y limpiarlo todo.

—Ahora que sigue… ¿Querido?

Dictado en el guion, su esposo se quedaba dormido después de eso y Rias sonreía pícara al ver que lo dejo agotado a la primera ronda. Sin embargo, una ronda no era suficiente y sabia con quien seguir cogiendo en este momento.

Raiser se quedo en la alcoba de Rias donde ella entró desnuda solo con esos tacones negros que hizo sonar mientras regresaba, con una sonrisa engreída ella se sentó junto a su amante en la cama sin importarle nada.

—¿Te hice esperar a ti también? —pregunto sin vergüenza alguna Rias, así era su papel.

—¿Que hay de tu esposo, no era su aniversario? —Raiser poco le importaba la respuesta.

—Lo es, pero mucho en la cena y ya quedo dormido. Descuida él es de sueño pesado, así que hazme gritar mucho porque yo quiero seguir celebrando —empujo sobre la cama a Raiser con su tacón.

—Sigue donde te quedaste entonces —dijo Raiser improvisando.

Con mucha energía Rias puso en su boca la polla de su amante y la metió en su boca por completo haciendo mas ruidos lascivos que los de antes, dejando a sus pechos ser atraídos por la gravedad ante la cámara. Se comió la polla de su amante hasta exprimirle su blanco relleno.

—Mmm~ —hizo sonar su boca Rias para la película limpiando sus labios manchados de semen con su lengua.

Gustosa, Rias se subió en la polla de su amante tal cual lo hizo con su esposo pero este era más energético que su esposo (según su papel).

—Que deliciosa, tu pene es mas rico que el de mi Vali~ —era quien interpretaba a su esposo.

—¡Quieres que lo haga mas rico! —la tomo de su cintura con fuerza y doblo sus piernas para tomar control y empujar su polla contra el trasero de Rias sacando un autentico gemido a la esposa de Issei, pero parecía ser actuado.

—¡Si, eso es. Se siente bien! —se dejo caer Rias en la cama y de lado, donde sin sacar su pene, continuo su amante empujando su pene con mucho entusiasmo—, ¡Ha, así me gusta!~

Raiser se vino poco después dentro de Rias, captado por la cámara cuando él sacaba su polla de la carmesí, donde su semen se llego a escurrir. Emocionada, se puso en cuatro sobre la cama con mas gusto por hacerlo con su amante que con su esposo (el libreto decía así). Se complació con Raiser cuando improviso en lamer su culo antes de la siguiente escena, donde le puso su pene en aquí.

—¡Oh! Que rudo~ —exclamo Rias al sentir la polla de Raiser abriéndose paso en su ano—. Eso es, empuja mas~ destroza mi culo Raiser.~

—Te gusta que te de por detrás —decía con su cara muy cerca de la de Rias mientras ella hacia caras pervertidas para la película—, eres mi zorra favorita Rias.

—Soy tu única zorra, Raiser.

Pasaron varios minutos de la filmación donde ellos cogían de este modo, hasta mostrar al rubio alcanzar la cima y correrse en el culo de Rias. Gemidos de ambos se vinieron a escuchar por el micrófono, la cámara se acerco y mostró como el semen de Raiser se escurría del agujero apretado de Rias hasta mezclarse con el que soltó en su vagina el rubio.

Siguiendo su papel, Rias se dejo caer boca arriba en la cama, donde su co estelar se puso encima de ella para poner su pija entre sus tetas y coger el par de 98 cm. que cargaba la carmesí hasta mancharlas de su semen.

—Que rico~ —exclamo para dar una pequeña carcajada la carmesí.

—Y para el gran final —dijo Raiser.

Salieron de la cama y una ultima vez, Rias se puso de rodillas ante Raiser quien con mano en su pene fue pajeándose ante la boca abierta de su amante quien la esperaba con la lengua afuera con una mirada deseosa por saborear ese ultimo disparo captado por la cámara.

—Delicioso~ —Rias saboreo ese disparo perfecto a su boca abierta.

Una escena que el director de la película les hizo filmar cuatro veces para hacer el disparo perfecto de parte de Raiser ha toda la boca de Rias. Cosa que tuvo que ayudarla ella para volver a grabar las escenas.

Termina la película con Raiser bajando de las escaleras a la salida de la casa vestido viendo al aun dormido “esposo” de Rias en la sala. Riéndose de él antes de salir.

—Je… Feliz aniversario idiota —dijo antes de salir de cuadro.

Los créditos comenzaron a salir, pero para entonces Issei estaba dominando a su esposa en la cama con la música de los creditos como musica ambiental.

—¡Issei, Issei! —gemía al sentir la polla de su esposo empujando con agresividad por su culo.

—¡Así que te gusta que te den por el culo, Rias! Eres igual de sucia que tu marido —decía Issei dando de nalgadas a su esposa mientras empujaba su pene.

—¿Yo? A ti que te gusta ver coger con otros hombres… ¡Haa! —grito de orgasmo al ser castigada por su marido.

Pero eso no era la total venganza de Rias a Issei por engañarla con Kuroka (ella no sabia quien era ella). Podía issei perdonar a sus esposas por ponerle los cuernos y pedirles seguir para satisfacer sus fantasías, pero ellas no lo podían perdonar.

Días mas tarde, tenia que hacer algo sola.

—Voy a salir, si llega Issei le dicen que volveré un poco tarde —decía Rias antes de girar la perilla del departamento para irse. Pero no parecían prestarle atención, la mayoría.

—¿A donde vas exactamente? —pregunto Akeno saliendo de la cocina tras limpiar los trastes.

—Ha hacer un mandado —dijo sin mas Rias.

—Tu no haces mandados —exclamo Akeno antes de tomar un tono pícara—, vas a ver alguien verdad. A Raiser tal vez.~

Nadie de las otras esposas de Issei les escuchaba por alto ruido de la televisión.

—Si no dices nada, no le diré a Issei que te reúnes con Sairorg a escondidas —amenazo, sabia su secreto de Akeno.

—Solo somos amigos con derecho —se justifico—, además pensé que a Issei eso le gustaba. Dale mis saludos a Raiser.

—Si, claro —como si fuera a darse los.

Era venganza, celos o simple escape para tener sexo por placer.

En un hotel desapercibido. Rias tenia sexo con el rubio por con enojo. No porque fuera obligada sino porque estaba enojada con su esposo.

—No sabia que fueras así de traviesa en realidad, Rias-chan —la cogía en la pose de perra que era Rias.

—No me llames Rias-chan por favor, solo eres un pene andante para mi. Así que has tu trabajo y hazme llegar —decía con molestia Rias.

—Al menos dejame disfrutar —exclamo Raiser por la actitud de la película.

Ella se dio la vuelta acostada en la cama y mientras le seguía empujando su pene, dejo que Raiser chupara sus pechos sin dejarle ver que realmente estaba disfrutando, su enojo era mas que el placer que tenia entonces.

Amigos con derecho, compañeros de trabajo y nada más era Raiser para Rias.