Business and pleasure (Naruto x Harem)

Esta obra la estaré actualizando una vez al mes, para darme tiempo de seguir avanzando la historia y tenerles una actualización constante. Espero y les agrade.

Cheating 5

 Soredemo tsuma wo aishiteru S3

Una sesión de fotos privada que Ravel estaba dando para uno de los accionistas de la productora Oppai. A diferencia del resto de las esposas de Issei, ella no era estrella de ninguna del repertorio de películas de la compañía, resulto ser una buena contadora para Kiryuu y cuando el principal inversionista de Aika conoció a Ravel se maravillo, no solo por su genio, sino por atractivo cuerpo a pesar de su pequeña altura. Mientras Issei ardía en rabia por la búsqueda de placer que hacían sus esposas sin decirle nada, Ravel se unía al tren.

Rizevim Lucifer, era el accionista principal de estudio Oppai. Ravel era la contadora de su dinero y su chica linda favorita, posaba para la cámara fotográfica del peligris hombre maduro que vestía una camisa blanca de botones ligera y un corto pantalón. Un conjunto adecuado para el refrescante viento del mar mientras que Ravel usaba un atrevido bikini de color rojo, siempre rojo. El color de la lujuria.

Eso es Ravel ―profesional era Rizevim para tomar fotografías el solo en esta playa privada de su propiedad―, vamos has una pose mas atrevida para mi.

Parada de rodillas sobre la arena, piernas abiertas dejando ver como pasaba el color rojo de la tela sobre su vagina. Sus brazos detrás de su nuca dejando ver su busto grande y gordo para la lente de la cámara de Rizevim.

Así, o hago una pose más erótica~ ―exclamo Ravel. Bajo sus manos y las hombreras de su sostén se cayeron, sus brazos pasando por su busto por debajo, manteniendo su bikini cubriendo sus pechos.

¡Oh si, que sexy eres Ravel, dame algo más preciosa! ―en éxtasis estaba Rizevim desatando una lluvia de capturas a por como se escuchaba venir de la cámara―. ¡Esto es magnifico!

Cual modelo de revista para caballeros, las poses de Ravel se describían de tal manera. Era divertido, alguien además de su esposo la encontraba atractiva, más que eso, encontraba su atractivo muy estimulante. Mientras miraba a la cámara ante la lluvia de fotos que le sacaba Rizevim, la Phenex podía notar en el peligris hombre como bajo su pantalón corto, el empalme notable que veía aquí.

Era momento de ser traviesa para Ravel. La estupidez de su esposo por excitarse mirando a sus esposas consiguiendo el clímax con otro hombre, las hizo buscar esta necesitad sin la necesidad de que sus amado Issei estuviese cerca para verlas. Recordando en Ravel el momento en el que el castaño miro con gran satisfacción viendola coger hasta el final a Rizevim.

En la sala de estar, de casa de Rizevim. El viejo tenia a Ravel sin nada de ropa, sin nada de pudor por ocultar su desnudez estando encima de su pelvis montando su duro pene estando sobre un sofá personal. Él no hacia nada, ni sus manos tenia entrometidas para agarrar a Ravel, ella sola podía mover su culo de arriba a abajo en equilibrio mientras dejaba escapar sucios gemidos por su boca sin importar que su marido la mirase con total satisfacción.

¿Que pasa, Ravel? Lo estas disfrutando ―dijo Issei aquella vez cuando miraba con total satisfacción y ego mirando la perversión de su esposa número siete.

¡Si!… ―grito entre orgasmos, Ravel―. ¡Ouh!… ¡El pene de Rizevim es muy bueno, me esta llenando por completo!

Aplastaba y restregaba su trasero contra la polla del peligris quien solo contenía su voz ante el nivel de la segunda rubia que Issei tenia por esposa.

Yo quiero… quiero el semen de Rizevim dentro ―exclamo entonces, lo que hizo a Hyoudou sonreír con malicia ante la depravación de Ravel―, lo quiero dentro…. ¡Aaahh!

Gritaría con mas intensidad, enloqueciendo por el placer. No le importo sentir el cremoso relleno de Rizevim ahogando su interior, la pequeña rubia de coletas risadas continuaba azotando su culo con el pene del maduro hombre.

Ahora, Ravel acalorada por el sol de la playa y tras notar el bulto en los pantalones de Rizevim mando al carajo sus votos matrimoniales, como cuando Issei recibía los videos de sus esposas obligadas a ser le infiel, ahora por voluntad. Ser infiel a Hyoudou era una satisfactoria opción.

Ravel-chan te has vuelto una niña mala ―todo su pene era devorado por la atrapadora boca de la Phenex, el enorme tamaño de Rizevim era envuelto hasta por la garganta de Ravel y su lengua acariciaba con gran insistencia su polla.

Que lo caliente no le quitase lo lista a Ravel. Mas allá de la arena y el mar como fondo para la sección de fotografías que Rizevim le tomaba, una caverna rocosa gris moldeada por las pequeñas olas del mar de una entrada grande. Buscaron refugio dentro de su sombra. Sentado sobre una roca grande, el peligris hombre estaba a gusto con el talento oral de la rubia, los sonidos que escapaban de su voz era la mejor balada que podía escuchar.

No se contenga, Rizevim-san ―succionaba con fuerza, su dote. Como si chupara el relleno de un dulce, salvo que no era de un dulce sabor―. Usted sabe que quiere liberar toda su apestoso semen en mi boca, déjeme deleitarme con su sabor.~

Logro decir todo eso, teniendo atorada hasta la garganta con la polla del viejo Rizevim. No necesitaba poner sus manos sobre Ravel para hacer que se tragara su hombría en el holocausto de semen con el que bañaría más alla de su boca, ella podía tragar todo su pene sin problemas.

¡Mmmm! ―sonó su boca de Ravel mientras que sus pupilas se hacían para atrás al ahogarse con la salada leche del viejo hombre.

¿Dime Ravel-chan, te gusta el sabor de mi semen?~

Con su mano metida en la boca de Ravel para poder ver lo que tenia por aquí, lograba ver Rizevim como la tenia manchada con su esperma, la cara pervertida de la rubia al quedar intoxicada por las hormonas desatadas por su cuerpo.

Contra la rocosa pared, la parte superior de su bikini de Ravel le fue arrancado por el peliplateado maduro de barba picuda. Sin ser delicado, empujaba su hombría hasta aplastar el interior de la Phenex menor, apretaba sus pechos gordos como si fueran bollos de agua hechos de carne. Aplastaba el trasero de Ravel con cada embestida salvaje ante su alocada obseción que tenia por su lindo cuerpo. Por eso la eligió.

¡Rizevim-san, esta destrozando mi vagina… tu pene va a partirme a la mitad si sigue así! ―gritaba ahogada en el placer Ravel, el agua fría que llegaba a sus tobillos no se sentía por el calor recorría su cuerpo desde su interior hasta su vagina que se sentía entumir ante el frenesí de Rizevim.

¡No creas que voy a detenerme… o que seré más delicado! ―poseído por el sexo, su mente no podía pensar mas que su pene envuelto en las apretadas paredes de Ravel.

¡Destrocé mi interior con su enorme pene, quiero que su brutal pene me haga pedazo! ―gritaba entre obscenos gemidos, Ravel.

Si su esposo pudiera verla de frente, podría decir sin duda alguna que Ravel babeaba ante su lascivo deseo por llegar al clímax que Rizevim la inducía.

¡Aquí viene, aquí viene! ―gritaba la Phenex, esposa de Issei. Una cremosa y caliente sensación relleno el interior de Ravel, tan agradable y brutal era sentir su interior llenándose de semen que su vagina lloro como cascada al agua salada―. ¡Ummm~ que delicia!

¿Sabes que mas es salado además del agua del mar? El sudor, cosa que también sabia bien Xenovia, la cuarta esposa de Issei.

La ex creyente, usaba un bikini verde con soporte extra en el busto, un conjunto de sus dos piezas, mas modesto que el atrevido usado por Ravel, sumado un par de tacones de gordo tacón color oscuro; mientras sentía el sol cayendo sobre su cuerpo mientras miraba el patio trasero de la casa de Zephyndor, una piscina en forma de ocho de agua cristalina un jardín bien cuidado que apreciaba desde el balcón de su terraza por encima de su segundo piso.

El calor esta fuerte ―decía la peliazul recargada sobre la barra del barandal―, porque no bajamos y nadamos.~

Y eso que tenia lentes de sol, pero en lugar de proteger su ojos con ellos, los tenia por encima de su cabello; sobre todo levantando la mirada hacia el sol. Como muchos jóvenes tontos hoy en día

¿Quieres nadar más? ―pregunto Zephyndor, dentro del blanco toldo costurado para que sea el techo de esta terraza, debajo de su sombra, mirando recorrer el sudor por el busto de Xenovia mientras posaba ante el ardiente sol.

Se acerco a ella con una botella de cerveza de las favoritas por el publico, ambos bebieron como si fuera agua sin importarle. ¿Que hacía Xenovia reunida con Zephyndor? La misma razón por la que Rias escogía a Raiser por encima de su esposo recientemente, el compañerismo de su trabajo se creció mas allá del escenario del cine para adultos.

Tranquila, profesora Xenovia. Hay mas cerveza en la hielera ―Zephyndor apenas si dio un par de tragos, pero la peliazul en su lugar casi se bebe a fondo todo el litro de la botella.

¿Es que ser actor de cine para adultos deja tanto, como para que una persona obtenga una casa extravagante? Siempre hay un secreto turbio escondido bajo el limpio cristal en toda sociedad, pero como dicen: solo se va al infierno una vez. Puedes hacerlo tras una vida de lujos y placeres, o como un pobre diablo. Parece que todas estaban escogiendo el placer que ser unas parias lacras en la sociedad ¿o como las llamarías tu?

Siempre serás un mal estudiante, joven Zephyndor~ ―enrojecida por el alcohol de cebada, se acerco Xenovia al demonio y su mano apretó su pene por debajo de su corto pantalón playero para estar en su propia casa―, parece que necesitas otra lección.

Sobre un camastro bajo la sombra de la lona, ignorando por completo la fresca brisa del aire. Xenovia abrió sus piernas de par en par, las que levanto además, para dar vista a su carnosa vagina escondida debajo de su bikini.

Ven aquí, señor Zephyndor y hazme sentir bien.~

Completamente a gusto, con una sonrisa maliciosa en su horrenda cara. Zephyndor movió las bragas de Xenovia a un costado y su puso su boca sobre la vagina de la peliazul, su lengua acariciaba los labios inferior como el exterior de Quarta, mordía a placer su clitoris para provocar alguna sucia voz suya, pero ella ya tenia mas adiestrada su voz.

Tienes que esforzarte más ―dijo risueña por el alcohol, aun ebria podía controlar su voz.

Por mas que se esforzara el piel rojiza de Glasia-labolas no lograba sacar ningún gemido a Xenovia. Al contrario, era ella quien sacaba voces pervertidas a él.

¡Que genial! ―grito Zephyndor, su pene estaba atrapado entre los senos de Xenovia.

Al carajo tiro su bikini a un lado del piso de la terraza del rojizo Zephyndor y su polla era masajeada por una rusa hecha que Xenovia le hacia a niveles mortales. Si bien su par no era de tamaño extra grande como los de Rias o Akeno, sabia bien como usarlas.

Te encanta~ ―dijo en burla, Quarta―. Que otra cara puedes hacer además de esa cara tan lamentable, señor Zephyndor.~

Profesora… usted es la mejor ―sus manos en los descansa brazos del camastro para mantenerse sentado viendo el gran ángulo que tenia de la peliazul―. ¡Ouh!

Una suave mordida a la cabeza de su pene antes de acariciar la punta de su miembro con su lengua, cuando aun le hacia la rusa con sus tetas.

No aprendes que los halagos no te van a funcionar conmigo.~ ―un juego de rol que llevaron de la primera película que hicieron a su peculiar amistad entre comillas, es lo que llegaba a decir Xenovia a su castaño esposo―. Siempre serás un chico malo verdad, bueno chico malo~ muéstrame de lo que eres capaz.~

Sobre el camastro, Xenovia hizo aun lado las bragas de su bikini y dejo ver el agujero de su culo a Zephyndor. Ese agujero negro suyo sencillo, mas abajo en la constelación su coño se veía mojado y animado sin embargo la peliazul quería sentir el enorme pedazo de carne del rojizo varón destrozando su culo.

Con una sonrisa engreída, puso sus manos en las caderas carnosas de la peliazul de buenas medidas y entre sus nalgas froto su pene para incentivar sus ánimos antes.

¡Claro que si, Xenovia-senei! ―la punta de su polla sobre su orto, firme y grande; se abrió paso en el oscuro agujero.

Si antes como creyente, sus gritos y anhelos eran en oración a dios, ahora los hacia en nombre del placer.

¡Oh dios mio, carajo están doloroso! ―gritaba Xenovia, sus uñas sobre el tejido del camastro y casi rompe la tela, el pene de Zephyndor fue como si una vara de metal afilada partiera en dos su orto, aplastando sus intestinos, sintiendo arder las paredes de su culo hasta casi sentir que se iba a desangrar por esto.

No que quería que le partiera el culo sensei~ ―decidió burlarse su rojizo amante de cuerpo tonificado, pareciendo entrenar para pelear―, vamos, gime más querida ―comenzó a golpear el trasero de la peliazul con su mano, un manotazo tras otro, dejando su culo enrojecido con la marca de su palma impresa, casi pareciendo ser un tatuaje.

¡Cabronazo, tu pene en mas grande en mi culo de lo que pensé! ―empezó a mover el culo, Xenovia con complicación, sentía desgarrar las paredes de su orto debido al grueso de dicha hombría―. Es tan grande… vas a destrozarme Zephyndor.

No te quejes, puta. Yo se que te gusta que te traten así ―llevo su mano mas arriba del cuerpo en movimiento de Xenovia, apretando uno de sus senos como si quisiera reventar una lata, estimulante y doloroso, sobre todo estimulante.

De agarrarla bruscamente de sus pechos, a tirar de su cabello para que lo mirase ahora que Zephyndor tenia el control, golpeaba su pelvis con harta violencia, que sus huevos rebotaban contra la pelvis de la peliazul. Levanto su mirada de Xenovia y una expresión de éxtasis embriagante, una sonrisa depravada con la punta de su lengua afuera mientras sus pupilas se perdían cuando levanto la mirada.

Un atrevido beso le sentó Zephyndor, un beso tan sucio que de la boca de Xenovia escapaba la saliva debido al contacto de sus lenguas. No fue el aliento lo que termino el beso, sino el inesperado sonar de una llamada entrando al celular de Quarta que puso sobre una mesa de cristal a lado del camastro donde estaban fornicando peor que animales.

¡I-issei! ―exclamo cortada Xenovia, dado la falta de aliento que pasaba pues Zephydor no dejaba de embestir contra su culo, cuando escucho mencionar el nombre de su debido esposo, Glasia se volvió mas salvaje, haciendo arder de placer el culo de Xenovia, casi deja escapar un gemido en la llamada―. Amor, no es buen momento. Estoy trabajando en una nuevo proyecto en el estudio. ¡Tengo que colgar adiós!

¡Que espere tu esposo, en este momento eres mi perra, Xenovia! ―de sus brazos tomo a Xenovia y levanto medianamente su cuerpo, brutales embestidas desato Zephyndor en la peliazul, un maremagnúm de orgasmos vistos en la lluvia desatada desde su vagina―. ¡Aquí va!

¡Aaahhh! ―grito, sin importarle que estuviesen en la terraza de casa de Zephyndor, que este lujoso vecindario los escuchara o que alguien los estuviese viendo. Para cuando saco su pene, el agujero de Xenovia quedo bien abierto y un rastro de semen notable se perdía en la oscuridad de su agujero―. Eso estuvo bien, pero aun tengo este agujerito que quiere ser destrozado por un pene fuerte.~

Uso sus dedos para abrir los labios de su vagina, una invitación para Zephyndor. La resistencia y deseo lascivo de Xenovia la hacían pedir más, siendo solo el brutal pene de su compañero de trabajo que la hacia satisfacerse.

En tanto Issei, el castaño estaba en el estudio de Oppai, hablando con Kiryuu en su oficina y no estaba feliz. Él estaba aquí para hablar con ella paso por todo el edificio y por los escenarios de filmación. Ni Xenovia ni ninguna de sus esposas estaban allí como ellas le mentían. Vino hasta Kiryuu para acabar con esto, de forma laboral.

¡Ves a lo que te hablo! ―llamo a Xenovia y sin que ella lo supiera, Issei puso en altavoz la llamada. Habia venido a Kiryuu para terminar los contratos de ellas con el estudio de forma educada, ponerle fin a las aventuras de sus esposas―. ¡Esto no es lo que yo quería!

¿Que esperabas, Issei? Tener una vida amorosa normal ―respondía Kiryuu desde su asiento detrás de su mesa―. Lo siento pero no, tus esposas son un gran ingreso para este estudio. Y lo están llevando a la grandeza.

Eso no importa, lo que importa es que tengan sexo a mis espaldas y actuén tan cínicamente ―grito Issei, de pie en el otro lado de la oficina de Kiryuu―. ¡Elegí a esos tipos para estelarizaran películas con ellas, no para que sean sus amantes malparidos! Soy su representante, exijó que termines sus contratos.

¿En serio crees que eso acabara con su relación con mis estrellas? ―trataba de no burlarse mas de lo que ya lo hacia, Kiryuu―. Claro que no, me importa un carajo si piensan cambiarte por otros, ellas son grandes hallazgos y la fama que tienen… bueno, dudo que quieran dejarla, el placer. El sexo. No firmaste para asignarles un compañero de filmación querido, firmaste para asignarles un amante a tus mujeres. Es el resultado de no controlar tu fetiche, Issei.~










3 comentarios:

  1. Le dieron en toda la boca a Issei con la verdad, joder esto escala más rápido de lo que esperaba.

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  2. Tremendo puñetazo le dieron a Issei pero esto se veía desde el capítulo 1 de la segunda temporada, un fetiche como el del a la final iba a terminar mal.

    Tengo muchas curiosidad de como será el final bueno de esta historia ya que desde mi punto de vista es que Issei no recupere a ninguna de las chicas

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  3. Ojalá issei tenga un buen final que lo manden a un psicólogo y a un psiquiatra a qué le eliminen esa asquerosa idea de la cabeza de ser un cornudo de verdad que eso es un mal que debe ser tratado según dicen los especialistas a las personas que tienen esas perversiones , esos ya no son fetiches normales , eso son pervesiones

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