Business and pleasure (Naruto x Harem)

Esta obra la estaré actualizando una vez al mes, para darme tiempo de seguir avanzando la historia y tenerles una actualización constante. Espero y les agrade.

Good End

 Soredemo tsuma wo aishiteru S2

Todo lo que empieza tiene que terminar, incluso el amor; dicen que lo que importa no es el destino sino el viaje. Pero que pasa cuando el viaje se vuelve oscuro y turbio ¿A donde nos lleva el destino de nuestras acciones? ¿Donde terminaremos? ¿Podemos ver,¿ el resultado de nuestras decisiones antes de tomarlas?

10 años han pasado desde la ultima gala de los premios AVN en la que Issei acompaño a las que entonces eran sus esposas, diez años desde que volvieron y el amor murió, como el múltiple matrimonio que sostenía Issei con Rias, Akeno, Asia. Ravel, Koneko, Rossweisse, Xenovia e Irina. No perdono a ninguna Issei, el fin de su matrimonio fue igual.

Y así queda dividido la repartición de bienes ―dijo el notario en su oficina donde su sala estaba dividida entre las ex mujeres de Issei por un lado y del otro lado él―, son partes equitativas dividida en las diez partes establecidas en esta acta de divorcio. Solo faltan sus firmas.

Yo primero ―exclamo Issei, su mirada cansada y el estrés en su cabeza, le pedía que ya se largara―, acabemos con esto de una vez.

El abogado le importo poco el estado de Issei, solo le interesaba ganar su parte dado el cobro de los servicios.

Solo faltan ustedes ―miro a las damas, que a diferencia de Issei, una por una en fila, sin mostrar ansias por firmar el documento como lo hizo Issei firmaron todas, incluso… Tsubaki. Con todas las partes firmadas, el abogado tomo el documento y con su sello―. Gracias, ahora solo falta mi sello y oficialmente este matrimonio consumado en poligamia queda anulado.

Al fin ―suspiro Hyoudou aliviado, comenzó a sentir mas calmado su cabeza y su brazo que le temblaba desde hace días.

No te sientas mal Issei ―exclamo Rias―. Fuiste un buen esposo por varios años.

Te recordaremos por las cosas buenas, Issei~ ―Akeno no cambiaba nunca de actitud.

Vinieron los recuerdos a Hyoudou de aquella ultima noche en Las vegas, en la que sufre un intento de asesinato de parte de Kuroka. Justo cuando pensó que seria su fin.

Oh no… es mi fin ―recordó Issei, sus propias palabras.

Sintiendo por un instante el calor de los faros del trailer y el escuchar el claxon del camión casi sobre él, escucho como las llantas de la bestia de metal frenaban repentinamente y en un golpe de suerte que se define en un instante. El hombre detrás del volante piso con fuerza el freno y el parachoques inferior del camión de seis llantas quedo a nada de la cara de Issei

Quedo en shock por esperar el inminente golpe que primero destruiría su cráneo antes de su cuerpo fuese hecho puré.

¡Oiga, esta bien! ―el chófer de la unidad pesada, quedo sorprendido también. Por un momento y también pensó que llego a arrollar al castaño, pero salió del estado de pánico. Rápido bajo de su unidad para asegurarse de realmente no mato a nadie por accidente y vio a Issei en ese estado catatonico, solo lo veía respirar fuerte―. ¿Esta bien?

¡Mi amor, estas vivo! ―antes de que el hombre preguntara que paso, la nekomata vino y abrazo a Issei en una actuación digna de un oscar al mejor drama―. ¡tonto, porque intentas matarte!

¿Su esposo? ―pregunto el chófer, dando espacio a la pareja. Incluso levanto las manos por lo inocente que era.

Es que estuvo bebiendo, peleamos… una cosa llego a la otra y dijo que quería matarse ―abrazaba al castaño contra su pecho, Kuroka. Issei no salía de su estado y el aroma a alcohol viniendo de él convenció al conductor de que la historia era verídica.

¿Quiere que pida una ambulancia? ―ofreció ayuda, pero se la rechazaron con cortesía.

Kuroka se quito de encima al chófer ahora y ante la necesidad de querer ayudar, solo le dijo que la ayudara a cargar a Issei hasta la parte trasera de los asientos de su auto. El hombre del camión volvió al camino y se fue con un gran susto, uno del que Issei saldría casi treinta minutos después, en los que Kuroka se los pasaría crujiendo los dientes por el fracaso de su simple plan.

Casi muero ―escucho a Issei decir, por fin volvía después de rato―, casi muero…

Miro Kuroka al castaño con un molesto ceño fruncido, lo vio levantándose con mucha sorpresa.

...Casi muero ―sonrió por un momento Issei―. ¡Intentaste matarme!

¿Ne? ―como si fuera gran cosa, exclamo Kuroka.

Cabreado, se fue contra la nekomata la que tomo desprevenida y con el coraje acumulado que se traía. La tomo de su ropa para arrojarla con ira al lugar del auto de donde se levanto Issei.

¡Porque rayos lo hiciste! ―grito el castaño luego de actuar de tal manera contra la nekomata. Pero ella se dedico a mirar con odio a Hyodou en respuesta de silencio. Silencio en el que su mente proceso las palabras de Kuroka antes de que lo empujara―. ¿Tu, tu sabes de…

¿Tu inversión? A Kiryuu se le escapo el otro día cuando me pidió que alejara de Rias y esas putas ―se había levantado Kuroka y extendió los brazos en señal de que no le importase eso.

¿Ella que?

Oye tonto, entiende de una vez ―comenzó a golpear a Issei en su pecho con solo un dedo, Kuroka―, ya no son tus esposas que tanto amas. Probaron el placer de la carne y les gusto ¡aceptalo! Ahora son solo unas tontas que les gusta el sexo y creeme, que tu les importas un carajo ahora.

Calló Issei por un buen rato, no supo que responder. Era cierto, ya no eran las mujeres de las que se enamoró.

No quería que esto terminará así ―se dio media vuelta, restregando su mano en la cara para ver su realidad.

Pues termino, no seas idiota y déjalas ―exclamo Kuroka viniendo a él, lo abrazo de su espalda, a pesar de que Issei amaba los pechos, no reacciono cuando sintió los gordos senos de Kuroka―. No te merecen, puedo ser tuya en lugar de todas ellas.~

Solo quieres mi dinero ―dijo Issei, no se dejo llevar del todo.

Si, pero también quiero esto ―deslizo su mano hasta llegar al cierre de los pantalones de Issei, abrirlo de forma discreta, ponerle mano encima a su pene y acariciarlo con delicados movimientos suaves―. Puedo ser tuya Issei.~

Solo eres un puta ―miro a Kuroka, el rostro de la gata estaba sobre su hombro derecho.

Y puedo ser tu puta Issei~ ―la nekomata lamió detrás de la oreja del castaño, frotando su pene con mas interés en esa carretera vacía y a oscuras en medio del desierto―. Yo puedo ser todo lo que quieras, puedes verme como tu quieras~ puedo ser tu esposa, tu amante y tu novia. Tu juguete, tu zorra, tu botadero de semen.~ ―fue besando al castaño, logrando sacar líquido preseminal de su polla, puso las dos manos en él―, dejala a Rias y esas putas, pero solo dame de tu fortuna y seré lo que quieras.~

Se dio la vuelta Issei y con tremenda erección, Kuroka se responsabilizo. Deslizando su cuerpo hasta poner la hombría de Issei en su boca, gratifico su pene en medio del desierto. A pesar de lo bueno que era, comprendió el castaño que solo se podía solucionar esto de manera sana para no arruinar mas su vida. 

 

Rias Phenex.

Diez años han pasado y todas siguieron su vida. Escogieron con creces a sus amantes hasta el punto de casarse con ellos, eligiendo vivir del placer y el negocio de las películas eróticas. Pero Rias no necesitaba de cámaras para estar cogiendo con Riser.

Una residencia privada, donde una imponente mansión a las afueras de Kouh tenia escrito en la reja el apellido Phenex. Una mansión con jardín, piscina en la parte trasera. Tres carros en la cochera, uno deportivo otro elegante y uno familiar, todos de alto costo. Seguridad privada en la entrada mientras que la casa contaba con su propio personal de limpieza, un equipo pequeño de 4 personas, para tratar con la casa y las 18 habitaciones que componían el lugar. Lo que hacía que Rias viviera como una reina en su castillo. Era la novena hora del día y la carmesí disfrutaba de un baño de burbujas en una tina blanca de porcelana muy relajante, tomando una copa de champaña.

Esto es vida~ ―dijo Rias mientras se relajaba en el agua y disfrutaba del perfume del jabón en el aire del baño.

Un enorme cuarto que un enorme baño, sin contar los otros tres baños repartidos en los pisos de la casa. Rias se conservaba joven y atractiva, nunca se había sentido mas orgullosa de su cuerpo que desde que comenzó a vivir con Riser adoptando el apellido del rubio tras aceptar casarse con él tras dejar a Issei, se casaron casi de inmediato, a dos semanas de haber dejado al castaño.

Rias-sama ―entro una chica de cabello púrpura al baño de Rias, a lo que ella ni se inmuto por mirarla, siguió disfrutando de su baño―, su esposo ha vuelto.

¿Así? ―abrió un ojo la carmesí mujer sonriendo con atrevimiento―. Ahorita salgo, Yubelluna.

Tal como le avisaron, llego su esposo ocupando el auto familiar para traer a su hija con Rias de la escuela. Una chiquilla de diez años que saco el cabello carmesí de su madre y otra más de la misma edad solo que con el cabello de su padre. Gemelas.

Riser-sama, bienvenido ―saludo Yubelluna con una reverencia incluso, pero él paso de largo para ir con su esposa cuando subía las escaleras de entrada a su casa.

Hola mi amor~ ―a pesar del sol, Rias siempre vestía elegante, orgullosa de su cuerpo y adoptando una actitud mas presumida. 


 

Rias ―se acerco el rubio y tomo a su mujer de la cintura, para besar con mucho atrevimiento sin importar quien estuviese. Dejo de besarla y Riser puso su mirada sobre esas montañas superiores que hacia a su esposa mostrar en un buen escote, siempre.

Diez años y lo primero que siempre me ves es el escote, que patético Phenex-san ―exclamo con diversión Rias, era el objeto de excitación diaria de Riser y siempre él se lo daba con ganas.

Que te digo, Rias eres la mujer mas ardiente del mundo y es mi esposa.

Rias Phenex, querido.~

¡Mamá, ya volvimos! ―saludaron el par de niñas que Rias tuvo con su amante, ahora esposo.

Maya, Anna. Bienvenidas, mas vale que hayan sido niñas buenas en la escuela ―exclamo Rias agachándose para abrazar a estas dos. Debo decir que ellas salieron casi idénticas a su madre, tenían la misma cara, pero en una década más se sabría si tendrían el mismo cuerpo que su madre.

La fama del cine erótico que seguía ejerciendo se le subió, pero también lo hizo cuando comenzó a ser modelo de la línea de ropa que creo con el dinero que le saco a Issei con el divorcio. Diez años y Rias se había vuelto una diva, presumida. Carismática, aumentando y conservando su sensualidad de rostro joven. Pues su busto subió del 98 al 105 tras quedar embarazada. Una madre indecentemente decente, digo pues tenía a sus hijas consentidas al igual que Riser y de que siempre iba vestida por la casa y en salidas familiares como a otros, con vestidos escotados y reveladores. Algo que Riser le inculto a Rias para nunca dejar de ver en primera plana su cuerpo de infarto, para presumir a donde iba que se comía todos los días y las hijas que le saco.

La familia Phenex era una familia de negocios legales pero muy adinerada, Riser solo tuvo que heredar algunos negocios para tener ingresos y pasarse la vida llena de placer carnal y lujos con Rias.

Cayó la noche el dormitorio de este matrimonio, Rias estaba mirando por la ventana al paraíso de hogar en el vivía como mujer de Riser durante estos últimos diez años. Cambiaron esa casa de los suburbios donde Issei los confronto una vez y ahora vivían en grande. Miraba por la ventana estando en lencería negra erótica Rias antes de ver su reflejo en el cristal y mas atrás de ella, estaba Riser mirando la espalda de la carmesí teniendo un vaso de whisky en las manos.

Disfrutas la vista, Rias ―pregunto Riser con esa mirada engreída suya que nunca se quito, como estar viviendo con un manjar de cuerpo como Rias, uno con la que todas las noches se daba placer.

¿Y tu, Riser? La vista te parece atractiva~ ―dijo la carmesí cuando se dio la vuelto para posar ante su esposo que sabía.


 

Ven aquí ―uso su dedo para incentivar mas sus palabras.

Camino hacia su esposo para poner sus labios en los del rubio,deslizando ella su mano izquierda a su pantalón de Riser y sacar su pene al que ya estaba duro y no dudo en acariciarlo. En cambio el rubio, deslizo su mano izquierda por la espalda de Rias y le desabrocho el sostén, dejando que se fuera al piso. Perdió su mirada sobre los pechos desnudos de la carmesí, antes de tomarla del par de senos y darse un festín con su sabor.

¡Riser!~ ―dijo entre pequeñas risas, dejando a su marido ser él―. Diez años y se vas sobre mi como un pendejo desesperado que no coge desde ese tiempo.

Sin importarle sus palabras, puso su mano en el cabello de Rias y jalo de ella, levanto su cara a él (Riser es mas alto que Rias), viendo los ojos pervertidos de la carmesí que reflejaban como disfrutaba ser maltratada en la intimidad.

Diez años y tu sigues siendo la misma puta que se entregó a mi por placer, todos los días tengo que estar follando porque eres nada más que una tonta ninfomana que le gusta tragar mi pene ―dijo orgulloso de la esposa trofeo que tenia, el phenex. Sin mencionar que la carmesí no dejaba de estar jalando la cosa de Riser a pesar de este maltrato lujurioso―. Dime ¿no te arrepientes de haber dejado a ese tonto solo para ser mía?

¿Arrepentirme por dejar a ese tonto que de seguro se la ha pasado masturbando viendo mis películas y series? ―Rias solto una carcajada por eso―. Ser la esposa de este pene es la mejor decisión que tomado y que me lo des mañana, tarde y noche es lo mejor.

Bien dicho, toma tu premio ―Soltó el cabello de Rias y ella se agacho ante el pene de Riser, miraba con maravilla su duro pedazo de carne, pero antes de que pudiese ponerlo en sus labios el rubio la abofeteo un poco con él antes de dejarla poner en su boca―. No tan rápido Rias, quiero que lo pidas, vamos ¿no lo quieres?

Por favor Riser, dale a tu esposa tu vigoroso pene ―decía Rias mientras se restregaba la polla de su esposo en la cara―. Dale tu pene a tu esposa que se convierte en una puta adicta al sexo.

Dicho eso y sintiendo la lengua de Rias sobre la punta de su hombría cuando pronuncio su ultima línea, empujo su pene dentro de su boca tomándola por sorpresa. Solo un segundo después, Rias se saboreaba con devoción y pasión la cosa de Riser mientras él miraba como siempre. El talento de la boca que la carmesí se perfecciono chupando, la hacia hacer esto sin involucrar las manos para nada. Solo bastaba sus labios, su lengua y la calidez de su garganta para sacar el primer disparo de Riser por la mañana.

Buen trabajo, Rias ―la tomo de su barbilla mientras ella miraba con la boca abierta y llena de semen al rubio―, a lo que sigue, esposa mía.

En la cama, Riser se recostó y con tremenda erección invito a Rias a subirse en él.

Claro que si, querido.~ ―podía ser imponente como madre, una actriz carismática y una modelo demandante. Pero con Riser era una sumisa a merced de los deseos de su esposo y era bien pagada por ello.

Se quito las bragas y se puso el pene de Riser en el agujero correcto. Mas pronto que tarde cuando fue moviendo sus caderas como una profesional que hacia poner cara de pendejo a Riser, Rias era quien soltaba gemidos y pedía por más a su esposo.

Que rico se siente tu pene Riser, entra y sale de mi coño con mucha intensidad ―gritaba Rias como perra en celo―. Tan grueso… tan lleno de vida.

Poco mas tarde, se paso Riser a estar encima de la carmesí enterrando profundamente su pene en el mismo lugar mientras la vagina de su mujer chorreaba jugos con tanta felicidad que se veía también en la cara de Rias.

Eres la mejor mujer que he conocido Rias, llevo follandote por diez años y seguiré por diez años más ―la tomo de su culo y la levanto en el aire mientras seguía dándole duro.

Que sean muchos más, Riser.~

No obstante en una serie de cámaras ocultas en su cuarto, se grababan a escondidas los dos cada noche, cada mañana, cada tarde sin falta y lo transmitían en vivo. Una de las personas que se la pasaba viendo lo que Rias y Riser hacían era Yubelluna.

Riser-sama… ―se estaba masturbando mientras veían a su jefe darle amor dominante a su esposa―… yo también quiero ser esclava de su pene, Riser-sama.

Había otro más que se las pasaba viendo cada transmisión de estos dos. Incluso una vez le enviaron una transmisión privada para que los viera solamente esta persona. Se mostraba a Rias de rodillas pegada a Riser y su pene muy cerca de su cara.

Hola Issei, ha pasado tanto. ¿Como te va? Yo la he pasado bien, siendo una adicta al pene de Riser ―ella agarro el empalme duro del su ahora esposo y lo paso sobre su cara―. Aceptar que tu ya no me satisfacías y volverme la perra de Riser ha sido la mejor decisión de mi vida porque Riser si me hace sentir mujer mucho mas tu en todo sentido.~

De estar arrodillada ante la cosa de Riser, paso a estar de frente a la cámara, con su cuerpo empinado, se dejaba ver lo grande de sus senos mientras el Phenex le daba duro por detrás, las piernas abiertas de Rias dejaba ver como se escurría semen de su vagina mientras su Riser seguía empujando su pene.

Y eso se lo mandaron en la mañana.

Como dije, Rias seguía ejerciendo el trabajo de excitar a público sin nada mejor que hacer. Siguieron trabajando para Kiryuu y el estudio Oppai creció. Los admiradores y compradores por las películas de Rias y las demás esposas de Issei aumentaba con cada mes, que el estudio Oppai tuvo que adaptarse a las crecientes demandas de sus usuarios en la página oficial, por lo que optó Kiryuu por crean una plataforma de Streaming para las películas de su estudio como crear series protagonizadas por las ex esposas de Issei y han sido un gran éxito desde hace diez años. Tanto, que la cantidad de cuentas activas en la aplicación, compiten con plataformas de películas comunes.

Aika sabia que tenia un tesoro asegurado con las mujeres de Issei y grandes ganancias que tenia con ellas y buenas pagas que les daba.

¿Que necesitas, Kiryuu? ―pregunto la carmesí, luego de que la castaña de lentes decidiera venir a visitarla de momento, como igual venia a visitar a Riser. En las sala de su mansión, recibieron a Aika.

Venia a felicitarlos por el éxito de la ultima temporada de tu serie “esposa infiel”, pero por lo vista ya estaban celebrando como siempre~ ―dijo Kiryuu, orgullosa del negocio siempre creciente que ha conseguido―. Con tantos fanáticos tuyos por el mundo, tuvimos que expandirnos de una plataforma de compras de películas a una plataforma digital de paga mensual. Pasamos todas las películas y tuvimos que comenzar a hacer series eróticas para adultos para tener mas demanda.

Distintos hombres protagonizaban con Rias los capitulos, distintos lugares y lugares donde lo hacían y ella decía ninguno estaba al tamaño de Riser. Curioso, pero el esposo ficticio de la carmesí en esta serie llevaba el hombre de Issei ¿Una burla para su ex marido? Puede que si.

Que te puedo decir, esta mujer es una ninfomana que tengo estar dándole a cada rato porque los bobos que pones con ella no le llegan―agarro a Rias de su cintura y la acerco a él, cosa que hizo a Rias reír de forma moderada antes de besarse de nuevo con el rubio a modo que parecía iban a coger de nuevo frente a ella.

Solo mi Riser puede satisfacerme~ ―dijo Rias, que no pasaba ni un minuto sin que desviara su mano a la cosa de Riser y lo frotara sin importar quien.

En serio, controlate Rias ―comento Aika antes de darle un informe a Rias―. Tengo dos noticias para ti, mi estrella número Rias Gremory.

Siguió una actriz porno Rias “la perra carmesí” era su apodo. pero también se volvió una modelo con lo que gano más admiradores, pero con lo que gano en el divorcio con Issei no solo dio una vida de lujos con lo que Riser heredo de su propia familia, Rias creo su propia marca de ropa que ha sido un éxito en el mercado. Cuando se supo que la modelo Rias Phenex era la gran Rias la perra carmesí, su admiración creció y ha sido polémica con la que ha lucrado ella. Creció el número de suscriptores a su plataforma por cien a los dos años de creada la aplicación.

Rias Phenex, llevo diez años como la señora Phenex ―corrigió a la castaña.

A los clientes no les importa tu apellido, cielo~ ―un tema que Aika siempre discutía con Rias y ya era molesto que siempre le buscase corregir―. La serie es tan popular que se ha aprobado hacer una nueva temporada Rias.

¿Cual serie? Esposa infiel o Escuela de placer ―pregunto Rias mientras que Riser sonreía cual egocéntrico es él, por su esposa.

Esposa Infiel” una serie erótica de Rias que se trata… el nombre lo dice todo. Son las historias calientes de una Rias que le pone los cuernos a su esposo en dicha serie (que no es Riser), con su amante (ese si era Riser) y otros hombres con los que se topa, a lo largo de su matrimonio. Sin que el tonto de su marido lo supiera.

Escuela de placer” protagonizaba con Rossweisse y Akeno una segunda serie donde ocupaban a jovenes de recientes 18 años, aspirantes a ser parte de este bajo mundo de placer para escenificar las travesuras de unas profesoras estrictas que les encanta jugar con sus alumnos.

Ambas querida, serán el estreno de mitad de año. Así que prepara ese culo tuyo que vas a sacudirlo mas este año ―exclamo Aika compartiendo ánimos a Rias―, gracias a que convenciste a ese empresario en invertir en nosotros.

Solo use mis dones, Kiryuu.~

Ese don suyo de Rias.

En la oficina de tan aglomerada empresa, Rias hizo poco para seducir al magnate y convencerlo.

Señor julian ―Rias estaba de frente al viejo en su oficina, poniendo su escote sobre su cara―, si invierte su dinero con estudios Oppai, puede salir muy beneficiado.~

Dijo antes de ponerse a sus pies y comenzar a chupar la polla al viejo verde. Usar toda su artillería y volverlo a sentirse joven, Rias.

Eres la mejor, Rias ―adulo sus acciones, Aika. No escucho la historia, pero sabia bien que paso de seguro.

Genial, me pregunto si Issei se pajea viéndome en su pantalla de su sala~ ―ahora se burlaba de su ex marido. Sin preguntarse por que había sido realmente de él.

Seguro lo hace, Rias. Seguro que lo hace ―otra vez y Rias parecía que estaba por ser comida por su esposo.

Tan depravado se volvió el mundo por ver a las ex esposas de Issei gimiendo y siendo unas pervertidas que Kiryuu no solo se ahogaba en dinero, también tuvo que expandir sus metodos de ingreso al mundo de las plataformas de streaming.

 

Asia Astaroth

Otra que se la pasaba cogiendo sin que haya pasado un día sin falta era la inocente Asia, que ya no era tan inocente; se vivía con Diadora en una vida de sol, carne y sexo en Italia.

Diadora-san, que rico~ ―metida en la cama tan elegante, Asia se la pasaba de piernas abiertas para su esposo mencionado, gimiendo y gritando por su nombre de mañana hasta la noche. Paso de ser una inocente temerosa de Dios, a una tonta adicta al sexo y ser consentida por su marido con regalos mientras también jugaba a ser esposa y madre además de ser la vagina del Astaroth que le gusta meterse harina por la nariz de vez en cuando.

Asia-chan eres deliciosa~ ―Diadora tampoco era distinto, obsesionado con la rubia se la lleva viviendo cogiendo a Argento todos los días después de convencerla por dejar a Issei por su pene.

Moo~ Diadora-san me dice eso todos los días desde antes de que nos casamos ―tenia sus manos aferradas a las sabanas de la casa, pasándolas por encima de su cabeza con su trasero levantado mirando a su esposo mientras le besaba con intensidad el cuello―, no pasa ni un momento en que lo estamos haciendo.~

Es porque tu cuerpo me es tan delicioso Asia ―abrazo a la rubia y la levanto, la puso por encima de su regazo mientras él se enderezo sentado sobre sus piernas en la cama, cediendo a Asia el control―. Tu vagina aprieta mi pene de la misma forma que el primer día y el sabor de tu cuerpo es lo mejor que he probado.

Diga más, Diadora-san ―abrazo fuerte, sus manos de Asia por la espalda del peliverde―. Diga que mas le fascinan sobre mi.

Tu pelo es tan hermoso y huele bien ―tomo los largos mechones de pelo de la rubia para olfatearlos fuerte, muy cerca de su nuca de Asia―, el sabor tu sudor es tan rico ―paso su lengua por encima de los pechos de su mujer, pechos que le crecieron a la rubia tras años de cariños intensos, de ser un busto de medida 78, crecieron a ser medida 82.

¡Diadora-san, siga así que estoy por venirme! ―voz fuerte declaro Asia, dejando a su cuerpo moverse con mas velocidad, dejando sensible al peliverde.

¡Asia-chan!

Una potente liberación de Diadora y un fuerte orgasmo hizo gritar de placer a Asia en la habitación de gran decoración de su casa antes de que cayera ella sobre su actual esposo y con él, se dejaran caer en la cama. Agitados pero aun excitados, se deslizo la rubia por el pecho de Diadora hasta poner en su boca, todo el pene de su marido.

¿Vas a limpiar mi pene?

A limpiarlo y exprimirlo más~ ―chupaba la hombría de su esposo con mucha perversión para deleite de sus ojos―, mira Diadora-san. Sus bolas siguen llenas todavía.

Te lo digo siempre… Nunca estoy satisfecho cuando es contigo, Asia ―sonaba agotado, pero nada que un espíritu adicto al sexo de Diadora por su mujer que le bajo a Issei no arreglara.

Les arruinaron la diversión mañanera a Asia el par de hijos que tenia con su Diadora. Uno de nueve y otro de siete; que abrieron la puerta sin preguntar antes.

Mamá, son mas de las diez. Que vamos a desayunar ―dijeron al abrir la puerta los dos hijos de Asia y Diadora, que no se inmutaron al ver a los adultos en pleno acto.

¡Kya!

¡Luca, Marcello! ―grito de enojo Diadora.

A pesar del grito de pavor de Asia, ninguno de los dos les dio por cubrirse o mostrar vergüenza de lo que hacían.

¡Oigan, les hemos dicho que cuando la puerta esta cerrada no me molesten con su padre! ―grito Asia. Como dije, dejo de ser la mujer tímida y cariñosa, pero no solo se volvió mas tonta y pervertida. Como madre era gruñona como amorosa con sus hijos, pero gruñona cuando los hijos de este matrimonio reprobable los interrumpían―. ¡Vamos. Salgan y cierren. Dennos media hora más y hago el desayuno!

Les arrojo una almohada a los dos niños que no se inmutaban con ver a sus padres en pleno acto, ni se preguntaban que hacían. Para ellos era algo natural de presenciar de tales padres que tenían.

La riviera italiana, un paraíso único donde Diadora gracias a los negocios turbios de su familia, tenia una casa en tan costoso país, pero el no necesitaba pagar impuestos ni hacer tantos gastos. En ingresos estaban mas que bien acomodados. Piscina, trabajadores limpiando la casa de diecisiete habitaciones, de las cuales cinco eran de uso exclusivo de Asia y su esposo, además de

¿Les gusto el desayuno? ―pregunto Asia.

Delicioso, cariño ―premio gordo que le quito a Issei, Diadora.

¡Fantástico, mamá!

Se había vuelto coqueta Asia, paso de ser una monja temerosa de Dios, a ser tachada por la iglesia como hipócrita y reprobada mujer, vistiendo en casa ropas atrevidas y muy reveladoras, porque sabía que Diadora en poco momento la estaría follando.



Podías verla en la calle sola o con su familia y pensar sano de Asia, pero la gran mayoría que admiraba sus trabajos memorables, eran películas donde el estudio Oppai de Kiryuu hicieron una serie de tres temporadas de Asia personificando a una monja pervertida, el problema es que dicha serie exitosa fue grabada dentro de una iglesia católica de verdad y… muchos objetos santos fueron mancillados por las obscenidades de la historia.

Una catedral catolica consiguió ser rentada por estudios Oppai y filmada una película para adultos con Asia vestida cual monja real estaba orando a pies de la virgen cuando su esposo Diadora, llegaba encarnando a un criminal que venía a confesarse llegaba con la hermana Asia y era recibido.

Bienvenido a la casa de Dios ―saludaba la tierna monja al criminal.

Hermana, vengo a confesarme ―decía el personaje de Diadora―, he pecado mucho.

Oh no, eso es terrible ―una sobreactuación digna de un oscar.

Miré ―sobre el tabernaculo de la iglesia, Diadora revelaba lo suyo y Asia se ponía a sus pies.

Entraron al confesionario y del lado de Asia, un agujero redondo a cierta medida. Donde el peliverde paso su pene erecto para la monja.

Cuantos pecados hay aquí ―comenzaba masturbando al pecador―, debo limpiar todo el mal que hay en este pene.~

Para no hacerles el cuento largo, lo hicieron sobre el tabernaculo como en la mesa desde donde el padre de la iglesia se dirigía a la consagración en las misas. En vez de llenar de coros y oraciones toda la mesa, la llenaron de gemidos y mancharon el piso de jugos sexuales. Para rematar, usaron la copa de bautizos de la iglesia de forma aberrante para la comunidad eclesiastica cuando se enteraron. En vez de llenar la copa con agua bendita, una desnuda monja llamada Asia, lleno la copa con semen que saco de la polla de su demonio esposo y se bebió todo el contenido.

Ah~ ―sonó la boca de Asia tras beberse todo el contenido de la copa―. Ahora esta absuelto de todo pecado.~

Sus fanáticos enloquecieron de excitación y la iglesia condeno a Asia y a Diadora. Gano muchos admiradores Asia en ese primer capítulo de serie erótica: La Hermana Asia. La iglesia la condeno como apostata, pero eso le dio igual a Asia. Ella vive de placer, lujos y como madre, esposa y trofeo de Diadora; una buena vida según Asia.

Un enlace enviado a su ex esposo, Asia estaba levantada por su esposo que empleaba cierta llave que levantaba las piernas a la rubia y dejaba ver como le daba con todo a la vagina de Asia.

¡Issei-san~ mire, mire… mire como la polla de Diadora-san me hace sentir mujer mucho mas que contigo!~ ―gemía como loca Asia ante la cámara―. El pene de Diadora-san ha sido lo mejor que he conocido, mejor que Issei-san.

¡Aquí va, Asia! ―grito su esposo, disparando todo y llegándose a escurrir de su vagina mientras la tenia levantada en esta pose―. Mira tu… mira el desastre que hice en tu ex esposa

Casarme con el pene de Diadora-san ha sido de lo mas estupendo, Dios gracias por dejarme conocer el pene de mi nuevo esposo y por dejarnos coger mucho por muchos años.~ ―declaro Asia en ese video.

Agarraron la tendencia de burlarse de Issei, a pesar de haber dicho que lo estimaban. Lo querían ver arder en rabia al pobre tonto.

 

Akeno Bael.

Quien también se había mudado lejos era Akeno, se convirtió en la mujer de Sairorg y aunque a diferencia de Asia, no se mudo hasta el otro lado del mundo, se quedo dentro de los limites del japón, pero al igual que con las dos anteriores, pasaron de vivir en una casa común de los suburbios. A una mansión muy espaciosa, mansión de dos niveles con personal y todo, piscina, amplió garaje con los 24 carros de distintas marcas de ensueño de esta familia Bael, no es que Sairorg resultara ser hijo de un grupo mafioso como lo era Diadora, pero igual provenía de una familia millonaria que resulta al igual que le solucionaba la vida. Se la pasaba viviendo en carnalidades con su esposa Akeno dentro y fuera de las cámaras.

¡Sairorg, estas siendo muy brusco esta noche!~ ―gritaba de placer Akeno mientras la polla de su ahora esposo le besaba el útero con cada empuje que la enloquecía en gemidos.

Lo dices como si fuera algo que no suelo hacerte ―sus manos estaban puestas en las caderas sensuales de la pelinegra, pasando a castigar su trasero de paso―. ¡Se bien cuanto te gusta que te castigue y te trate como una perra!

La tenia en cuatro sobre una cama redonda que tenían al aire libre en el extenso balcón en el segundo piso de lado de su habitación. Dos camas en un cuarto, uno para dormir en un mar de placer y sabanas, mientras que el segundo erá lo mismo, bueno; era más para placer que solamente dormir, salvo que estaba al aire libre.

Es que se siente genial, eres el mejor Sairorg~ ―un gemido tan pervertido que sacaba lo mejor de la voz de Akeno, sonando por todo el patio trasero la mano de su segundo esposo.

Pero luego de dejar marcada su mano en las nalgas de la pelinegra; tomo la pierna izquierda de su esposa, jalo de ella para ponerla mas cerca levantando su pierna, le clavo su polla en el agujero de su culo.

¡Ouh!~ ―gimió increíble Akeno, siendo domada por su―. ¡Eso, sigue así. Castiga mi cuerpo, cielo!~

Claro que voy a castigarte, después de tu pequeña travesura de la tarde ―comento Sairorg.

Durante la tarde de ese, cuando actuaba como esposa, Akeno había terminado de hacer ella misma el almuerzo para cuando su físico culturista esposo llegase de la escuela con el hijo que tenían. Llego un camión de paquetería a la casa y a pesar de contar con personal en esta casa que podía encargarse de recibir y atender al enviado de paquetería, Akeno lo atendía personalmente y por una razón.

Buenos días, Bael-san ―saludo el joven de entregas con mucho rubor en la cara cada vez que venía hasta tal enorme residencia para deleitarse viendo a la esposa de Sairorg. De adoptar el apellido de Issei, adopto el apellido de Sairorg tras casarse.

Moo~ sabes que puedes decirme, Akeno. Morita-kun ―vistiendo una simple blusa de tirantes, y una bermudas ajustadas, la pelinegra miraba con agrado al joven repartidor.

Traje un pedido para Sairorg-san, un nuevo juego de pesas de acero fundido ―se quedaba mirando como idiota a Akeno y el gran escote que siempre dejaba que viera.

¿No hay ningún paquete para mi esta vez? ―empezó a actuar coqueta, Akeno le gustaba jugar rico con los de paquetería, aunque lo cambiaran por alguien joven o por alguien más maduro―. No hay nada especial para mi.~


 

Esa era la señal del repartidor. Verla inclinar su cuerpo para exponer su escote y él debía mostrar lo suyo.

Si, este paquete especial es para usted, Bael-san ―saco su hombría mostrándose un idiota, a lo que Akeno se puso al nivel adecuado para tomarlo con su boca.

Ciertamente es una entrega especial ―en la puerta de la mansión, Akeno se puso a chupar la polla de otro que no era Sairorg y eso era común que las de limpieza en casa sabían. Sabían que a pesar de estar casados, ellos eran un matrimonio abierto. Además de que en ocasiones, Sairorg y Akeno las metían en sus actividades―, es hora de darte tu propina.

Con propina, Akeno se refería a usar también sus pechos para complacer de mejor manera al repartidor. Al igual que con Rias, lo primero que los hombres veían en ella eran sus dotes que crecieron más ahora que estaba casada con Sairorg y que este le terminara haciendo un hijo. De 102 cm. Ahora eran 108 en medida. Una experiencia celestial que daba a Sairorg y a hombres dentro como fuera del escenario de las películas eróticas que seguía haciendo.

Bael-san… ¡me voy a venir! ―no duraba nada el chico, con su pene atrapado en los suaves senos de la ángel caído y la punta de su hombría en la boca de la mujer, disparo lo suyo en su cara.

Esa era la razón por la que Sairorg se portaba rudo con su esposa, aunque él sabia que Akeno estaba disfrutando el castigo así como él disfrutaba siempre del cuerpo de la pelinegra.

Seguían calientes y es que la noche apenas estaba comenzando, con un movimiento audaz. Himejima cambio lugares con su esposo y ahora él estaba debajo de ella, paso de tener la polla de Sairorg de su culo a su coño, donde debía. Siempre quedaba impresionado con el talento de la pelinegra para invertir lugares en la cama y pasar de ser dominada, a ser la dominante. Tomo el grueso pene de su esposo y Akeno se lo clavo muy fácil. Sairorg solo gimió de manera muy masculina, antes de poner sus manos debajo de su cabeza, para ver como disfrutar del talento de su esposa.

Que puedo decir, soy una mujer muy puta~ ―doble símbolo de paz hacia Akeno con sus manos mientras era castigada con placer―. Además, ningún otro hombre me satisface como tu, Sairorg.~ moldeaste mi vagina para que solo tu me hagas llegar al cielo.~

Diez años siendo mi mujer, dime te imaginabas una vida así si seguías con ese Issei ―le pregunto.

No cambiaría mi nuevo estilo de vida por volver con Issei ―declaro Akeno―, vivir como tu esposa puta es lo mejor ―llevo sus manos a su cabello y lo revolvió, antes de comenzar a mover con mas intensidad su culo sobre Sairorg―. Amo el sabor de los penes y su textura, pero el de Sairorg es el mejor.

¡Ven aquí! ―atrapo a Akeno y de nuevo la puso debajo de él, clavando con mas intensidad su hombría, la punta de su polla traspasaba la entrada del útero de Akeno, entraba y le salía en un maremoto orgásmico que la enloquecían.

¡Sairorg… sigue así Sairorg que estoy por… estoy por!

Se la saco el Bael y vio con mejor apreciación como el cuerpo de Akeno se contorsionaba mientras su vagina disparaba un fuerte chorro de sus jugos manchando toda la sabana. Y cuando el cuerpo de Akeno se acento en el colchón, vino Sairorg y puso su pene en boca de ella para echarle su semen aquí como por toda su cara.

En un club privado para hombres, sobre el escenario, una mujer vino sobre la pasarela hacia el publico y las luces se encendieron cuando ella llego al tubo de baila, lo que hizo a todos los invitados emocionarse. Era Akeno, vistiendo un mini bikini de color verde.

Con ustedes, la mujer que hace que los hombres queden secos…. ¡Diosa del relampago, Akeno Bael! ―se escucho por el altavoz antes de que la luz iluminara a la codisiosa mujer. Diva, tonta, lasciva de mente y su cuerpo también. Ninfomana que vivía rodeada de lujos y éxito sumado más placer.

Hola queridos~ ―saludo Akeno a sus fanáticos reunidos a sus pies, antes de dar un espectáculo de baile usando ese tubo pulido de metal.

Para todos estos perdedores y calenturientos, trataban y veían a la pelinegra como si fuera una idol o parecida. Un baile lleno de victoreos y gritos por ella que la hacían emocionarse más por dar el verdadero espectáculo para sus fans. Un espectáculo que transmitían en vivo por la aplicación del estudio Oppai casi a diario.

Que dicen, si nos divertidos todos ―exclamo, removiendo su bragas del juego de playa que tenia y revelaba su vagina mojada y escurriéndose.

Como bestias, se subieron a la pasarela y rodeando a Akeno, todos tuvieron la oportunidad de tirar con ella. Evento que Sairorg le patrocinaba. 


 

¿Estás grabando? ―pregunto Akeno con una sonrisa. El evento de antes, acababa de terminar y solo quedaba ella de pie en el club, con Sairorg detrás de la cámara. Todos los invitados terminaron secos al piso―. ¡Hola Issei! ¿Como estás?~ mira cuanto semen logramos juntar esta vez.~

Dos tarros de cerveza de 1.2 litros tenía Akeno, llenos pero no de cerveza. Una actividad que la pelinegra himejima hacia al final de cada transmisión lograda en este club, algo que hacia tras bambilinas.

Quieres verme tomar todo esto, querido~

Seguro que si quiere ―dijo Sairorg con la cámara en manos.

Como si fuera agua, Akeno se bebió ambas copas una por una, hasta el fondo; suspirando al llegar al final de cada tarro como si hubiera tomado un resfresco de cola.

¡Aaaah! Delicioso~ ―dejo los tarros a un lado, para acercarse a su actual esposo y sacar su pene frente a su cara y la cámara―, pero el semen sabe mucho mejor si lo chupo directo de Sairorg.~

¡Tu esposa lleva diez años chupando mi polla como si fuera un dulce amigo y montando la como si mi pene fuera el de un toro, es fabulosa! ―dijo Sairorg a la cámara.

Sairorg es un toro que hace mugir como vaca en la cama~ ―sucia y pervertida, mas de lo que alguna vez fue Akeno, ahora lo era mucho más.

 

Irina Lucifer

Hasta los ángeles pueden caer. Se fue con Vali, Irina; tras un mes de separarse de Issei. Al igual que Asia, se fue con su nuevo esposo a un paraíso tropical donde los lujos y el placer que tenia con el peliplateado eran abundantes, lo único que tuvo que hacer fue entregarse al demonio y vivir como reina. Irina Shidou.

¡Oye, se supone que deberías haber terminado tu tarea! ―regañaba Irina al hijo de diez años que tenia con su esposo de ahora, uno que surgió después de esa noche de pasión y traición en las Vegas―. Milo, los ojos de mamá están aquí.

Ella al igual que las otras, vestía de maneras “indecentes” dentro como fuera de casa, para gusto y peticiones de Vali.


 

Sino terminas tu tarea no habrá cine para ti ―salió de brazos cruzados Irina sin mirar a su hijo, antes de cerrarle la puerta de su habitación, momento en el pasillo en el que pasaba Vali cargando a la bebé de seis meses que recientemente tuvieron en su hombro.

Vamos, solo tiene diez años Irina ―dijo Vali con delicadeza de no despertar a la bebé.

¡Hum! Eso es porque lo conscientes todo el tiempo, Vali ―exclamo de cara a su marido, antes de cambiar su cara por una sonrisa―, ven dame a Elise.~

Vivían en la rivera francesa, muy cerca de Asia (la monja, no el continente). Era el mismo caso que las tres anteriores, lujos, una mansión lujosa y con autos de marcas exóticas, lamborghini, ferrari y otras que se te ocurran. Como las anteriores, ella y su esposo siguieron siendo celebridades de cine adulto, siendo Irina mas popular que Vali aun trabajando para el sello del estudio Oppai de Kiryuu. Quedo embarazada y tras casi perder a su bebé, Irina vivió feliz con Vali a pesar de que el médico les dijo que seria un milagro si pudiera volver a embarazarse tras una cesaría. Pero luego de diez años, consiguieron una niña. Ambos sacaron el caballo de su padre.

Allí estás a salvo ―pusieron a la bebé en su cuna mientras dormían.

¿Y ahora? ―pregunto Vali cuando puso su mano izquierda por detrás de la cintura de su mujer―. Continuamos donde nos quedamos en la mañana.

En el dormitorio del matrimonio, tiro Irina a su esposo de ahora sobre la cama luego de que Vali se quitara la ropa, levanto su pie y con su tacones puestos, froto el dormido pene del diablo hasta excitarlo.

Te gusta que use mis pies verdad ―exclamo arrogante Irina, pero ansiosa por ese pedazo de pene que la corrompió.

Je~ ―soltó un simple gemido Vali―, ven aquí mi ángel.

Primero lo primero, puso en su boca la cosa de Vali y disfruto de su sabor como de su tamaño en su boca Irina haciendo a su esposo mirarla con egocentrismo por la atractiva mujer que tenia como esposa. Luego de saborearla, sin dejarlo llegarlo al éxtasis, Irina se subió a la cara de Vali y fue le frotando su trasero, a lo que el Lucifer le encantaba. Prefería tener el trasero de la ángel en su cara por encima de sus pechos. Los cuales no estaban mal en tamaño (del número 86 pasaron a medir 92cm.), simplemente prefería saborear la vagina de Irina que sus pechos.

Vali, adoro tu lengua mi amor~ ―gemía sin igual Irina, aunque tal vez solo habían otras siete que igualaban su voz pero en otras calidades. Se dio la vuelta sin despegar su culo y puso su cara a lado del empalme de Vali―, lo tengo todos los días y aun así cuando lo tengo en la cara me hace sentir como una cualquiera.

Dijo acerca del pene de Vali, antes de poner en sus fauces el pedazo de carne de su esposo y envolver sus pechos alrededor de lo largo que era para aumentar el nivel de satisfacción

Admítelo Irina, es una ninfomana ―Vali no dejaba de besar los labios vaginales de Irina.

Más que eso, soy una adicta… soy una adicta a mi esposo Vali y su insaciable pene que me da amor cada día ―de exprimirse mutuamente con sus bocas, paso a ser domesticada por el peliplateado que le empujaba su hombría y las paredes de vagina se moldearon a él.

Como me gusta ver a mi ángel poner caras sucias y escucharte pedir por más ―enterraba profundo su polla, Vali.

Es porque tu pene es un demonio que corrompió de amor lascivo a está ángel ―adopto el apellido de Vali, se llamaba Irina Lucifer en estos tiempos actuales―. Dame más y hazme llegar al cielo, amor.~

Mira Elohim, mira como tu ángel clama mas por mi pene que por ti ―la puso encima de él y con la vista al techo a Irina, abrió sus piernas mientras Vali le daba duro.

Mira como me mojo con la polla de mi esposo Vali, Dios gracias por bendecirnos con dos buenos hijos y danos más, por favor ―hacia un doble símbolo de paz―. ¡Deja que tengamos mucho sexo por muchos años más, amén!

Y es que Irina también había sido tachada por la iglesia como apostata, pero le dio igual. Ella contesto que si Dios así quisiera, no los había bendecido con dos hijos. No solo la llamaban apostata por usar su crucijifo en las películas de tinte erótico que protagonizaba o porque participaba en la misma serie que Asia tenia en la plataforma Oppai y que iban por la sexta temporada.

La razón, es porque en una iglesia antigua de España, Irina y Vali se escabulleron al campanario de la catedral en plena misa dominical donde pasaron todo el sermón follando. Vali levanto a Irina de las piernas y la expuso en la ventana del campanario mientras sonaban (las campanas) exponiendo su cuerpo mientras la llenaba y ella gemía de locura. Algo que grabaron y subieron a Oppai y se volvió polémica, como les valió ser expulsados de España.

Irina eres tan ruidosa ―regañaba Vali entre risas a Irina cuando se la estuvo cogiendo en aquel sitio.

Es culpa tuya, Vali~ ―dijo la ángel, antes de besarlo―, es el aniversario de bodas mas rico que tenido ―le pregunto que si era mejor que haber tenido uno con Issei, a lo que ella contesto―, es mucho mejor que cualquier aniversario que tuve con mi ex.~

 

Xenovia Glasia-labolas

Quien también se la pasaba viviendo en europa era Xenovia, en planicies Griegas dentro de una residencia privada. Vivía como todas las ex mujeres de Issei, como reina en una gran mansión, personal y guardias privados pertenecientes a una familia aliada de los Astaroth en el negocio de reciclaje. Autos, yate de placer privado, un avión privados. Autos de marca para cualquiera ocasión, un cuarto lleno de ropas que hacian voltear la vista y la de Zephyndor en cualquier momento.

Con una bandeja de plata y un vaso de cristal lleno de limonada mezclada con alcohol, salió al patio trasero Xenovia para llevárselo a su joven marido. Este cortaba leña en el bosque trasero de la casa y andaba bajo el sol, sudando sin camisa.


 

Hace mucho calor, te traje algo de beber ―la mirada de su rojizo esposo paso de una comprometida con su trabajo a una presumida, presumido que era por tener semejante mujer como suya y un anillo en sus manos lo comprobaban―. ¿Te apetece, Zephyndor?

¡Claro que si! ―tomo el vaso y hasta el fondo se bebió hasta sentir el frió contrarrestando el calor del sol―. ¡Aahh, tu sabes como me gusta!

Que piensas hacer con toda esa madera ―pregunto Xenovia, bajo la bandeja y la cargo bajo su brazo.

Un calabozo ―exclamo Zephyndor, poniendo el hacha sobre su hombre y mirando con éxito el montón de madera cortada por él.

¿Un calabozo sensual para mi?~ ―acaricio la barbilla de su actual marido y antes de que pudiera besarlo, les interrumpieron.

¿Que es un calabozo sexual?

¡Mocoso entrometido, tu madre y yo estamos ocupados! ―regaño Zephyndor, no era el mejor padre.

Hans ¿terminaste tu tarea? ―Xenovia si era buena madre.

Si ―respondió simplemente el niño, era casi una impresión de su madre solo que en másculino.

Porque no vas a jugar con tus videojuegos o algo ―una seña de Xenovia para que vaya adentro.

Esta bien ―volvió a la mansión sin mas rezongadas. Lo que a Zephyndor le molesto.

Ese niño es inoportuno.

Necesita pasar mas tiempo con su padre ―tomo la barbilla de su esposo y lo hizo mirarlo―, debes pasar mas tiempo con nuestro hijo.

¿Que le voy a enseñar, a apostar?

Eso nos ha valido nuestro estilo de vida.

Es cierto, a diferencia de Diadora, Zephyndor no era tan apoyado por su familia. A pesar de tener elementos de seguridad y criadas en la mansión a causa de su apellido. La razón por la que vivía rodeado de lujos era porque tenía un gran talento para las apuestas en casi todos los juegos. Gano tanto que termino comprando una serie de casinos y con los que ha hecho mucho negocio.

Lo único que necesita es aprender a contar y tener un amuleto de la suerte siempre consigo ―dejo el hacha y agarro a Xenovia por su cintura, la acerco a él y le planto un buen beso que ella le correspondió.

Se escabulleron detrás de los arboles que le restaban a Zephyndor por contar y levanto a Xenovia de su trasero, la puso de espaldas sobre el tronco para poder cogerla mejor.

Oh si, querido~ ―tenia la boca de su esposo en sus pechos mientras la tomaba con fuerza y enterraba profundo su pene―. Golpea mas duro, Zephyndor… hazme gemir como tu perra.~

A mi perra lo que me pida ―le escucho decir.

Llevo sus manos a la espalda de la peliazul y la levanto, la separo del árbol para sostenerla solo con sus fuerzas. La sentía genial Xenovia que su voz se descontrolaba y Zephyndor poco le importaba eso.

Eso es… ya viene… dámelo todo, amor~ ―decía Xenovia, antes de sentir la llenada de su esposo.

Papá, mamá no vieron mi Nintendo Switch ―apareció detrás de los arboles, el niño.

¡Hans! ―regaño Xenovia. Seguía en brazos de su esposo, Zephyndor no la bajo ni nada. No iba dejar que su hijo le arruinara la tarde―. Te he dicho que cuando estoy ocupada con tu padre nos dejes.

Están así todos el tiempo ―dijo con un ceño fruncido.

Lo entenderás cuando tengas a tu chica, muchacho ―exclamo Zephyndor―, ve a dentro y busca en la mochila, seguro que te lo llevaste a la escuela otra vez. No vamos a comprarte otro niño, es el quinto que pierdes.

Se dio la vuelta y se fue frustrado, el hijo.

No tiene remedio ―comento Zephyndor.

Sabes que le vendría bien además de que pases mas tiempo con él ―decía Xenovia―, unos hermanitos.

¿Dices que la fabrica de bebés quiere producir luego de diez años? ―pregunto.

Se me acabaron los anticonceptivos esta semana ―comento la peliazul.

No eran los mejores padres, pero se esforzaban, al menos ese niño seria mejor hermano mayor. Traer casinos a Grecia levanto la economía y el turismo del país.

 

Ravel Lucifer

Dicen que las noches en Rusia son frías, largas y solitarias; pero nada que un poco de calor y la compañía adecuada no solucionen. Gran mansión en la ciudad de san Petersburgo en la alta zona de la sociedad disfrutaba de un retiro agradable Rizevim en compañía de su joven esposa Ravel.

Esto es vida ―disfrutaba el viejo hombre en la sala de su casa con una copa de brandi en la mano mientras veía una película del estudio Oppai en la pantalla de 86 pulgadas sobre la chimenea encendida.

Quieres más, Rizevim-sama~ ―Ravel yacía sentada junto a él en el sofá llevando ropas mas decentes que todas las anteriores, pero eso no le quitaba el hecho que Rizevim tuviera taco de ojo con el atractivo de la rubia hermana menor de Riser.

Muchas gracias querida ―exclamo, apreciando el ángulo de Ravel mientras le rellenaba la copa.


 

Era contador de muchas empresas Rizevim, lo que le aseguraba muchas buenas pagas. Pero no le vinieron nada mal extraer las ganancias extra que encontraba en las cuentas de algunas empresas, empresas a las que con ayuda de Ravel, pudo chantajear Rizevim para que no hicieran a la policía investigarlos, dado que esos fondos habían sido desvíos de fondos hechas por ellas en un primer comienzo. Ladrón que roba a ladrón, tiene diez mil años de perdón. En este caso, tiene diez mil millones de miles en una cuenta intocable.

Ya estaba viejo Rizevim, sin embargo para ya estar en sus setenta años. El hombre se conservaba con una movilidad envidiable, él decía que su secreto estaba en su segunda y joven esposa.

¡Oops, que torpe! ―de forma agrede, el peliplateado hombre dejo caer parte de su copa sobre su bata café, específicamente en la entrepierna. Lo que Ravel volteo a ver con leve asombro.

Ciertamente torpe, Rizevim-sama~ ―dijo divertida Ravel, sabia porque hacia esto su esposo. Era un juego de ambos.

Ya soy viejo querida, serías tan amable para atender a tu anciano esposo ―pidiendo clemencia, Ravel soltó una carcajada ante el cinismo con el que su nuevo esposo jugaban.

Tomo un trapo blanco que tenía listo Ravel y comenzó a frotar el área manchada, llegando a pegar su pecho en el brazo de Rizevim, a lo que él sonrió con malicia.

Oh vaya, esto también se mancho ―saco Ravel el pene del viejo Lucifer, el que de solo estar tocando por poco tiempo se puso tieso―, lo mejor es que lo limpie.

Lo que hizo, usando su boca.

Ouh Ravel ―la boca de la rubia de cabello canario lo hacia conocer el cielo a pesar de su alta edad. Pero luego subió al nirvana, Rizevim; cuando su joven esposa empezó a usar sus pechos para estimularlo más.

Que tal se siente Rizevim-sama~ ―la punta de su lengua daba vueltas alrededor de la cabeza de la polla del anciano por el que Ravel cambio a Issei―, se siente mejor.~

Claro que si querida esposa, pero sabes que me haría sentir mucho más ―decía el viejo demonio llevando su mano al rostro de la Phenex.

Acostado sobre una alfombra de piel, Rizevim miraba cual idiota embobado a Ravel que estaba parada por encima de su cara, con las piernas abiertas dejando ver que bajo la falda de su ropa no tenia bragas algunas. Con la cara ruborizada, la rubia se sentó de cunclillas sobre la cara del Lucifer y con las piernas abiertas, soltó una lluvia dorada a la boca de su esposo. Se bebió la embriagante bebida natural hasta la ultima gota.

¿Como estuvo, querido? ―pregunto Ravel, una vez que la ultima gota cayó de su vagina a la lengua de su esposo.

Deliciosa Ravel, el agua de tu fuente de mi juventud estuvo deliciosa ―exclamo el peligris―, adelante. Se que lo quieres.

Hablaba de su pene vuelto roca. Sobre el que Ravel se sentó, lo tomo con mucha facilidad su vagina a pesar de ser largo y grande, el interior de Ravel se logro moldear todos estos años para disfrutar del enorme pedazo de polla que tenia este viejo.

Rizevim-sama su pene me llena por completo, me hace olvidar que soy su esposa y solo soy una mujer ―de arriba a abajo Ravel movía su cuerpo de forma intensa, devorando por completo su hombría―, cuando esta dentro solo soy una sucia mujer que le encanta montar el pene de su esposo.

Claro que si querida, mi pene es todo tuyo y mi fortuna también lo seré ―dijo Rizevim, su voz se cortaba por instantes dado la intensidad de la rubia de baja estatura.

Me interesa más el pene de Rizevim-sama que la fortuna ―a pesar de su edad, y que no era probable que el viejo hombre partiera con san pedro pronto, la fortuna caería realmente sobre los cuatro hijos que ha tenido hasta ahora con él. Acalorada, Ravel se quito su blusa y quedo desnuda totalmente mientras seguía montando el gran dote de su esposo anciano―. Yo se que todo el dinero que tiene será para nuestros hijos.~

Cierto… será para esos cuatro, pero tu lo administrarás por esos mocosos ―se burlaba Rizevim, pero entonces sintió a Ravel detenerse. Lo que escucharía lo dejaría perplejo por un momento.

Cinco ―Ravel hizo el número con sus dedos.

¿Que?… ¿Es en serio? ―se punso tensó de los nervios el demonio.

Jajaja~ Rizevim-sama aun le quedan muchos soldados en las bolas ―aplastaba su polla hasta chocar con sus testículos, Ravel―, me aseguraré de tenerlos a todos antes de ya no pueda ponerse duro.~

¡Ven aquí!

Puso sus manos sobre su rubia esposa y la puso por debajo suya, tomo el control cual salvaje hombre, empujando su pene con desesperación y agresividad estaba Rizevim. Ver la cara de loca que hacia su mujer mientras aplastaba su matriz eran el séptimo arte para el Lucifer.

¡Me aseguraré de que des a luz a mis hijos hasta que caigas, Ravel! ―grito Rizevim en frenesí embistiendo su polla.

¡Con mucho, Rizevim-sama! ¡con mucho gusto daré a luz a todos los hijos que quiera, solo no deje dar tanto placer, por favor! ―decía entre gemidos, una cara de perra en celo le ponía al viejo.

A mi tierna esposa lo que quiera ―sembró su boca en la de Ravel, en un beso de lengua donde la rubia era dominada, momento en el que el demonio viejo liberaba su esencia en el útero de su mujer.

Recordando el pasado, la primera vez en la que Ravel quedo embarazada del primer hijo de Rizevim, luego de que Vali preñara a Irina y que lo diera a luz. Vino Rizevim a mostrarle a su propio primogenito lo que aun podía hacer a su edad.

¿En serio, viejo? ―Vali estaba que no creía, al ver el estomago de seis meses de Ravel―. ¿A tu edad, pudiste embarazarla?

Muchas felicidades, Ravel.

Gracias, Irina o debería decirte, mi cuñada.~

¡No voy a decirte madre! ―levanto la voz el hijo de Rizevim.

Mas respeto a tu nueva madre muchacho ―levanto la voz a Vali.

No va a ser mi hermano ese niño, niña ―señalo al bebé que tenia Ravel en el vientre―, ya es malo que no me des herencia como para hacerme esto.

Por favor, tu ya tienes tu fortuna muchacho malagradecido.

Ya ya ―Irina y Ravel los calmaron―, podemos decir que son primos y ya esta.

Pero volviendo a Rusia en la fría pero cálida noche de pasión frente a la fogata. Ravel estaba en cuatro y siendo ella quien aporreaba su trasero contra la pelvis de Rizevim mientras reía.

Ya quiero ver la cara de Vali cuando vea que su padre me embarazo por quinta vez y estando mas viejo ―exclamo entre risas y gemidos Ravel.

La cara de enojo que pondrá… ¡Oh si! ―tomo a su esposa por sus caderas y comenzó a empujar con mas fuerza, volviéndose loco para terminar eyaculando en las paredes de Ravel, disparando fuera también. Sobre el trasero de la Phenex―. ¿Dime y ese chico que era tu anterior esposo?

Issei, él ya no me importa. Seguro se volverá mas loco cuando sepa que di a luz a tantos hijos con mi viejo esposo que con él ―exclamo Ravel luego de perder el aire por un momento, caer sobre la extensa alfombra con el trasero en alto y cubierto de semen―. Seria muy gracioso de ver.

La lujuria corrompe mi amigo, la codicia. La avaricia. La estupidez también.

 

Koneko Vladi.

Una residencia privada en la vieja Rumania, asistió Gasper a la fiesta de aniversario de sus padres, con la compañía de su esposa Koneko. Ambos habían crecido estos diez años y se notaban mas adultos, sus cuerpos; grata presencia reconocida por los padres de Gasper cuando les recibieron por el resto de la familia.

¡Hijo, Koneko-chan. Cuanto nos alegran verlos! ―un cálido recibimiento de los padres de su esposo, una vez pisaron la sala de la gran casa, residencia donde vivían los suegros de Koneko.

A nosotros nos alegra verlos también. Papá, Mamá ―exclamo Gasper cuando estaba en el abrazo de sus padres―, esto es para ustedes. Koneko misma lo escogió.

No era necesario ―dijo la madre del pálido vampiro.

Nada será mejor regalo que la fantástica esposa que tienes hijo ―comentaba el padre orgulloso de su hijo mas de lo que nunca había estado―. Por un momento y pensé que mi hijo pasaría toda la vida siendo un travesti, pero cuando vino mi hijo a presentarme a su primera novia, lloré de alegría.

Con un elegante, refinado vestido tradicional japones acompañaba Koneko a por quién dejo a Issei. Gasper a través de estos años se había vuelto mas varonil y cambio su forma de vestir e incluso se notaba mas masculino y la gente no confundía el sexo del vampiro por más. Estos dos cruzaron miradas un poco nerviosas antes de reír entre ellos.

Bueno, no fue amor a primera vista, pero en cada cita me fui enamorando más de Koneko-chan ―exclamo Gasper, agarrando a Koneko de su cintura, pasando su mano por la espalda de su mujer.

La fiesta era elegante y refinada. Amigos y conocidos de los padres de Gasper, pertenecientes a familias mas antiguas como extensas, habían aceptado al vampiro y todo gracias a Koneko. Después de aquella noche en Las Vegas, riguroso entrenamiento sobre el vampiro y Gasper termino enamorándose de nekomata a pesar de que ella lo hizo primero, atraído por la idea de llegar a preñar a la albina durante este período intenso de entrenamiento. Luego de que ella dejara a Issei y él por impulso la invitará a vivir con él, Gasper puso todo su esfuerzo para preñarla, antes de pedirle matrimonio formalmente.

Es la señorita Koneko Vladi y Gasper ¿Donde dejaron a sus hijos? ―saludaron las esposas de los invitados a Koneko cuando ella y Gasper saludaban al resto de invitados mientras disfrutaban una buena bebida.

Ellos están con los otros en el jardín ―dijo Koneko, al mezclarse con gente de alta alcurnia la hizo ser mas sociable, mas expresiva. Junto a gasper, se regodíaban con gente exitosa y políticos de distintos países de casi toda Europa y el este de Asia, de su japón a Corea y Rusia.

Señorita Hellcat, es mas hermosa de cerca ―saludaban algunos caballeros con gran etiqueta a la albina, tomando la mano de la nekomata para darle un beso en la mano. Lo cual la halagaba mucho, no se dejaba engatusar por tantos halagos.

Deje que le diga que mi esposa y yo somos admiradores de sus producciones, Koneko-san ―otro hombre entre este grupo adulaba a la albina, sin perder los modales.

Gasper realmente es un hombre afortunado por hacerle hijos a tan benevolente belleza como la suya ―no se dejaba incomodar ni ceder con todos los halagos.

Lo es ―dijo Koneko, por su esposo vampiro―, aunque fui yo quien lo hizo un hombre afortunado.

Quiero preguntarle algo. Es que estoy ansioso por ver a la maravillosa Hellcat en una nueva temporada ―pregunto un maduro hombre entre la bola europea.

Lo lamento, pero solo puedo decir que la octava temporada esta en borradores todavía. Sino yo estuviese aquí con mi amado Gasper.~ ―supo hacer su propia mascara de diva y usarla a su beneficio.

Hellcat vs las fuerzas del bien” una parodia de contenido adulto excitante original de la plataforma Oppai, una serie protagonizada por Koneko encarnando a su personaje mas apreciado por los sin que hacer que hay en el mundo. Hellcat. La mujer con habilidades de gato que busca dominar al mundo y derrota a todos los que se interpongan en su camino. Pequeña en altura, pero grande al convertir a los hombres en perros a sus pies.

Ellos no lo saben, pero muchos el villano masculino principal de la historia y rival eterno de Hellcat, era interpretado por su esposo Gasper, que usaba una mascará de rostro completo, su voz era modulada. Los padres del vampiro se enteraron de esto, pues Gasper no les oculto el hecho de que conoció a Koneko porque el tio del travesti vampiro quiso enderezarlo y que ella se dedica al entretenimiento adulto, aunque ella estaba en sus comienzos cuando se conocieron. Pensando que reprobarían su relación ya que antes cuando presento a Koneko la primera vez, sus padres dijeron que le estaban consiguiendo una prometida para ser la ultima esperanza de ser enderezado pero mandaron esa propuesta al carajo. Como mandaron al carajo todo pensamiento de su hijo por creer que ellos lo desaprobarían.

Así que nos volvemos a ver, Hellcat ―decía Gasper en uno de sus inrterpretaciones de la tercera temporada de esta serie, hace varios años.

En un laboratorio que Hellcat ataco previamente, la gatubela del mundo de Kiryuu tenia a su rival encontrado.

Conde, no entendiste que solo uno de nosotros gobernara el mundo al final ―desafiaba la malvada Hellcat al personaje de su esposo en el capitulo.

Acepta mi oferta y domina el mundo junto a mi ―exclamo el conde, cual darth Vader agitando su puño mientras se aproximaba a ella. Él era un vampiro demonio―, con mis ejércitos y tu fuerza aplastaremos a todos los que intenten impedirnos el triunfo.

Acaso quieres la revancha de la ultima vez~ ―era la señal, donde la trama del capítulo era mas interesante que toda la demás trama. Se subió Koneko a la mesa y luciendo su cuerpo, puso su cabeza fuera de esa mesa en ensayos, con su mano alrededor de su boca―. Entonces ven a mi, y muéstrame que tienes, Conde.~ 


 

Una profunda batalla le dio el conde y su largo sable que profundos golpes le dio en su cuello, donde le dejo escurriendo su blanca sangre por toda la boca de Hellcat. Pero las verdaderas batallas ocurrían fuera del set.

De vuelta al hotel donde se hospedaban, Koneko yacía sobre su nuevo esposo luego de dejar durmiendo a los niños en la otra habitación de la suite que se alquilaron, pues el dinero que ganaban les hacia disfrutar los placeres de la vida, pero el mayor placer era el de tener el cuerpo del otro para si solos.

Koneko-chan~ ―miraba como bobo el vampiro a su nekomata esposa encima de él, desnuda, con la mascara de su personaje hellcat en mano.

Esos hombres pensaban que con palabras elegantes y buenos modales iban a poder hacerme interpretar a Hellcat en su cama ―decía la albina, aplastando con su vagina el erecto pene de su esposo, el que frotaba con su trasero―, pero Hellcat le pertenece a Gasper-kun.~

Lo siento, Hellcat ―exclamo con un vació, lo que con un principio confundió a la albina, antes de hacerla sonreír―, pero yo amo a Koneko-chan por encima de Hellcat.

Esta bien ―como dije, eso hizo que Toujou sonriera y se quitara a la máscara un momento―, pero dejame decirte, Gasper-kun que tu querida Koneko-chan es la infame villana Hellcat.

¡Lo se, pero en esta noche quiero a mi esposa, Koneko! ―emocionado, el vampiro se fue de brazos abiertos sobre su esposa y la derribo en la cama.

Una pequeña risa soltó Koneko luego de que su vampiro esposo la tomo con fuerza y sembro sus labios por todo su cuerpo, besando de su cuello a los ya no tan pequeños pechos de su nekomata esposa. Después de preñarla tres veces hasta ahora, su busto creció hasta medir la linda talla 80. Pero en medio de los besos.

Gasper, quien había hecho de su cuerpo ser mas distinguido y hecho crecer algunos de sus músculos. Siendo sinceros, decidió volverse un hombre, dejar de ser un simple debilucho, todo en poco tiempo para que en la boda, saliera Gasper cargando a Koneko. Todo por su amada.

Gasper, te has vuelto más audaz~ ―reconoció la albina, ahora que el vampiro puso su pene dentro de ella y él tenia todo el control.

Todo por Koneko-chan ―dijo el pálido vampiro, pegando su frente sobre la de su esposa.

Esposa que le quito a Issei.

 

Rossweisse.

Ella, a pasar de los años, no tiene una pareja clara. Ni siquiera vive en matrimonio, se la vive jugando con sus dos compañeros del trabajo del estudio Oppai, si es que no esta trabajando como anfitriona en el club de caballeros que abrió en japón.

Buenas noches, estimados caballeros~ ―bajaba Rossweisse por una escalera en espiral ligera con un vestido muy atrevido, muy elegante se veía la valquiria a pesar de bajar con tales ropas puesta. Llego al final, donde un enmascarado Motohama la recibió de mano, como escolta que era junto a su amigo Matsuda, del otro lado de la escalera.

¡Es Ross-chan! ―mencionaron con entusiasmo y deseo el nombre de la valquiria de cabello grisaseo que les recibía en tal residencia elegante que era fachada de un negocio un poco turbio.


 

Les doy la bienvenida a nuestro humilde centro de trabajo ―hizo una leve reverencia a este enorme grupo de hombres de una elite de tener―, por favor siganme a la sala de diversiones.

Bajo escolta de los dos varones que no se despegaban de ella, guió Rossweisse a este grupo ha dicha sala de puertas cerradas y al abrirlas, un enorme pabellón. Donde una serie de chicas, jóvenes y maduras, de cuerpos codiciables esperaban en distintas ropas de fines sexuales. Las cuales aparecieron luego de que cada hombre invitado llegara a su lugar. Un sofá elegante que fueron convertidas en cuartos privados improvisados por paredes que surgieron del piso y de una plataforma subterránea saliera una mujer vistiendo con las preferencias de cada uno.

En esta sala, nuestras chicas están entrenadas para satisfacerlos en todas sus fantasías ―dijo Rossweisse, subiendo aun podio―, adelante. Disfruten de ellas esta noche y gracias por elegirnos para su diversión.~

La diversión comenzó allí abajo mientras Rossweisse miraba todo desde el pasillo libre del segundo piso. Pero no estaba sola y no me refiero a los sus dos guarda espaldas, también estaban Azazel con ella y Yasaka a lado de él, agarrada muy cariñosamente del ángel caído mirando de la misma forma el espéctaculo de toda esa planicie interna de la mansión.

Mirenlos, dejan vivir sus mas profundos deseos y no hay nadie que los señale ―decía Yasaka. ¿De donde sacaron a esas mujeres? Mejor no preguntar.

Debo admitir, que para ser un negocio turbio, es muy fructifero ―dijo Rossweisse mientras se masturbaba discretamente a pesar de estar con todos estos―. Un club de caballeros donde la prostitución es legal.~

Clientes de todo el mundo vienen aquí para satisfacer sus mas bajos deseos carnales ―dijo Azazel, antes de abrazar con mas cariño a Yasaka―, y las chicas que trabajan para nosotros pueden ganar un gran dinero sin preocuparse por sus identidades o contraer enfermedades. Gran idea tuviste para un buen negocio Yasaka.

Las mujeres del negocio, usaban mascaras de carnaval para ocultar sus rostros, así como los mismos clientes usaban una igual. Solo dos reglas había, no quitarse las máscaras y divertirse hasta saciarse. O dependiendo de cuantas horas hayan pagado por estar.

Darles un préstamo monetario para que paguen sus deudas a cambio de que trabajen para nosotros para divertir a los muchos inversionistas de la producción Oppai ha sido lo mejor ―exclamo la misma Yasaka―. Ganamos mucho dinero, querido.~

Yasaka y Azazel eran un matrimonio abierto pero secreto. Ella era bien conocida como una actriz que excita a todo tipo de hombres, jovenes o viejos y Azazel, era el hombre detrás con las ideas de las tramas que fascinaban a todos esos hombres.

Verlos así me ponen caliente ―dijo la yokai de cuerpo maduro―. ¡Vamos a unirnos!

Dos escenarios en esa emplanada bajo techo. En el centro de la muy extensa habitación, dividido por una pared, una parte de la gente vio en ese alto escenario a Yasaka estaba sobre su esposo Azazel y era él quien la hacia gemir en toda esta orquesta de depravación donde ella era la corista y Azazel el director de la banda. Mientras que del otro lado Rossweisse era la segunda en el coro, su voz resonaba en toda la planicie mientras Matsuda y Motohama le daban parejo por detrás.

Dos inmensas pantallas, una por cada lado de dicho escenario dividido, dejaban ver a Yasaka moviendo su cuerpo como la gran zorra milf era conocida y la otra pantalla mostraba a Rossweisse siendo partida en dos por las agresivas pollas de sus dos amigos de sexo Matsuda y Motohama.

Debo mencionar, pero le hicieron un hijo a Rossweisse entre ambos. Salvo que no se tiene aclarado quien es el padre, prefieren dejarlo sin establecer y ayudarla con el crió.

El mundo se volvió loco.

Con la llegada de Rias, Akeno, Asia, Irina, Xenovia, Rossweisse y Koneko al mundo del entretenimiento del entretenimiento masculino, el mundo se volvió loco. Pero de pasar de verlas en una pantalla de celular en modo incognito en una cuadrada pantalla de computadora en casa a solas, la decisión de Kiryuu de crear una plataforma de streaming disponible para televisiones derramo el vaso del pecado capital que es la lujuria.

El mundo hace todo lo posible para mantener la moralidad de las personas, pero se volvió un fenomeno cultural. Aunque la gente no estaba por allí tirando en cualquier lugar como pasaba en dichas producciones, lo que era un tema tabu, se volvió normal. Clubs de caballeros donde el sexo sin compromiso es el negocio comenzaron a abrirse por muchos lados, licencias se fueron emitiendo. Y todo por obra de ocho mujeres, pues Ravel con ayuda de Rizevim lograron chantajear a varias compañías para que se pusieran de lado, y Koneko ayudo un poco. No había lugar en el mundo que no viera una producción de Oppai o que no tuviera una persona una cuenta registrada y activa. Mujeres de muchos lados vinieron a con Kiryuu para ser parte de este morboso mundo, como si de un hollywood se tratara. Tanto así que compañías americanas se asociaron con estudios Oppai para dar a conocer sus nuevas producciones.

Lo que para Rias, Akeno, Asia, Koneko, Rossweisse, Xenovia e Irina era de entender que Issei les estaba mirando y esperaban que estuviese mirando con mucha satisfacción auto infligida de solo verlas.

¡Issei, espero que hayas visto disfrutando mucho de otros penes, como a ti te gusta. Recuerda que aun te amamos!~

 

Tsubaki / Hyoudou Issei.

¿Eran burlas o verdaderos mensajes de aprecio que daban las ex esposas de Issei? Ninguna se pregunto donde termino su anterior amor de cabello castaño. Mientras ellas se reunión todas ocasionalmente para gozar del éxito, dinero y negocios con sus nombres. Como gozar de una buena orgía privada. Solo Tsubaki se pregunto que fue de Issei.

Issei ¿Donde has terminado?

Solo unos meses después de haberse divorciado por cuestiones del castaño, ella salió en busqueda de Issei pues era la única que no quería alejarse de él. Pero desapareció del radar, por lo que emprendió un extenso viaje para hallarlo. Supo que dejo Kouh y se fue a algún otro lado. Por dos largos meses recorrió el país tratando de encontrarlo, preguntando a las personas que lo vieron. Así hasta llegar a una casa algo solitaria en un pueblo lejano de japón. Luego de casi un año de no saber de él y de seguir interminables pistas. Por fin lo encontró.

¿Issei, estás aquí? ―pregunto Tsubaki, una vez paso la puerta abierta de la casa, el interior estaba percudida, con precaución fue caminando mas adentro de la choza comenzando a tener miedo―. ¿Issei? ¡Issei!

Como si fuera una escena de terror, Tsubaki hayo a Issei en un sofá sucio al castaño con una jeringa en su brazo y un torniquete hecho, su mirada vacía y su falta de aseo, sumado al hecho de varias otras jeringas usadas en el piso, solo eran señal de una mala vida tomada por Hyoudou.

¿Tsu-tsubaki? ―lo escucho muy débil y apenas si pudo mover la cabeza―. ¿Eres tu… o otra vez estoy alucinando?

¡Soy yo, Issei! ―corrió al castaño y lo abrazo con mucho afecto, pero pronto se separo para comenzar a llorar mientras veía el estado en el que él se había sometido―. Mírate… Drogas ¿Como has terminado así?

Con la mirada perdida, el respondió con mucha debilidad. En lo que Tsubaki acariciaba su rostro.

Yo me lo busque… es mi castigo.

¡Claro que no, dejame te quito esto! ―saco la aguja con cuidado y le quito el torniquete echo por él.

Lo… lo necesito ―dijo débil.

¡Claro que no!

Pero lo necesito ―repitió antes de que Tsubaki lo levantará de ese podrido sofá.

Ella se lo llevo, dejo la mochila de viaje con la que partió en esta casa y salió con Issei cargando su brazo por arriba de sus hombros, se lo llevo fuera del pueblo a la ciudad mas cercana, donde lo llevo a un hospital general donde lo recibieron. Poco mas tarde, cuando Issei fue estabilizado, gran sorpresa se llevo Tsubaki sobre el porque del estado de su ex esposo.

¿Eso no era heroína?

¡Claro que no, era insulina! ―grito Kuroka―. Mi Issei se quedo sin su insulina y fui a buscarla por él.

En una habitación personal de cuidados intensos, esta Issei mucho mejor a como estaba antes, con un suero conectado y otros aparatos, como un tanque de oxigeno como a un monitor cardiaco, se le veía mas vivo.

Kuroka, cálmate ―dijo el castaño, antes de poderle explicar a Tsubaki que paso―. Resulta que la razón por la que empezaron a darme dolores de cabeza y migrañas eran porque se me hice adicto al café cargado de azucar, para estar despierto para ver las películas de todas ustedes, tener mi fetiche del voyerismo por ser un cornudo me hice diabético y el estrés se me subió hasta las nubes por lo de las otras.

Lo lamento ―dijo con pena Tsubaki.

Y deberías, tu y esas zorras. Teniendo tan buen hombre y ellas fueron por otros pitos cualquiera ―Kuroka mimaba a Issei.

Tranquila, mi gatita. Serías amable de dejarnos solos un momento ―pidió a Kuroka, lo cual tras un puchero suyo ella se salió, no sin antes recordarle a Kuroka que él era suyo ahora―. Me case con ella hace poco, nada formal. ¿Tsubaki, porque me has buscado?

Una pregunta por la que a pesar de haberse preparado, nunca estuvo lista para responder, Shinra.

Verás… bueno.

Lo siento ―dijo él tras ver que Tsubaki no tenia palabras, así que hizo se cuestionara el porque de sus palabras―, Tsubaki. Me precipite contigo cuando volvimos y les hice firmar a todas el acta de divorcio.

Se había sentado sobre la cama Issei y deslizo su mano a la de Tsubaki, una que tenia sobre su cama de hospital, lo que sonrojo a la pelinegra de lacio cabello.

A pesar de que todo lo que las otras me hacían, tu estabas conmigo y no me di cuenta, me apresure a juzgarte por igual.

Palabras del castaño que hicieron que ella deslizara una gota de sus ojos mientras sonreía.

Si, te apresuraste ―dijo Tsubaki, pero el castaño no comprendió el porque de su reacción―, pero a pesar de esa decisión. No me moleste, algo me decía que era mejor alejarnos y comenzar de nuevo ―entonces ella puso las dos manos en la mano de Issei y lo apretó con fuerza.

Pero yo vine a buscarte, porque quiero comenzar de nuevo contigo. Cuando ese tipo Boris me empezó a chantajear, me aleje de mi novio de entonces ―un anterior novio de Tsubaki llamado Kiba―, lo hice pensando que no era digna de ser amada. Que estaba destinada a ser un objeto de placer, pero luego viniste tu y me hiciste amar tenerte a ti el sexo contigo, mi corazón te amo después de conocerte.

Tsubaki ―sin aviso, con mucha delicadeza ella se subió a la cama y sobre Issei, para sembrar un beso en su boca, con lo que logro callarlo.

Vine a buscar al hombre que amo, porque quiero que solo tu me ames, Issei ―declaro Tsubaki. Su largo viaje dio sus frutos.

En el marco de la puerta de la habitación Kuroka chasqueo sus dientes mientras yacía de brazos cruzados.

Lo que faltaba, una mas con quien compartirla.

La razón por la que Issei vino hasta este pueblo, fue porque Issei quería alejarse de todo y comenzar de cero, a pesar de repartir las acciones en el divorcio. Tsubaki conservo las suyas e Issei vendió las suyas e invirtió en otras compañías extranjeras, empresas comerciales y en la bolsa americana, lo que le valió para ganar mucho y ganarse una buena vida. La choza en la que Tsubaki solo era parte del terreno que compro y con el dinero que gano contrato a una empresa privada para construir su casa de ensueño, una casa mucho más grande que la tuvo con Rias etc.

Ahora solo eran Issei, Kuroka y Tsubaki. Kuroka había tenido un primer hijo con Issei dado las calurosas noches de todo el año, tal como ella se lo dijo estaba dispuesta a ser la zorra de Issei y Tsubaki también.

No necesito terapia Issei para saber que su fetiche era responsable de todo, solo una larga conversación con sus pensamientos lavando trastes para lograr cortar la raíz de su mente y entender que no debió haber cosechado tal mal en su cabeza.

Entendió que la vida es como cortar por una línea de puntos, esperando que todo salga como uno quiere, pero si te quedas con ese mismo molde todo el tiempo en las manos se arrugara y nunca podrás cortar por el camino que quieres. A veces lo mejor es examinar esa hoja arrugada llamada vida, arrugarla por completo y tirarla al fuego, tomar todo lo que te queda y vivir de ese fuego. Vivir con las consecuencias de tus actos, sacar lo mejor que te queda de ellos y seguir viviendo recordando los errores para nunca más repetirlos.

¡Masoru que estás viendo! ―grito Tsubaki a su hijo con Issei que con un celular en manos, estaba viendo videos inéditos de la plataforma Oppai―. Oye Issei mira lo que Masoru tenia en manos.

Fue con su esposo y le mostró el viejo dispositivo. El dispositivo con la vieja cuenta de Issei donde recibía todos los correos de Rias, Akeno y demás.

¿Así que él lo tomo? ―antes de que el mas maduro Issei pudiera agarrarlo el mismo, Kuroka vino por detrás y se lo quito.

Espero que no haya mostrado nada a sus hermanos.

Sabia que yo debía deshacerme de él personalmente ―una embarazada Kuroka, camino con el teléfono hacia el lavadero de trastes y encendió la trituradora donde tiro el dispositivo―. Problema resuelto.

Una casa de ensueño en la que vivía Issei con sus dos esposas ahora y ocho hijos tenidos con ellos, nueve porque Kuroka ya tenia seis meses con el mas reciente. No era una mansión elegante como las ex esposas de Issei, pero era una casa envidiable, tres pisos y una terraza donde convivía con las dos. A pesar de tener un mismo esposo, no eran del todo amigas, era Issei el que las apasiguaba en la cama.

En la noche, en el dormitorio.

Issei~ ―Kuroka estaba caliente, a pesar de su estado.

Tus esposas están deseosas esta noche ―Tsubaki estaba en la cama con un babydoll blanco transparente, uno mismo que Kuroka usaba.

Que voy a hacer con ustedes, diez años y siguen siendo unas traviesas conmigo ―respondió el excitado Issei, desnudo sobre la cama mientras ellas venían a él a gatas en la cama.

Podrías, darle a tus gatitas, mucho de tu leche de amor.~

Comenzaron a lamer su hombría, a lo que él miraba con mucha satisfacción.

Dicen que la mejor venganza es la que se sirve fría. Pero hay quienes dicen que la verdadera venganza se sirve con una sonrisa, aquella donde le demuestras a esa persona que solo era un estorbo para ti y eres feliz sin ella. Issei lo entendió comprendió que el fuego que necesitaba para vivir era encontrar un lugar donde comenzar de nuevo, comenzar a vivir renacido.


¡Salud!

Se reunían entre ellas, las infieles de Issei. Aun por mas que vivieran en extremos lejanos del mundo. Los hombres por los que cambiaron a su primer esposo y se dispersaron, eran hombres hijos de familias ricas y privilegiadas, vaya tesoro con el que se encontraron. Lo tenían todo, mansiones de lujo, autos de gran alcurnia de sus maridos, aviones privados y muchas cosas privilegiadas. Una vida de ensueño.

Reunidas, Akeno, Rias. Irina, Asia, Xenovia. Ravel, Rossweisse. Todas estaban en casa de una de ellas en la terraza bajo el calido sol del ocaso bebiendo champaña de la mas cara, se la tomaban como si fuera agua,

¡Que buena vida! ―grito Asia de forma falocentrista, ebria antes de caer la noche.

Tu lo has dicho, Asia ―comento Rias, como siempre vistiendo de forma exhibicionista como le exigía su esposo―. Veo que pudiste venir sin Diadora esta vez.

Moo~ Diadora-san es muy empalagoso a veces, no deja de pensar en poner su pene dentro de mi ―se trago a fondo, la rellenada copa que le sirvieron―. Cuando vuelva a casa me va a saludar con su pene, de seguro.

Pero eso te gusta no pequeña perra, hasta en la iglesia están cogiendo ustedes dos~ ―comento Akeno, sentada a su derecha de Asia, ella relleno la copa de la rubia.

Hacerlo en la casa de Dios, es muy rico, seguramente al señor le gusta verme coger con Diadora-san en su tabernaculo ―blasfemia. Hereje, pero eso mas que ser insultos para la ex monja, eran halagos.

Saben a quien le gusta vernos, gemir como locas~ ―comento Akeno, todas sabían de quien hablaba.

¡Issei! ―no se habían olvidado de él, se mentían diciendo que lo apreciaban mucho.

Me pregunto que paso de él ―comento Xenovia, bebiendo mas de su propia copa pero con moderación.

Averiguemoslo~ ―dijo Rias sacando su celular, para buscar las redes sociales de Issei que aun recuerda que tenia―, seguramente se la pasa masturbando con nuestras series.

Se volvió patético ―comento Koneko, sosteniendo su copa.

Pensar que alguien como él fue nuestro esposo~ ―Akeno―. Ni siquiera pudo hacernos un hijo.

Cada una con su dispositivo movil, buscaron en las redes para nada. No encontraban el que fue el perfil de Issei.

Parece que borro su perfil ―comento Ravel, revisando divertida su celular.

Pero la diversión de todas, se acabaría para todas cuando Rossweisse buscaría el perfil de otra persona.

Oigan, ya vieron el perfil de Tsubaki.

Buscaron entonces y lo que vieron, las calló a todas. Pues lo primero que vieron de primera fue que el perfil de la otra ex mujer de Issei aparecía bajo el nombre de Hyoudou Tsubaki.

Hyoudou Tsubaki ―exclamo Rias con sorpresa y enojo. Una foto de ella con el castaño que era reciente.

Entraron al perfil de la pelinegro que usaba lentes y la vieron en una reciente foto que ocupo del mismo perfil donde ella e Issei estaba con el castaño además de Kuroka. Ambas a cada lado de él, con una frase adjunta a la publicación.

Esperando al sexto par de hijas de mi amado esposo Issei, Kuroka y yo decidimos embarazarnos al mismo tiempo esta vez. Las llamaremos, Ram y Rem~”

Conforme fueron bajando en el perfil, vieron mas y mas fotos de Tsubaki con el hombre que dejaron. Se burlaban de él por mucho y pensando que era alguien patético, resignado a la sociedad para vivir jalándose viendo a su ex mujeres. Pero siguió adelante, fotos de él con Kuroka y Tsubaki por distintos lugares con un grupo de niños de distintas edades, niñas y niños, muchas de clara apariencia idéntica a Issei en la playa, museos. De paseo y jugando entre familia.

Parece que a Issei, le a ido bien ―se estremecieron al ver que el hombre que dejaron, que le gustaba verlas coger con otros, se supero a si mismo y dejo atrás ese fetiche suyo para darle a Tsubaki y a una gata rompe hogares, lo que a Rias y las demás, nunca les dio. Hijos.

Si que le ha ido bien a Issei.

Nunca más volvió a saber de ellas, pero cada llegaba a ver un anuncio con la cara de alguna de ellas, Issei sacaba una buena mueca recordando los días felices esperando que les fuera bien donde sea que estuviesen, si se veían alguna vez. Esperaba que sea viéndose como unos desconocidos y viendo lo bien que les a ido en sus vidas.

La mejor venganza, es la que se sirve con una sonrisa.


17 comentarios:

  1. Si bien Issei vivió feliz…dónde está el sufrimiento o por lo menos el karma de las zorras?

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  2. Yo también lo esperaba a decir verdad, pero no me quejo

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  3. estoy a favor del primer comentario esperaba que rias y las demás se volvieran a encontrar con issei de casualidad y les demostrara lo exitoso que es sin ellas y que ya las supero y que luego ellas se arrepintieran y lo quisieran recuperar o algo asi pero estoy satisfecho con esto pero no mucho con que las ex de issei tuvieron un final feliz en este o no se si es un final feliz

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    1. Amigo a lo que yo entendí es que el único que tuvo un final feliz fue Issei literal fue el único inicio una nueva vida desde cero, se dio cuenta de sus errores y aprendió de ellos, las otras simplemente prefirieron seguir una vida de placer y según ellas son felices, para mi ellas no son del todo felices, si lo fueran seguirían normal con sus vidas y no estarían enviándoles video a Issei cogiendo con sus actuales esposos, videos que Issei ni los mira. Bueno es mi opinión.

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  4. Deseo una parte 2 bro quiero que les llegue el karma

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  5. Ahora que termino la historia

    Me podrías permitir usarla para crear una nueva versión

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    1. Solo dame aviso de cuando la comiences a publicar para ver que obra creaste con mi historia

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  6. Aguila te eliminaron la cuenta de wattpad otra vez

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  7. es la cuarta vez que me lo hacen, pero ya me cree una nueva cuenta: aguilanegra77. no podre subir mis historias como antes

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  8. Hola me gusto mucho tu historia de dxd, tu crees que pueda hacer una nueva temporada con una nueva version

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    1. ¿Quieres hacer una continuación de parte? adelante, solo pido que me notifiques cuando la hayas publicado para ser de los primeros en leer. Además que me gustaría decir, que ya estoy comenzando a hacer el remake de esta historia, con muchos cambios a esta historia original

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    2. Hola amigo quería avisarle que ya publique una nueva temporada de soredemo dxd con nueva version, tambien espero leer su remake

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    3. lo subi en watppad https://www.wattpad.com/user/bizarro69
      como aqui en mi pagina de blogs

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