Cuarta prueba

Euphoria 1

Mientras investigaban que había acontecido dentro de los múltiples escenarios de los juegos concursados por nuestro héroe, así como las desafortunadas mujeres con las que participo. El par de detectives habían descubierto el motivo por el cual, Komuro Takashi estaba dentro del juego, como Euphoria le decía a su papel como jugador clave.

-Como sabe lo ocurrido con los padres de Takashi, señora Yuriko -pregunto el inspector Levi.

La mujer no respondió al momento, primero calmo su miedo al estar en una sala de interrogación de la policía.

-Fue... antes de que escogiera a mi hija para jugar -dijo Yuriko, recordando lo ocurrido después de que eligiera a Hayashi para participar.

El juego seguía en curso, llego el momento de jugar un nuevo nivel. Llego el momento de elegir a la siguiente... victima. Solo que antes, tuvo una conversación con la madre de Saya, en la habitación donde pasaron su primera prueba, lejos de las demás femeninas. Curioso, el aroma que él olía en estas salas, ya no estaba.

-Takashi-kun -la Takagi mayor conversaba con el pelinegro -perdona que lo pregunte, pero... ¿que paso con tu madre? -ella sabia que la madre del chico murió, pero jamás se entero de la historia detrás de este hecho.

La pregunta era fuerte para Takashi, un hijo nunca supera la muerte de sus padres, sobre todo si los amaba con todo el corazón.

-Mi madre... -suspiro antes de revelar la verdad -ella, sufrió un ataque al corazón cuando estaba en su turno en la primera donde trabajaba -contaba Komuro -habíamos pasado problemas, no... nunca esperamos que algo así le llegara a pasar. Cuando la fuimos a ver al hospital, el doctor dijo que ella no iba a sobrevivir.

Flashback

Un par de meses antes de que el juego comenzara. Komuro y su padre, habían ido a visitar a su madre y esposa luego de enterarse de lo acontecido en su trabajo. Ella estaba viva y despierta, pero por como se veía, no se encontraba del todo bien. Con suero conectado a sus venas, mas el reflejo delicado en su rostro, lo decía todo.

-Su esposa necesita un trasplante de corazón -dijo el cirujano en cuanto tuvo la oportunidad de hablar con los Komuro de esta familia a solas.

-Un trasplante... -su esposo estaba atónito, y Takashi asustado.

-Si, el corazón de su esposa se ha puesto demasiado sensible, necesita una operación a corazón abierto -decía el medico -de no hacerlo, morirá.

El padre de nuestro héroe no sabia que decir, o como mas reaccionar que sentirse impotente ante la noticia. Pues el seguro medico con el que contaba no podía cubrir esta desgracia.

Fin de Flashback

-Mi padre trato de conseguir dinero con la aseguradora y con los bancos, tenia deudas pendientes con ellos asi que se negaron, yo también trate de conseguir dinero para ayudarla, pero... tampoco se logro -contaba Takashi -hubo uno en el banco que se presto a ultimo momento, pero fue tarde. Yo también trate de conseguir dinero a mi modo, estudie para los exámenes generales para obtener una de las becas. Pero Saya termino ganando, debí esperarlo.

Yuriko se sintió mal cuando escucho esto.

-Lo lamento, todo... -ella se responsabilizaba por lo acontecido con él.

-No es su culpa -exclamo -no del todo -en parte sabia que era responsable, pero había quienes tenían parte mayor de esta culpabilidad.

Extraño, la compasión que tenia con ella, le conmovía. Se acerco a Komuro y le abrazo, colocando su rostro contra su escote.

-Prometo, cuando salgamos de aquí, te compesaré lo ocurrido con tus padres -dijo la Takagi mayor.

Lo siguiente, no fue contado al investigar Levi.

-No es necesario -exclamo ruborizado. A pesar de haberla profanado, tener su rostro contra sus pechos causaba una sensación diferente. Que buscaba Yuriko en él, o era acaso que encontró en el chico algo mas.

Se despego del escote de la mujer, pero se mantenía agarrado a ella, tomándola de la cintura como si fuera suya. Así, como quedaron mirándose, sin motivo aparente se besaron, de forma pasional. Sus lenguas jugaban de forma animal en sus bocas conectadas. Internamente se encendían sus cuerpos con el placer. Encontró lo que perdió con su marido hace años, y encontró con Komuro, un amante. Que extraño efecto Estocolmo.

De pronto, ambos se ruborizaron de vergüenza. Takashi quiso separarse de Yuriko, pero ella lo detuvo al mantenerlo abrazado.

-Lo siento -exclamo avergonzado Komuro desviando la mirada de la Takagi.

-Calma -dijo la pelirrosa mayor -sabes, que un hombre joven se ponga así por una vieja como yo, es un cumplido.

El pelinegro se había erectado, y su empalme golpeaba el vientre de la mujer.

-Vamos tampoco es muy adulta, para su edad usted es muy sensual -exclamo el único hombre en el lugar, por el momento -lo dije enserio, he tenido fantasías con usted.

-Eso es pervertido -hizo un puchero ante tal comentario del chico -pero, gracias por el comentario -se le ocurrió una idea -sabes, no estará bien que veyas y que te vean así, ya piensan que eres un pervertido por lo que has hecho.

Se apeno Komuro.

-Ven, tengo una idea -tomo su mano, y lo llevo, lejos de la mirada de las mujeres que se quedaron atrás. Ninguna noto que estos se alejaban mas de lo normal.

Lemon.

Fueron a parar en uno de los oscuros pasillos que separaban a las demás habitaciones de la primera habitación donde se hubo el juego. Allí, Yuriko complació ese deseo que despertó en ella. De rodillas, abrió la bragueta del pantalón de Komuro, revelando la dura erección que tenia. Entonces le hizo la felación.

-Yuriko-san... -la sensación de tener su pene en la boca de tan hermosa mujer era muy placentera.

Podía ver como la mujer engullía su miembro, hasta la mitad. Para Yuriko, ver con claridad el pene joven que la profano le excitaba. La sensación de tener la lengua de la mujer acariciando su pene, mas la calidez de su boca, era emocionante.

-Es... sabroso -pensó Yuriko, saco el pito de su boca y beso la cabeza de este, para luego lamerlo desde la base, como si fuera una paleta de agua y engullirlo hasta el fondo -me moja con solo verlo -pensó otra vez, y asi era, su vagina chorreaba en ese momento.

Tomando oportunidad, revelo la mujer sus enormes senos al sacarlos por encima de su vestido. Con ellos envolvió el pene del chico. La suavidad de sus pechos en su caliente virilidad, era indescriptible. Lo tenia tan grande que se salía de entre los senos de la mujer, lo cual le mojaba mas. Pero mas mojada no podía estar sus senos por los fluidos pre seminales que deslizaba sobre su escote.

-Yuriko-san... voy... -que iba a decirle.

Entonces se detuvo, se puso de pie y se acerco a la cara de Takashi y le dijo mientras le masturbaba su miembro.

-Aun no, mi querido... quiero que lo hagas dentro -exclamo Yuriko.

Bajándose la erótica braga que traía por debajo, dejándoselo en una de sus piernas, y se levanto la falda, revelando lo húmeda que estaba su vagina.

Contra la pared, pero con el rostro de Yuriko mirándole. Le levanto su pierna derecha, y le penetro, profunda y brutalmente.

-Hmmm... -gimió ahogadamente la Takagi al ser empalada, pronto comenzó a moverse dentro de la mujer, esto debido a que desde que la empalo, su pene estaba besando su utero. Cosa que ni su esposo llegaba a hacer cuando lo hacían, pero eso quedo en el pasado -esta sensación... no debería gozarlo, pero lo hago~

-Yuriko-san... -la nombro mientras le cojía.

-Solo dime Yuriko... -pidió, una vez mas se besaron mientras lo hacían.

Dos cosas le fascinaron de este chico, lo primero era que es fuerte y resistente. La tenia levantada de sus dos piernas, despegada de la pared y que durante los quince minutos en los que fornicaron, no mostro señal de cansancio ni de agotamiento. Dos, que su enorme pene la había enamorado pues despertó fuerte la sensación de sentirse mujer.

-Yuriko... -su rostro estaba pegado a los senos de la mujer, esto porque ella envolvió sus brazos en el cuello de Takashi contra ella, mientras envolvía también sus piernas en él.

-Amo la forma en la que chupas mis senos, Takashi-kun -exclamo, el chico chupaba y mordía sus pechos como si fuese un bebe, así lo veía ella -ah~ estas por venirte... ¿verdad?

-Esta vez... esta vez lo hare fuera... -comento, sin parar de embestirla.

-Hazlo -puso su mano en su mejilla -hazlo dentro... lléname... hazme sentir como mujer.

Y paso, este joven satisfacía a la mujer

-Mm... -gimieron al ahogar el grito con un beso.

Cuando la soltó, Yuriko cayó rendida sobre el suelo, con sus piernas abiertas, dejo ver como su vagina se derramaba el semen del chico.

-Mira, cuanto te viniste... -exclamo cesando del cansancio la Takagi mayor.

-Yuriko -llamo la atención de la mujer, al mostrarle que su miembro aun seguía duro, el cual se masturbaba delante de ella.

-Ven hazlo en mi boca -dijo.

Se acerco a gatas y con la boca abierta espero mientras él se masturba, esperando que le diera ese blanco fluido varonil que parecía leche. Se corrió en la boca de Yuriko, tanto; que mancho su rostro y su escote. Al final ella limpio su miembro y mientras tragaba lo que entro en su boca.

-Sabroso -susurro.

Fin del lemon

Al fondo, la segunda jugadora que participo: Saeko. Los vio de lejos, sintiendo celos de lo veía. Ella también quería tener lo ellos tenían. La satisfacción que ella también experimento.

-Mamá -era la voz de Saya, esta noto la ausencia de su madre y fue a buscarla.

-¡Saya! -exclamo asustada de ser vista, tras fornicar con el chico.

Takashi se guardo su miembro en su pantalón, y mientras Yuriko se limpiaba el semen de su cara y pechos. Komuro salió y la entretuvo, notando la parecencia de Saeko.

-Saya -exclamo Takashi, sorprendido.

-Donde esta mi madre -pregunto -no me digas que le hiciste algo -se cabreo.

-Solo conversábamos -dijo el chico.

-Hija -salió detrás la mujer -esta hablando con Takashi-kun en privado, no te preocupes mas de la situación en la que estamos.

-Bien -entonces su hija volvió por donde vino. Seguida a distancia de Komuro.

-Debio ser una conversación muy importante -exclamo Saeko, sabiendo lo que hicieron, su molestia se veía claramente.

-Un tema de adultos, niña -le hizo frente la Takagi mayor.

-Debería limpiar bien sus senos, antes de que alguien note el tema de adultos del que hablaron -la senpai se alejo y fue a donde todas.

Yuriko no entendía lo que dijo Busujima, y miro su escote, aun quedaban rastros del semen del chico. Así que se lo limpio antes de regresar

Volviendo a donde las otras femeninas, noto extraño una de ellas.

-Porque esta Saya aquí -pregunto Komuro, una vez mas, tenia en su compañía a la madre de su amiga de la infancia.

-Mi hija -exclamo Yuriko -tienes razón, a decir verdad, no se porque esta aquí. Ella no es una chica problemática, no ha hecho daño a nadie, al menos no que yo sepa.

Con su mente cayendo a cada segundo en la psicosis que le producía el Euphoria con sus pruebas. Comenzó a teorizar paranoicamente. Pensaba que ella vio algo, que escucho, que se entero de algo. ¿Pero que? Tal como su madre lo dijo de ella, a pesar de su actitud, no era capaz de hacer algo para dañar a alguien, o si. Miro el reloj, se quedaban sin tiempo, tarde o temprano morirían, sino continuaban.

-Bien, ya es tiempo de continuar si queremos salir de aquí -se puso de pie, y camino hacia donde las mujeres.

-Espera, que vas a hacer... -iba por su hija, comprendiendo la situación, sabia que en algún momento ella también tendría que ser parte del enfermo juego, aunque ella se acercara y dijera que la tomara en su lugar, no podía ser, esos collares marcaban quienes de ellas ya habían jugado, negándoles el acceso a la prueba.

Las seis mujeres restantes comenzaron a arrinconarse ellas mismas al tenerlo cerca. Saeko y Hayashi se pusieron detrás del varón, temiendo por quien seria la desafortunada que elegiría para la siguiente prueba. De entre todas las femeninas que restaban, la escogió a ella.

-¿Yo?... -dijo Saya asustada cuando fue arrinconada por él -¿porque?...

No le respondió, solamente la tomo de su mano, y la jalo a la siguiente puerta. Fueron reconocidos como nuevos participantes en la siguiente prueba. Cuando entraron a esta sala se llevaron una gran sorpresa, este lugar estaba helado, como si hubieran entrado en una cámara de refrigeración de algún almacén.

Una vez mas, las pantallas en la sala original se encendieron, transmitiendo para tortura de las demás chicas y para espectáculo de nuestro enfermo detrás del juego.

-Otra vez -dijo al aire el pelinegro, ese peculiar aroma que olía cada que entraba a una nueva sala de juegos se presentaba.

-Que frio... -Saya comenzó a temblar apenas pusieron un pie dentro de nueva sala donde jugarían la cuarta ronda. Con sus mismos brazos intentaba calmar su carne, mientras sus piernas expuestas por causa de la corta falda escolar que llevaba puesta -porque... porque me trajiste a mi.

No le contesto, Komuro estaba prestando atención a algo mas en esa sala que ella y su gran análisis no se dieron cuenta, en el centro, sobre el suelo; un enorme bloque de hielo de casi, un metro de dimensiones, donde por dentro se veía que tenia una llave, la cuarta llave para triunfar. Pero como sacarla.

En cambio Saya, ella vio que en uno de los costados de las paredes, se encontraba un medidor de temperatura en la habitación.

-Diez grados bajo cero -leyó del termostato, esto era malo, si permanecían en esa sala con el tipo de ropa que traían puesta, podrían adquirir pulmonía o peor -pero porque...

Entonces vio el bloque de hielo, empezó a deducir que era lo que iba a pasar. Takashi noto una nueva grabadora de audio por detrás del enorme hielo. Fue por ella y vio que no tenia cinta dentro, pero sabia quien tenia una para usar este aparato.

-Como sabias que había una cinta conmigo -pregunto asustada, primera vez que se dejaba ver así, en especial por él.

-Me dejo una cinta igual cuando desperté, tu madre tenia una cuando ella participamos en el primer juego, senpai, hayashi-sensei también. Era obvio que a ti también te dejo una cinta -dijo Komuro.

Tomo la cinta de Saya en la reproductora, escuchando el secreto que había dentro de la cinta.

-Bienvenidos a la cuarta prueba -exclamo Euphoria -la llamó la cámara de hielo. En este momento la habitación en la que están está a menos diez grados centígrados. Delante de ustedes hay un pequeño bloque de hielo que congelé a menos 50 grados con una de las llaves que las liberarán. Pueden intentar romper el hielo para tomar la llave y liberarse. Pero como la llave es demasiado delgada y frágil puede romperse si quieran romperlo ahora. La única forma de liberarlo es haciendo que la temperatura del lugar se eleve a una temperatura adecuada para que el hielo se ablande y sea menor el riesgo de romper la llave.

-Eso es cierto, congelar una llave a tales grados bajo cero tratar de sacarlo será arriesgado sin romperlo -dijo Saya, debido a su sabionda cabeza.

-Tal vez se pregunten como harán para que la temperatura se eleve si no hay botón que mueva el termostato. Como dije antes, Takashi deberás violar a la mujer con la que tomarás la prueba, las paredes y el suelo están equipadas con sensores que detentan los orgasmos, dependiendo si es masculino o femenino. Por cada vez que te vengas en ella, la temperatura se elevará 4 grados. Pero si es ella la que se viene, la temperatura subirá unos 15 grados. Es fácil cuando un hombre tiene un orgasmo, pero una mujer... -decia el psicópata detrás del juego.

Saya se retorcía de miedo en su interior, era inminente lo que su amigo le haría. Él por su lado, sentía pena y remordimiento, tal vez ella era mala con él, pero siempre se preocupaba la chica por Komuro. Cuando Rei le engaño con su mejor amigo, Saya fue de las pocas personas que quiso darle su apoyo cuando se entero con lo ocurrido con sus padres. Jamás entendió porque se comportaba de tal manera con él.

-Quieres un motivo para violar a Saya, Takashi -exclamo la voz de la grabación -dime Komuro, ¿Porqué la elegiste a ella para esta primera prueba? Por que es tu amiga, una amiga que te demuestra y te presume a cada instante lo inteligente que es -ponía incómodo a los dos -presumiendo sus altas calificaciones, diciendo que nunca vas a alcanzarla. Y cuando querías demostrarle lo contrario...

-¿Lo contrarió? -exclamo Saya.

-Dime Takashi, cuanto te esforzaste, para salir con una de las más altas calificaciones escolares cuando llegó el segundo parcial, cuando ofrecieron las becas por más de cinco mil millones de yenes en tu escuela -exclamo el demente detrás del juego macabro.

Flashback

Durante un día de escuela, en Fujimi. Los estudiantes, fueron reunidos en auditorio debido a un anuncio. Entre esos estudiantes estaba Takashi.

-El gobierno con tal de motivar los estudiantes nacionales dará una beca de cinco mil millones de yenes al alumno que tenga la más alta calificación de la academia, un ganador por cada grado de los tres en la escuela -dijo el director.

Fin del Flashback

-¿Que tiene que ver ese examen? -pregunto Saya, en el estaba el secreto que la había puesto en esa habitación con Takashi.

-Cierra la boca -se concentró en oír el audio.

-Dime cuanto te esforzaste para obtener ese premio y decirle que también eras inteligente -seguia el audio de la grabación -un sacrificó que te fue en vano. Fuiste superado por Saya una vez más.

Flashback

Cuando fue la revelación de los exámenes, un examen general, para ser más justo conforme a la evaluación y al premió. El que mayor se llevó la mayor sorpresa fue Takashi.

-El estudiante con la mejor calificación del segundo año es -dijo el director -Saya Takagi.

Takashi, entre los espectadores del momento en el que ella recibió el reconocimiento y su premiación. Komuro no pudo sentirse envidioso, a la vez que frustrado.

"Carajo, creí que podía pasar la prueba" pensó Takashi disimulando la furia que traía.

Alrededor de una hora más adelante, cuando en las demás aulas se entregaban los resultados de los exámenes correspondientes a cada estudiante. Komuro recibió su exámen, notando algo curioso en los resultados de su prueba.

-noventa y nueve -dijo el resultado de su calificación.

-Debo admitir que me sorprendiste Takashi, pasaste de sacar 30 puntos en exámenes anteriores a sacar un 99 de un examen general -exclamo el profesor -me sorprendiste, por un momento pensé que vencerias a tu compañera, Takagi.

-¿Donde me equivoqué? -pregunto Komuro al ver su prueba.

Su maestro, señaló en la página, cinco de su exámen, la única pregunta en la que falló. Una pregunta que era de conocimiento de secundaria. ¿Cuáles eran los siete países principales en la segunda guerra? En la casilla de respuesta escribió: Alemania, Italia, Rusia, Japón, Francia, Estados Unidos e Inglaterra.

-Uno de los países no era Rusia, sino la unión soviética -le fue curioso a Takashi.

-Pero si yo recuerdo haber escrito la unión soviética... -exclamo.

Fin del Flashback

-Saya... -el tono sombrío, asusto a la pelirrosa -que hiciste...

-No se de que habla... -comenzó a alejarse lentamente de Takashi.

-Fallaste por una sola mala respuesta, pero tú sabes que escribiste la correcta -seguía la macabra voz -eso fue porque la persona frente a ti, alteró su examen con el tuyo. Su orgullo de genio no podía ser manchado si se descubría que falló en una sola respuesta, así que hizo lo que era mejor para ella y mantener su estatus.

La mirada incrédula y la expresión culpable de Saya ante la acusación, eran compatibles.

-El orgullo es uno de los pecados que hace que la gente cometa crímenes, a veces piensan que no harán daño a otros -decía la grabación -un pecado a Saya, que tu serás quien la purgue, tienen 60 minutos antes de que las bombas pegadas a sus cuellos estallen. Has que expiren sus pecados Takashi. O las dejas morir, junto contigo, a ti ya te queda poco tiempo, pero ya te di la clave para llegar a la cura. Vivir o morir Takashi, decide.

El collarín de Saya, apareció un cronómetro, que empezó a correr desde los sesenta minutos. En la sala principal, los collarines de las demás mujeres, de encendieron también. Todo mientras miraban la transmisión en vivo.

-No, no, no, ¡No! -gritaba Saya forcejeando con su collar -¡Takashi ayúdame a quitarme esto! -pero no hizo caso, se mantuvo observándola mientras un odio y deseo de matar a la chica -¿Takashi?

-¿Alteraste mi examen? -el pelinegro tenía una mirada asesina hacia la chica.

-No es verdad, porque necesitaría cambiar mi examen con el de un idiota como tú -dijo Saya en pánico, dado que Komuro avanzaba lentamente hacia ella.

-¿Que están haciendo? -pregunto Yuriko desde la habitación principal -¿Que hiciste hija?

-Takashi ¡aléjate de mi! -no dejaba de acercarse, ni ella de alejarse, a cada paso lento que daba.

-Alteraste mi prueba... -la mirada asesina de Takashi crecía más y más hacia ella, sacando un lado que no sabía que tenía el chico -solo por demostrar que eras una genio... a ti no te hacía falta el dinero... tu familia ya es rica...

-¿Y eso que? ¡Que si lo hice! -entraba en aceptación -¡para que querrías tu ese maldito dinero! -recordó el premio por pasar el exámen.

-Ese dinero, iba a usarlo ¡Para salvar a mi madre! -grito con una furia que logró intimidar a la chica.

-Yo... no lo sabia, no sabia lo que estabas pasando ¡idiota! -grito Saya, comenzando a llorar mientras era sostenida por Takashi -¡jamás cuentas tus problemas a otros, eres demasiado cerrado!

-¡¿Y a ti porque siempre te interesa lo que pase conmigo?! ¡¿porque?!...

-¡Porque tu me gustas! -eso nadie se lo esperaba, después de tanto revelo sus sentimientos, tal vez siendo el peor de los momentos -tu me gustas Takashi... pero jamás me has visto como una mujer verdad, no como a mi madre -creías que esta genio no pudo ver que su madre aun le quedaban el fluido seminal cuando la encontró, fornicaron fuera de los juegos.

No sabia que mas decirle, si ya sentía remordimiento por lo que haría, entonces no sabia que era ese sentimiento que sentía en su interior.

-El tiempo corre -dijo Takashi, notando que perdieron como diez minutos del tiempo de juego -hay que jugar o no saldremos de aquí.

-Haz lo que tengas que hacer -exclamo, le beso a la vista de las cámaras, tres mujeres del otro lado sintieron celos al ver esto. Yuriko, Saeko y Rei.

Lemon Hardcore

Entrando ese modo psicópata, la tomo de la cintura y la puso contra la pared, su rostro choco contra el frio del mosaico. Pegando su entrepierna con los glúteos de Saya, rápidamente sintió como este se le ponía duro.

-Espera Takashi... -él, inmediatamente se perdió -no seas así, se gentil...

La tomo de la cintura, bloqueando los movimientos de sus brazos. Para así llevarla contra la fría pared del cuarto, chocando su rostro hacia el muro congelado. Pegando su entrepierna con los glúteos de Saya.

Saya sintió como de la entrepierna de Takashi, crecía algo duro y rígido, que empezó a untarle en su trasero. Era una sensación estimulante y atemorizante para ambos. Con su mano libre, Takashi abrió la bragueta de su pantalón, para que su miembro se frotara entre sus glúteos, sobre su braga y debajo de su falda.

Una vez se la quitó, paso a rozar su pene sobre los labios de la vagina de Saya. A pesar del frío, el calor del éxtasis que recorría su cuerpo, lo calentaba.

-Perdoname -exclamo Takashi al oído de su amiga.

-¿Eh? -el aire de duda desapareció con el dolor de ser penetrada por Takashi sin su consentimiento -mm.... -fue el primer gemido que dió cuando su gimen se rompió a causa de Takashi.

Era una sensación extraña y dolorosa para ambos, ella era virgen y el casto. Aún así no había tiempo que perder. Con su pene dentro de la chica, Takashi comenzó a llenarse de un extraño sentimiento que nublaba su mente, una que hacía que la baja temperatura del cuarto donde se aventuraron. Locura, codicia, ira... Euforia. ¿Acaso era algún otro efecto del veneno que le suministro?

-Takashi... -no quería que su primera vez fuese así, como muchas mujeres quería que fuese especial con la persona que más amaba, él.

Sin remordimientos, con su miembro cubierto por los hilos de la sangre salientes de la vagina de la pelirrosa. Comenzó a moverse dentro de las paredes internas de Saya. Muy bruscamente, como si buscará torturar a la chica. Para ella también era un sufrir, el miembro se Takashi era grande, más grande de lo que se había imaginado. Pero con cada estocada que Komuro le daba, el dolor iba pasando menos, aún así era un escarmiento para ella.

Desde su asiento, el criminal veía con satisfacción este espectáculo, de lo que Takashi estaba haciendole a Saya.

Poco a poco, las embestidas de Komuro agarraron mayor velocidad. Esto mientras tenía sometida a la chica contra la pared.

-Takashi... Takashi... por favor... no seas brusco... -decia entre cortada su voz debido a los bruscos movimientos de la cintura del chico. Cuando dijo verlo, noto la expresión de su rostro, esa mirada inicial que tomo control de él, seguía en su cara, pero había crecido más de la cuenta -Ta... Takashi...

-¡Callate! -puso su mano sobre la cabeza de Takagi y la golpeó contra la fría pared -¡Te haré gemir como la perra que eres!

No reconocía al chico en el que se había convertido su amigo. Ahora era un maniático y demente, como el que dirigía el juego. A medida y segundo que la penetraban, sentía como el pene de Takashi se hinchaba dentro de su vagina, por lo que sabía, solo significaba una cosa...

-Te... te vas a venir... verdad... -decia entre jadeos -no lo hagas dentro... ¡Takashi no lo hagas dentro!...

-¡Dije que cerrarás la boca! -grito tapándole la boca y empalandola contra la pared, mientras se corría dentro de la chica, ahogandole su grito con su mano.

-Kya! -se escucho el grito ahogado de Saya.

A los dos segundos de que se corrió en ella, hasta llenarle su útero. El termostato de la sala se movió, subió 4 grados la temperatura como dijo el muñeco.

-Menos 6 grados -dijo Takashi, se sentía insatisfecho, no obstante, el hielo apenas si empezamos a traslucirse. Saya en cambió, estaba llorando, le habían arrebatado su virginidad sin piedad alguna. Sin embargo aún no terminaba ahí -aun falta para subir la temperatura.

-Has lo que tengas que hacer, tonto -frente a las cámaras, se dieron un beso adulto.

Puso su mano en su cuello desde la parte atrás y la sometido de nuevo. Una vez, iba a penetrarla contra su voluntad. Sometida con una mano en su cuello y la otra levantando su pierna, para que así llegase más profundo dentro de su vagina. La mantuvo en esta posición mientras la violaba, hasta que de nuevo, se vino en ella.

-Menos 2 grados -se movió el termostato.

Los dos se encontraban ahora en el suelo, con Takashi arriba sosteniendo a Saya sobre él mientras la hacia cabalgar sobre su pene con su espalda mirando el rostro del pelinegro. Cuando el orgasmo, la agarró con firmeza y le embistió con rudece.

-¡Me vengo! ¡Me corro! ¡Me corro!... ¡Me corro! -Saya había caído en el placer inducido por Takashi y su maltrato sexual.

-Te gusta que te viole ¿Eh? -dijo siniestramente cuando el rostro de Saya se tornó en una expresión ahegao.

-No te... burles... -apenas si podía hablar.

-17 grados... -dijo semi desfallecida la chica debido al placer que tenia, mas la enorme cantidad de semen que salía de su vagina.

-Aun no es suficiente... -exclamo Takashi con una voz fría, no sabía si lo decía por la temperatura, o por el castigo que le estaba dando a la chica.

La puso sobre el suelo, donde continuó con el acto carnal. Con su mirada sobre él, seguía penetrando la sin piedad, pero debido a la temperatura que se elevaba, no podía evitar sudar la chica.

-¡¿Que pasa?! ¡¿Tienes calor?! -cuestiono burlonamente.

No podía decir nada, la sensación que recorría su cuerpo le impedía hablar.

-¡Porque no te abres el uniforme! -en un acto brusco, rompió en dos el uniforme de Saya, revelando el brasier que la chica llevaba. Un sostén color lavanda con encaje. Sin ser delicado. Le bajó el brasier, revelando que sus senos estaban duros debido a la excitación que le provocaba él. De ahí con sus manos tomo los brazos de Takagi, para cruzarlos y jalar de ellos hacia él, haciendo que los senos tuvieran un mejor llamativo ante sus ojos desquiciados.

Por tercera vez, se corrió dentro de ella, y la temperatura se elevó una vez más.

-21 grados -dijo Takashi, cuando miro el hielo, apenas estaba sudando, para él; aún no era suficiente para romper el hielo -falta...

Otra vez, sin haber sacado su pene, comenzó a follarla sin delicadeza. Para este momento ella ya se había puesto en blanco su mente, no podía pensar con claridad. No le importó el estado de Saya, solamente quería hacerla sufrir más.

-¿Sabes? -se puso sobre ella -siempre quise manosear tus pechos de vaca.

Y mientras la violaba, empezó a morder y chuparle los senos, mientras dibujaba débilmente un rostro de placer ahegao.

-¡Takashi! -dijo débil, con placer cuando el semen del chico se derramó una vez más en su interior, junto con sus jugos debido a un segundo orgamos que tuvo ella.

Fin del lemon hardcore.

El termostato marco 40 grados. Ambos estaban muy agotados. Saliendo del trance, y recuperando sus fuerzas. Takashi recordó que debía sacar la llave del hielo para salvarla, al ver el cubo, este ya era agua. La llave se había liberado. Recordó el temporizador del reloj, marcaba que le faltaba 28:16 segundos para estallar. Sin esperar más, Komuro fue por la llave y levantó a Saya. Metió la llave donde iba y giro. El reloj se paro y una luz verde se emitió con un pitido, señal de que se había pasado la prueba. Era una luz de nueve, la llave se atoró, no podía sacarla del collarín.

-Saya... -esta agotada, no podía moverse. Igual, no sabía si pedirle perdón, o dejarlo pasar, después de todo, le habían dado un motivo para hacerle lo que le hizo.

-Lo conseguimos -ella cesaba de cansancio, se dejo caer sobre el pelinegro.

La puerta hacia la sala original se abrió, llevándola en sus brazos, salió con Saya del cuarto, y el termostato del cuarto se ajustó a la temperatura de la habitación.

-Hija... -exclamo Yuriko al ir por su hija con ayuda de Shizuka y de algunas otras.

Takashi por su lado, se alejo de ellas con la esperanza de estar distante, confundido ante la revelación de los sentimientos de Saya, no se espero toparse con Saeko en el camino.

-Senpai -exclamo.

-Lo lograste, ganaste -dijo la chica -buen trabajo.

-Yo no diría que lo que hice fue bueno -dijo Takashi y siguió de largo. La peli morada quería acercársele, pero no encontraba el modo de conseguirlo.

Una jugadora menos que contar, quien seria la próxima en participar en este juego.