Business and pleasure (Naruto x Harem)

Esta obra la estaré actualizando una vez al mes, para darme tiempo de seguir avanzando la historia y tenerles una actualización constante. Espero y les agrade.

Miku Nakano

Ka jouden shimasu

Las hermanas Nakano son cinco quintillizas, aunque todas se parecen bastante entre ellas, dos de ellas tienen algo en común. Miku y Nino conocen a Naruto Uzumaki, ambas lo conocieron por formas distintas; Nino lo conoció en el restaurante donde trabaja donde él tenia mas tiempo laborando a pesar de tener la misma edad, sacando a la luz el lado oscuro que hay en Naruto, un lado oscuro que no debía salir a luz.

-¡Vamos muévete mas! -empujaba su pene dentro del coño teniéndola inclinada, recargada de la cama perteneciente al cuarto de hotel barato al que la llevaba siempre después de trabajo -vamos, aprieta tu coño -daba golpes con su palma al trasero de Nino para que se moviera mas rápido para que se corriera el rubio -mueve mas, ¡sucia perra!

-¡Ah!~ -grito de dolor y placer al sentir la mano dura de Naruto golpeando su nalgas, dejando la marca de su mano en su piel -deja de pegarme... ¡Ah!~ eres un maldito... obligarme a llevar algo demasiado obsceno para satisfacer tus deseos con mi cuerpo.. -decía, su boca cesaba de cansancio pues llevaban varios horas cogiendo sin descanso, enterrándole su miembro hasta lo mas profundo mientras Naruto le obligaba a tener puesto un atuendo demasiado erótico, un corsé negro con sostén en el que solo eran tirantes que rodeaban los pechos y los reafirmaban, de allí unas botas negras igualmente de tema erótico para darle sabor a su apariencia de la pelirrosa.

-Dime de quien fue la culpa -Uzumaki detuvo sus movimientos y tomo la cara de Nino con su mano para que le mirase a los ojos -dime quien la que estaba robando de la caja el otro día y que quiso arruinarme la vida.

-Lo siento... -Nino quería llorar, después de todo, era su culpa por la que Naruto la tuviese como su esclava -cuantas veces tengo que decirlo... -derribada en la cama, con el rubio empalando mas profundo con cada embestida su miembro en su coño, tanto que la cabeza de su polla por poco y se abría paso en su útero. Mientras en su culo tenia un dildo de plástico del mismo tamaño dotado que tenia Naruto su pene.

-No importa cuantas veces pidas disculpas, no va a detenerme -apretaba fuerte los senos de Nino de forma animal, apretando y estirando sus pezones haciéndola sufrir mientras ella misma se mojaba por efecto fisiológico del sexo -después de todo, te di para pagar tu deuda y para que no volvieras a roba, ahora estas en deuda conmigo.

-De haber sabido que seguirías abusando de mi... hubiera preferido que me delataras y perder el trabajo a seguir siendo tu juguete sexual... cuanto mas piensas jugar conmigo ¡ya quiero irme a casa! -grito, mas las paredes de ese motel eran gruesas, no había cámaras ni micrófonos que les espiraran nadie les molestaría.

-Pague por seis horas por esta habitación Nino, aun nos queda la mitad del tiempo -Naruto, se acostó en la cama y puso a la quintilliza sobre él, quien se movía arriba a abajo complaciendo los placeres carnales de Uzumaki mientras que ella lo sufría.

-Dame un respiro por lo menos... -pidió, mas el rubio solo se reía mientras veía los pechos de la Nakano rebotando por la inercia.

-Nada de eso -exclamo -recuerda el trato, te di el dinero para saldar tu deuda y ahora me lo vas a pagar a mi, no con dinero sino con tu cuerpo. Debías Veinticuatro mil al banco, yo te cobrare... cada corrida que me eche en tu cuerpo son cien dólares de los que debías.

De rodillas en el suelo con las manos atadas detrás la espalda, Naruto le obligaba a mamar su polla, lo cual para este tiempo, Nino lo chupaba cual profesional esclava sexual en verdad se tratara, los ruidos de su boca producto de la polla del rubio dentro de sus mejillas, eran música para los oídos de Naruto.

-Cuanto falta para que termine esto... -pregunto sin sacar en ningún momento el miembro de su esclavista su propia boca.

-Por ahora ya van siete veces que corro...

-Mmmm~ -se ahogo Nino, sin aviso previo Naruto se vino en la boca de la quintilliza. Pero como todo este tiempo la tiene "entrenada". Cuando sintió su boca ser llenada por el semen del rubio, sus mejillas se inflaron y su mirada parecía estallar, pero retuvo el liquido salado amargo en su boca, para beberlo todo sin derramar nada, de nuevo comenzó a chupar a profundidad la polla del rubio.

-Ocho -su cara de Uzumaki reflejaba el éxtasis que le produjo ese ultimo orgasmo, su pene estaba sensible; la sensación eran magnifica para el rubio -mírate, chupando mi polla como puta pidiéndome mas.

-¡Cállate! -se veía en enojo en la cara de Nino -solo sigo haciendo esto... para cortar mas rápida la deuda.

Mas tarde, de nuevo dentro de la cama; Naruto aplastaba su pelvis contra el coño de Nino sensibilizado a mas no soporta. Follaban en la posición del misionero.

-Di lo que quieras pero mírate... -el rubio besaba y chupaba los pechos igual de sensibles del cuerpo de la pelirrosa -mira tu cuerpo sincronizado con el mío.

-Es solo una reacción grandísimo bobo -subconcientemente, Nino tenia sus piernas envueltas en la cintura del rubio, sus brazos alrededor de la espalda del chico, todo su cuerpo estaba aferrado a Naruto ¿Por qué será? -termina pronto... para que pueda volver a casa...

-¡Ahhh! ¡Me corro Nino!

-¡Aaaahhhh!~ -grito la quintilliza, sintiendo el orgasmo pasar como electricidad por todo su cuerpo durante al menos die segundo -aahhh... -respiro aliviada.

Sus movimientos se tornaron intensos después de eso, hizo estragos el coño de la quintilliza la agresividad en la que era bombeada por el rubio hacia sentir entumido su las paredes de su vagina, todo este tiempo que Naruto ha usado a la pelirrosa como escape de su lujuria, había forjado su coño a la forma de su polla, por lo que se había vuelto fácil y placentero cogerse sin falta a la pelirrosa todos los días.

-Te odio... Naruto... te odio -la Nakano miraba su coño y como de él, se le desbordaba la gran cantidad de semen que le violaba día tras día

Nino estaba agotada, su cuerpo estaba completamente exhausta luego de esas casi seis horas de sexo continuo, solo media hora (la ultima de la renta del cuarto) era la que Naruto le dejaba descansar. Mientras Nino intentaba recuperar rápido su energía para salir allí, veía al rubio tomar su ropa y vestirse para dejarla allí, cual prostituta luego de terminar su servicio se tratara.

-Dime una cosa... -decía con rabia la quintilliza -como es que no sientes vergüenza al violarte en secreto a la hermana de tu novia ¿Eh?

¿Novia? que nos habíamos perdido este tiempo.

-No te confundas Nino, tu eres una perra engreída que necesita ser puesta en su lugar y ser tratada como lo que eres -dijo tras tomar de nuevo a la chica por su mentón y apretar su mano sobre sus mejillas, cual dueño de mercancía rebelde se tratara -y Miku, es un ángel. Tú, una pobre diabla.

Qué fue lo que hizo mal Nino para terminar en este estado tan... Compareciente, tratar de humillar y dejar mal a Naruto en su trabajo; robar dinero para liberarse de un problema personal. O simplemente ser mala persona. Una cosa era clara para la Nakano, quería volver a ver al Naruto que trato de humillar, ese chico rubio que siempre estaba dispuesto a ayudar a los demás en el trabajo, que se quedaba hasta tarde para cubrir a otros, que sacrificaba sus descansos para apoyar al local que siempre sacaba el lado bueno de los clientes mas difíciles que venían a comer al Golden Age. Quería de nuevo ver a ese Naruto, no le gustaba tener a este Naruto... tal vez ese lado dominante estaba bien, pero ese lado malvado, no lo quería ver en él. Pero se preguntaba porque, porque quería ver a ese tonto siendo el mismo tonto que detestaba en el trabajo. ¿Porque?

-Date prisa y báñate para quitarte el olor, sino pensaran que en verdad eres una puta -exclamo Naruto terminándose de vestir.

Ese era el Naruto Uzumaki que atormentaba a Nino Nakano, pues Miku; conocía al otro Naruto, al Naruto que Nino quería ver.

Arreglado casual pero a la vez elegante, el Uzumaki esperaba bajo la sombra de un árbol en medio de una plaza comercial popular de la ciudad.

-¡Aquí estoy, Naruto-kun! -llego corriendo Miku vistiendo... bueno, amiga que ropa traía puesta para su cita. Eso si, siempre sus audífonos en el cuello los traía. Incluso cuando tenia su cita con su novio tras un mes de conocerse.

-¡Miku! -el rubio se alegro al ver aparecer a su novia, la tercera de entre las cinco hermanas de la familia Nakano.

-Perdón me retrase -frente a frente le pedía disculpas a su pareja.

-Tranquila, igual a mi se me hizo tarde y pensé que tu ya te habías ido -la culpa había tomado a Naruto.

-Si tu me esperaste a pesar de llegar dos horas tarde, yo podría esperarte toda la noche cuando llegases a casa -dijo romántica la pelirroja.

-...¿Que? -esto dejo perplejo al rubio, ¿en que escenario imagino Miku para que esas palabras salieran de su boca de improvisto.

-Perdón eso fue incomodo, no se en que esta pensando -se avergonzó quintilliza.

-Fue incomodo... -ambos tortolos se comportaban mas en cada cita como si buscaran llevar su noviazgo a otro escalón según la lista de pasos de Jacke el perro -toma por cierto.

Naruto saco de su espalda, un libro que compro en internet como presente para Miku quien le tomo por sorpresa, aunque quedo mas sorprendida cuando leyó la portada del libro, quedo maravillada.

-Es... este es... -era imposible creer que tenia por fin un libro que recientemente se popularizo en Japón y Europa hace unos meses cuyos lotes de producción se acabaron en preventa.

-La mas reciente novela de Christopher Robbins -exclamo Naruto.

-Sengoku, ultime warframe -leyó Miku el titulo de la obra en japonés. Sus ojos brillaron de alegría en cuanto la portada, y el brillo aumento mas a cada segundo que ella leía tan solo el prologo de este libro.

Una obra escrita por un autor europeo de fantasía histórica, donde narraba una historia que parecería mas de Japón que salido de Europa, pues todo el libro era un libro de fantasía histórica de mas de seiscientas paginas. Donde los generales queridos de Miku, pertenecientes al periodo Sengoku, lideraban una guerra contra una invasión de gran escala en Asia por parte creciente fuerza del imperio otomano que no solo conquisto Europa y ahora venia a Japón. La historia era una joya para muchos, pues imaginar que el imperio otomano solo planteaba una suposición demasiado ficciosa que capturaba ante los conocimientos de Miku, a la perfección los conocimientos y filosófias de esos héroes históricos.

-¿Te gusta? -Naruto pregunto nervioso.

-Es perfecto, Gracias Naruto-kun -era un bello rostro el que miraba de Miku -aunque, yo no te traje nada.

-No es necesario -exclamo el rubio.

-Claro que si, es nuestro aniversario, yo también debo darte algo especial -exclamo Miku seriamente.

Aniversario. Escuchaste bien mi amigo, Miku y Naruto llevaban un año siendo novios en secreto y la pregunta aquí surge ¿Cómo era que paso esto? Todo paso un año antes, e incluso antes del año. Un año y dos meses para ser exactos.

Flashback

Miku estaba en la biblioteca publica pasando el tiempo luego de oír que libros actualizados con los últimos descubrimientos de sus generales del periodo Sengoku habían llegado al centro comunitario. Estaba ocupado el sitio por muchos estudiantes de las distintas academias y preparatorias dado que se aproximaban la temporada de exámenes mensuales. Mas Miku no tenia preocupación por esto. Una mesa desocupada era todo lo que ella necesitaba para ser feliz estudiando a sus héroes, creyendo encontrar una por fin, tomo asiento para terminar encontrando allí a un chico rubio durmiendo sobre un libro. Esto le molesto a la chica, pero siendo la única mesa "libre" se sentó delante del dormido Naruto con su cuerpo caído en la mesa. Solo pedía que no fuese una molestia para su lectura.

Y no lo fue, Miku paso toda la tarde allí leyendo el libro mientras el rubio seguía dormido profundamente en la mesa delante de ella, como si no tuviera casa donde dormir.

-Oye, oye despierta, la biblioteca ya va a cerrar -Miku saco de su largo y profundo sueño al Uzumaki quien se mantenía dormido hasta quedar solamente media hora antes de cerrar, eran las ocho de la noche.

-Que, que paso... -reacciono Naruto, los ojos los tenia rojos de agotamiento y su pies agotados, su estomago hambriento.

-Eres un maleducado, venir a la biblioteca a dormir -le regañaba la chica -no tienes casa donde dormir.

-Lo siento, me quede trabajando todo el día en mi trabajo -tallaba sus ojos para quitarse las lagañas de los ojos, a pesar de seguir teniendo sueño y hambre -no sabes lo agotador que es tener que trabajar veinticuatro horas sin descanso. Debería estar descansando en mi casa.

-Entonces porque viniste aquí -le cuestiono.

-Cuando sali no me sentía agotado, quería esperar que abriera ese puesto de emparedados que hay en el parque así que pase a leer un poco, pero me dormí -decía.

Por amabilidad, Miku tomo el libro para devolverlo a su lugar mientras Naruto reaccionaba. Vio en la portada del libro que se trataba la obra que tenia agarrado como almohada.

-Grandes guerra mundiales: Batallas y Generales -leyó la quintilliza, con pena pregunto -te gusta... ¿la segunda guerra mundial?

-Si y también la primera guerra, son mis periodos históricos favoritos -esto sonrojo a Miku, alguien amaba un periodo histórico como ella, a la misma edad aunque no lo conocía -y tu, veo que te gustan los samuráis.

-¿Eh?... si, me atrae mucho el periodo sengoku -le apenaba hablar de este hobbie con otros, siempre pensó que la verían rara o terminaría siendo tachada como rara.

Sin embargo, ese día que podría haber sido como cualquier otro, ese día fue el que marco el comienzo de un romance. Aun por tan solo veinte minutos, vasto para Miku para enamorarse de Naruto no solo por descubrir por alguien como él, era amante de la historia, sino porque por primera vez no se sentía extraña con alguien ajeno a sus hermanas.

-¿Que tal? Saben bien ¿no? -salieron de la biblioteca justo a tiempo y salieron a comer en este pequeño puesto en la entrada del parque delante de la biblioteca. Allí, Miku probo uno de los distintos emparedados que hacían en este puesto.

-Sabe increíble -dijo tras dar el primer mordisco -entonces, trabajas en un restaurante -le pareció curioso de Naruto.

-Si -primera vez que le hablaba de su trabajo a alguien mas, no tenia muchos conocidos o amigo -es un trabajo que me consiguió mi abuela y... no podía desperdiciar la oportunidad. Si quieres pasar algún día eres bienvenida.

-Gracias -sus ojos reflejaban interés, no por ir a probar el talento culinario de esta cocina, sino de ver de nuevo a Naruto, quien sabe cual seria la probabilidad de verlo otra vez.

-Debo irme, necesito dormir porque mañana entro desde temprano -no quería comer el emparedado hasta llegar a su casa -espero verte otra vez, Miku.

-Yo también Naruto-kun -dijo alegre de haber conocido alguien agradable como él.

Entonces solo vio ir por el parque, esperando que fuese a su casa; hubiera sido divertido seguirlo para averiguar donde vivía, pero Miku tenia que volver a su propio hogar. Pero de tomar su camino, llego a mirar una ultima vez al rubio cuando andaba por los senderos del parque, allí donde una de las botes grandes de basura, una mujer de gran edad junto a una niña de tan solo siete años, buscaban entre la basura poder sobrevivir, pues no importa el país cuan rico sea, siempre hay gente con necesidad.

-Tengan, por favor -extendió Naruto lo que hubiese querido fuese su cena, pero decidió dársela a alguien mas.

-Muchas gracias jovencito -agradecieron que aun existieran personas como él, personas dispuestas a dar, aunque sea, un poco de lo que tienen a personas que no tienen nada.

Descubrió Miku que Naruto no solo era otro apasionado mas de la historia como ella, sino que era un humano mas. Una verdadera definición de humano. Ese día, ese sándwich obtuvo un sabor mas delicioso del que sintió la tercera de las quintillizas, así como su corazón comenzó a latir por él desde ese día. Sin saber que en ese corazón cálido que amaba Miku de Naruto, también era gobernado por un lado oscuro.

Fin del Flashback

Mas tarde, cuando Miku iba a comer casi a diario para estar con el chico que robo su corazón, ambos poco a poco la interacción de ambos les hizo decir con seguridad que eran amigos, aunque sea entre ellos; así como su amistad surgió en secreto, el amor poco a poco que sentían el uno al otro broto. Cuando nadie lo notaba, ni siquiera Nino cuando veía que su hermana venia con mas frecuencia a visitar al rubio al restaurante; Naruto y Miku ya eran novios. Y ahora llego el momento de llegar su relación a un nuevo paso.

Solo imagina a Miku, su bella figura siendo cubierta con el agua de la regadera, a través de un cristal semi traslucido que componía al pequeño cubículo del baño del motel al que terminaron llegando cuando debían buscar diversión sana para su cita. Pues así como Naruto le dio algo especial a Miku siendo su aniversario como novios, ella quería darle algo especial, tal vez era momento de darle eso que guardaba de su persona que solo debía darle a ese alguien especial, y Naruto era ese alguien. Mas no estaba totalmente preparada todo llego demasiado rápido para la quintilliza.

Arreglada, con su piel limpia y humectada por el agua del baño; regreso al cuarto donde Uzumaki yacía nervioso, no porque por fin podría conocer cada centímetro del cuerpo de Miku. Sino porque el mismo motel y el mismo cuarto; eran los mismos que el rentaba para coger a Nino.

"¡Carajo, esto es malo!" pensaba el rubio mientras esperaba a la pelirroja de su novia "estoy demasiado ansioso, por ver a Miku, y... su lindo cuerpo"

Se imaginaba a la tercera de las Nakano en lencería, la mas exótica y hermosa con la que podría ver a Miku, cuando estuviese acostada dentro de la cama tan seductora, tan linda.

Su lado amable y cariñoso que quería Miku de Naruto se ocultaba, salía a luz su lado dominante.

Frente a frente, Naruto veía como Miku se notaba nerviosa, así como ansiosa de tocar el cuerpo de su novio, pues en ese momento la toalla que traía el rubio solo le cubría de su cintura hacia abajo, podía ver su cuerpo atlético y musculoso, aunque ya había llegado a ver otros chicos musculosos en la escuela, Naruto era otra cosa.

-Esto... que debemos hacer primero -pregunto temerosa Miku, ocultando su cuerpo bajo esa bata blanca y la ropa interior que había traído sabiendo que este seria el día que entregaría a Naurto su virginidad.

Su cuerpo recién bañado, la bata blanca cubriendo su cuerpo, su rostro ruborizado por lo que vendría, emocionaba al zorro durmiente en Naruto.

-Tranquila -la toalla en Naruto se cayó dejando que su novia viese con gran impresión lo que el rubio le ocultaba entre las piernas, se acerco a Miku y la tomo por su cintura -deja todo en mis manos.

-Naruto-kun... -la sensación era demasiada para su corazón, mas no quería oírla decir que se detuvieran cuando el coito comenzara, pues no se detendría hasta llegar al final. De pronto los labios de Naruto tomaron por sorpresa a Miku, un beso sencillo para alivianarla -...Naruto-kun.

-No me voy a detener aun que pidas, Miku -sus manos, silenciosas y mortales tomaron la banda de su bata y de un tirón abrió el atuendo después de baño, revelando ante sus ojos el juego de lencería que traía debajo la quintilliza.

Comenzó a besarla con mas pasión y agresividad, haciendo que su lengua entrara en la boca de la Nakano, lengua que dominaba dentro de sus labios. Las manos del rubio empezaban a tocar el cuerpo de Miku de forma tranquila, pero con cada centímetro que acariciaba su humectada piel, su pene excitaba. Estando muy cerca de la pelirroja, ella sentía contra su estomago como el miembro de Naruto erecto, golpeaba palpitante contra su estomago. No le decía nada, la pasión que le contagiaba su novio se sentía mas que su preocupación cuando vio el enorme tamaño de su dote.

-Naruto-kun... tu lengua... se siente demasiado bien~ -decía Miku, cuando los labios de Naruto fueron a su cuello, besándole igual de agresivamente como antes.

-Pronto te sentirás mejor -desabrocho su sostén así como le quito sus bragas sin que su novia lo sintiera, viendo por fin el cuerpo con el que Miku nació, aunque Nino también tenia el mismo cuerpo el de Miku lo veía diferente.

El acto comenzó, Miku entro en la cama con Naruto; ella estaba sentado sobre su regazo, besando carnalmente desesperada por sentirlo en su interior, ambos tocando apasionadamente el cuerpo del otro, desesperados por liberar al animal dentro del otro.

-Ah~ Naruto-kun... tu boca mordiendo mis pechos... -Miku gemia al sentir la rudeza de sus dientes mordiendo sus pezones.

"Mierda... sus pechos son mejores que los de Nino, son mas... deliciosos~ -decía excitado el rubio sin parar de morder los senos de Miku, solo aumentaba su agresividad.

-Espera Naruto~ -cesaba de excitación, su aliento se volvía tenso debido a la sensación que le producía Uzumaki y su lujuria -si sigues chupando así... creo que me voy a correr~

-Aun es pronto para que te corras -exclamó.

Tomo otra vez a la pelirroja que tenia de novia y se puso sobre ella en la cama, acostada Miku podía sentir Naruto deseaba comérsela (en el doble sentido), y solo con la mirada la Nakano se sentía consumada, mas solo era el comienzo de ser comida por él.

-Naruto-kun~ -el cuerpo y rostro de Naruto opacaba la luz tenue de color rojo morado que había en la habitación, luz de color peculiar, para incitar mas el coito entre las parejas.

-Hare que te sientas aun mejor Miku -tan solo dijo, y el rubio bajo de mirar el rostro de su chica, para ver su tesoro que le estaba entregando.

-¡Espera Naruto!... ¡Aaaahhhh!~ -aunque había limpiado su cuerpo, sentía que era demasiado sucio que su novio, empezara el sexo con su lengua abriéndose paso en su coño -Naruto-kun tu lengua... tu lengua, se mueve muy agresiva en mi interior.

Mas no le respondía a Miku, su mente estaba completamente concentrada en complacerla, en obtener el jugo que brotaría de la fuente de su cuerpo. Ella misma juraba, que una sensación eléctrica recorría su cuerpo desde dentro, un pulso muy placentero que hacia retorcer su cuerpo de placer, como si un gusano o una culebra retorciéndose se tratara lo que tenia pues las paredes de su vagina se estremecían al sentir la lengua de Uzumaki.

-Naruto... eres demasiado bueno~ -podría pensar que su novio tenia experiencia sexual que le beneficiaba, mas no pensaba con claridad, su mente se ponía en blanco.

"Los jugos de Miku saben bien, aunque reconozco que los de Nino son mas deliciosos" pensaba a medida que subia velocidad a su boca Naruto.

-No puedo mas... Naruto... me voy a venir~ -sus manos apretaban fuerte la sabana de la cama, su cuerpo no sabia para donde moverse con tanto éxtasis. Pero algo tenia claro, quería la que la boca de Naruto le hiciese llegar al final, sus manos tomaron la cabeza del rubio y empujo su boca contra su vagina, para que no se detuviera y siguiera hasta que por fin -¡me vengo!

La fuente disparo agresivamente, mas Naruto abrió la boca en grande; bebiendo por completo sus jugos hasta limpiar incluso sus piernas de Miku que se mancharon de su propio liquido, hasta de nuevo tocar los labios de su vagina.

-Espera Naruto-kun... estoy sensible en este momento -se mojaba de nuevo al sentir la agresiva y lujuriosa lengua que él tenia.

-Es momento de pasar a lo que sigue Miku -detuvo sus lamidas, se sentó sobre sus rodillas frente a la Nakano mostrándole a vista completa lo que le esperaba.

-La polla de Naruto-kun... es enorme... -estaba ruborizada de ver el monstruo que le aguardaba del rubio.

-¿La vez bien, Miku? Es el pene que tomara tu virginidad -dijo sin pelos en la lengua, levemente salía a luz ese lado salvaje y carnal de Naruto.

-No... no creo que entre toda... -se había acercado, posiciono su miembro en los labios del coño de Miku para meter poco a poco su miembro -...¡Aahh! -grito de dolor, su himen se había desgarrado por la polla del rubio. Eran grande y la puerta de su vagina era pequeña (no tan pequeña, pero comparado con el monstruo que lleva Naruto).

No se movió cuando la sangre del himen de su novia cubrió su miembro, tampoco le pregunto si quería que pararan, no lo iba a hacer de todos modos, habían empezado y no se detendrían. Solamente espero unos segundos, para mover sus caderas por fin, metiendo hasta el tope de su pene en el interior de Miku.

-...aahh~ -ese dolor desapareció en un instante para la Nakano -la polla de Naruto... es tan grande y gruesa... aprieta fuerte mi coño~ -decía -puedo sentir la punta de tu polla tocando mi útero, Naruto~

-Es porque nuestros cuerpos son compatibles... Miku~ -se fascino el rubio con el interior apretado de su novia, era igual de apretada que el coño de Nino antes de moldearlo a la forma de su pene -somos el uno para el otro, Miku~

-Naruto~ -sentía el amor del Uzumaki transmitirse a ella con cada empujón que le daba de su polla, la sensación era fantástica, su cuerpo ardía en especial sus pechos, pues sentía moverse, Naruto tenia sus manos en la cintura de la pelirroja, su clítoris quemaba de placer mientras que su senos los sentía duros por la excitación. Una de las manos de Miku tomo sus pechos y empezó a apretar sus pezones, mientras la otra jugaba con su clítoris a paso que Naruto se abria camino en su coño -eres tan bueno Naruto-kun~

-Miku... tu interior es de lo mejor -comenzó a subir de nivel sus embestidas, su cuerpo se puso encima del de la pelirroja -voy a correrme en cualquier momento.

-Vente... vente conmigo Naruto~ -decía Miku, su cuerpo se aferro por completo al de su novio -lléname con tu semen, quiero que me des tu semen dentro~ -tenia tan cerca el rostro de su novio que no pudo evitar besarlo mientras él no paraba de empujar su polla por completo en su coño.

-aahh~ -sonó la boca de ambos cuando sus lenguas se separaron, mas un delgado hilo de la saliva de ambos los tenia unidos.

-Puedo sentirlo~ -decía Miku -puedo sentir... la polla de Naruto esta por explotar y liberara su semen en mi interior.

-Te llenare toda Miku, te hare mi mujer... ¡de nadie mas!

-¡Si! Naruto hazme tuya... dame toda tu leche... imprégname toda ¡Kyyyyaaaaa! -grito de placer, felicidad, éxtasis y alegría. Corriéndose al mismo tiempo que su novio manchaba e inundaba todo su interior -aaaahhhh~ el pene de Naruto se vino mucho en mi... no lo entiendo pero, me siento alegre -veía como de coño se derramaba el semen de su interior, pero luego vio que su novio no le iba a dejar allí -la cosa de Naruto-kun sigue grande -miro impresionada de que lo mantuviera como nueva y fresca.

-Eso... -se sentía apenado por el comentario.

-Esta bien, Naruto... mi amor, hazme el amor hasta que te satisfagas -dijo Miku, abriendo los labios de su vagina -hazme el amor aunque me desfallezca.

La sonrisa que puso Naruto en su rostro lo dijo todo, no solo se lo haría hasta el cansancio, sino le daría duro hasta que el tiempo por el que pagaron la habitación se les acabara, y habían pagado por la promoción de seis horas en las que les obsequiaban dos horas mas por el precio de una. Ocho horas estuvo Miku con la bestia sexual que era Naruto. De todo le hizo el rubio el tiempo restante que estuvieron encerrados en la habitación. A cuatro, vaquerita, posición del loto... eso esas son todas las poses del kamasutra que me se de nombre, mas hubieron otras mas posiciones sexuales que hicieron. Su novio era una bestia apasionada, así era como lo veía Miku, pues no importa cuanto se esforzase sabia bien que el Uzumaki no tenia suficiente de ella.

-Miku... ¡Miku! ¡Despierta! -decía Naruto asustado y preocupado. Su chica por fin abrió los ojos y el miedo porque algo le haya pasado, termino -Miku, no me espantes así -abrazo a su novia, quien dormía sobre la cama.

-Que... ¿que paso? -despertó del desmayo al que cayó ella misma.

Después de cinco horas de sexo ininterrumpido, Miku quiso regresarle el favor a Naruto del principio y le hizo una felación profunda cual no estaba acostumbrada a hacer, ni siquiera tenia la experiencia de hacer. Mas la agresividad sexual de Naruto no se pudo contener ante la casi por completa agotada Nakano para mover su miembro profunda y velozmente en la boca de Miku, hasta venirse y por poco ahogarla en el placer y orgasmo que le produjo Naruto.

-Perdón, creo que me excedí -en verdad, se lo hizo hasta hacerla desmallar.

-Naruto es demasiado intenso... debí esperarlo de mi novio -exclamo sonrojada y enamorada, viendo entonces que el pene del rubio no estaba del todo flácido ni agotado, mas bien molesto por hacerla llegar demasiado lejos sin moderarse -...tu cosa aun no esta satisfecha.

-¡¿Que?! -Naruto entendió que ella se dio cuenta que aun podía con mas, pero era mejor dejarle allí -no esta bien, estuviste fantástica, Miku.

-No, si Naruto aun quiere hacerlo, entonces hagámoslo -dijo, no quería ser decepción para su novio -paguemos por mas tiempo -revelo mas dinero que cargaba la pelirroja, lo suficiente para pagar para estar esa noche hasta la mañana siguiente.

-¡Miku!

Se abalanzo sobre ella, caliente y endurecido de nuevo, sin dudas era mejor que Nino para él. Pues la otra se quejaba a cada rato (quien no, cuando te obligan a hacer el amor con alguien que no quieres), mientras que Miku gemía de placer y romance cada que sentía a su macho tomarla e impregnarla con su semilla esa noche. Después de esa larga, calurosa y apasionada noche, los lazos de Naruto y Miku se fortalecieron. La pasión uno por el otro despertó fuerte.

Luego de eso, cada semana e incluso mas de dos veces por semana, ambos se encontraban para una "cita" que terminaba con ambos yendo a un motel de la zona para coger cual dios manda. El lazo de placer que tenia Naruto con Miku era mayor al que tenia Nino, cosa que ella comenzó a notar sin saber con claridad.

-Oye -hablo Nino -cuanto mas piensas usarme para tus barbaridades -ambos habían terminado solos en el restaurante a final del día como comenzaron a hacer después de que le atacara por todo ese sentimiento de venganza que produjo en el rubio.

Nino lo sentía raro, pues hace unos días que ya no la tocaba; lo cual, sin darse cuenta le hacia sentirse vacía.

-De que hablas, ya te olvidaste -dijo Naruto sin darle la vista -la ultima noche fue la ultima, tu deuda conmigo esta saldada.

-¿Que?... en serio -se alegro Nino mas esa felicidad la sentía inerte.

-Si, eres libre -la verdad, era que Miku, era mejor que Nino -pero te dire que si vuelves a hacer lo de antes, te ira peor esta vez.

Solo vio irse, sin lograrle ver la cara; debería estar feliz porque ya no seria el juguete sexual de Naruto, mas sentía el vació por dentro. Desde ese día algo se perdió para Nino, algo que ni siquiera ella se dio cuenta. En vez de sentir alegría, sentía soledad. Pero debía estar bien ¿no? después de todo no eran mas que simples compañeros enemistados por un odio irracional, él era novio de su hermana, los descubrió un día cuando el rubio salió antes del trabajo y se reunió con Miku afuera del hotel donde los vio melosos. Allí sin penas, su hermana le presento formalmente a Naruto como su primer novio.

Cuando quiso convencerlo de terminar el abuso del rubio contra ella, por su relación con su hermana; le valió mil hectáreas de salchicha, siguió abusando de Nino hasta el cansancio y si, al final se canso de ella. Tenia ahora a quien le hacia alcanzar la verdadera satisfacción sexual así como él le hacia alcanzar el cielo a ella, Miku.

Bajo la regadera de la casa de Naruto, un pequeño departamento que le dejaron sus padres antes de morir, lo había vuelto un lugar acojinado con mucho esfuerzo. Él y Miku se besaban bajo el agua caliente de la regadera tocando sus cuerpos cada vez ansiosos por sentir el calor del cuerpo del otro.

-Naruto~ -suspiraba Miku cuando los labios del rubio besaban sus pechos luego de que el chico la levantaron de su cintura para besar con facilidad sus atributos con las que fue bendecida.

-Miku~ -clamaba su nombre cual diosa hermosa se tratara. Ella clavaba sus manos en la espalda tonificada del rubio tratando de sofocar la temperatura que crecía en su cuerpo.

Salieron del baño, caer sobre el futón en el que dormía Naruto, para darle placer inicial con su lengua.

-Miku... tu lengua, se mueve de maravilla -Uzumaki yacía acostado mientras su novio, chupaba profunda y ruidosamente su pene, succionando todo; se sentía alagada por los elogios de su novio -me corro... ¡bébelo todo Miku!

-Mmmmm~ -se ahogo de placer y semen que Naruto expulso en una corrida que soltó en la boca de su novia, mas ella gustosa devoro todo el jugo que libero.

Poco después sin perder tiempo, Miku montaba el mastodonte que tenia su novio cual vaquerita en rodeo se trataba, chapoteando en los liquidos que su cuerpo y el de Naruto expulsaban.

-Se siente bien, mi amor~ -decía sin parar de moverse de arriba a abajo -tu polla besa mi útero con cada movimiento...

-Tu coño es el mejor, Miku... aprieta cada vez mas a mi pene~ -decía orgasmeado -voy a correrme dentro de ti en cualquier momento...

-Aun no~ quiero sentirte por muchas tiempo -beso a su novio antes de cambiar de posición.

Con él por encima de ella, embestía su miembro hasta lo mas profundo de su novia.

-Quiero venirme Naruto~ -el placer la inundaba, quería sentir su semilla por dentro como en su primera; quería correrse al mismo ritmo que su novio -córrete conmigo~

-¡Miku! -aumento sus movimientos y finalmente se vino, llenando todo su útero cual mandaba.

-¡Si! el semen de Naruto esta dentro de mi~

No iban a acabar allí, empujo su pene en Miku cual pose animal se trataba con fuerza y deseo.

-Se siente demasiada bien~ amo la polla de Naruto... amo a Naruto por amarme con este pene -el deseo animal y la pasión la dominaron.

-Te amo Miku... eres la mejor -decía, mas quería correrse en ella una vez mas.

-Te amo también, te amo mucho.

El interior de Miku se sentía lleno apenas se había corrido Naruto en su interior, pero quería mas. Mas de él, plantar bien la semilla en su interior y hacer que el fruto crezca como debía.

-Naruto... lléname otra vez... Naruto~

-Miku...

-¡Naruto!

-Me corro ¡Miku!

Mientras el interior de Miku era llenado por la bendición del Uzumaki, otra de las hermanas Nakano se sentía vacia. En su habitación en tan enorme departamento, la noche pasaba lenta y tortuosa para Nino, pues para entonces ella la estaría pasando bajo deseos carnales de Naruto pero su tormento termino. Pero ahora tenia un nuevo tormento.

-Naruto... Naruto -bajo la sabana, Nino se masturbaba suavemente esperando que el novio de su hermana apareciera para aliviarle el dolor -porque no puedo dejar de masturbarme... -pensaba -porque no puedo dejar de pensar en él.

continuara...

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