The last stand
Koprunu, una galaxia perdida en el infinito mar del universo, donde los restos de la humanidad hallaron un mundo donde los demonios existían, esos seres que tanto se contaban en las religiones como seres malignos que habitaban en el infierno habitan en realidad un mundo ciertamente oscuro, escaso de mares y lagos, vida silvestre y tecnología, lo cual intrigo a los humanos tras llevarles su guerra sin intenciones. Ahora se dirigían para evitar que otro mundo dentro de la misma galaxia sufriera el mismo destino que le infligieron al mundo de los demonios.
Reunidos en la cámara de guerra dentro de la nave infinity. Un grupo de pilotos y miembros de asalto recibían información de su siguiente misión. Un ataque abierto contra una nave tipo crucero del covenant, antes de que llevara a cabo su fin sobre el mundo de Tarkosia. Y quien daba las indicaciones para la misión y quien estaría con ellos en la batalla, era el mismo jefe maestro. Con un holograma a su derecha mostrando en representación lo que pasaría en la misión.
-Este es el "Dawn Of the Salvation" un crucero pesado del covenat que esta asentado en la estratosfera del mundo local llamado Tarkosia, se cree que en su interior esta asentado uno de los muchos Guardians que el didacta esta buscando -informaba y todos los elegidos para la misión miraban con suma atención al jefe maestro -nuestra misión es simple. Dos equipos de X-wings atacaran al crucero, uno para alejar al grupo de Seraphs que cuida al crucero dirigidos por el equipo negro -el equipo negro de spartans estaba allí para la tarea, su líder era el mejor piloto de la armada - y un segundo equipo atacara en pantalla al crucero para que un grupo se infiltre en el interior del crucero con el caos como cobertura que estaré dirigiendo, les ganaremos un tiempo de treinta minutos antes de que su tripulación se de cuenta que están a dentro, escucharon equipo noble.
-Entendido señor -respondió firme el comandante de noble con los miembros de su equipo de spartans detrás suyo.
-Recuerden, es entrar buscar la llave y destruirla, antes de que logren activar el guardian de forma remota, si lo activan la misión esta perdida -les recordó el jefe lo vital que era cumplir esta misión.
-¿Y que pasa si lo activan? -una voz femenina y juvenil interrumpió a todos.
Era Rias Gremory junto con dos de sus siervos a su lado así mismo estaba Sona Sitri junto a dos miembros de su séquito parados a lado del equipo Noble ¿que estaban haciendo aquí? Te preguntarás. Después del ataque masivo contra su mundo, el ataque a los miembros de su consejo. Los ancianos se volvieron a reunir para enviar a un grupo de los suyos con los humanos y vengar los eventos que desató el covenant contra su mundo. Aunque los directivos dieron como respuesta un rotundo no, con tal de mantenerlos alejados de su guerra. No iban a aceptar ese no como respuesta. Dado que esta galaxia no la conocían, necesitarían ayuda local para moverse por ella si el Covenant seguía por aquí.
-Pasará que todo por lo que hemos resistido se ira al carajo -dijo Kenichi, noble 4.
-Al igual que su mundo -agrego Emiya -no podemos fallar, ni flaquear soldados. Aunque lo repito siempre, el destino de la supervivencia de la humanidad esta en nuestras manos soldados. Alis tensé, saldremos en treinta minutos.
Noble fue a la armería para tomar el equipo necesario para esta misión, armas cortas para combate cerrado, aunque claro, llevarían sus iconicas armas con ellos. Ya que un grupo de niños de los demonios iría con ellos a esta misión suicida, tenían que ponerles ropas adecuadas para el combate contra su enemigo jurado que solo ellos conocían.
-Debo admitir que estos trajes son mas ligeros de lo que imagine a pesar del metal que lleva encima -dijo Tsubaki admirando su figura luego de que los miembros de noble los llevaran a los vestidores para ponerse uniformes de combate de marines regulares, solo era el uniforme sin cascos, no estaban ellos acostumbrados a la tecnología que tenían implementados.
-No comprendo Sona-sama, porque debemos llevar esto -pregunto Momo, la otra miembro de Sona elegida para ir en la misión.
-Ustedes vieron a ese tal covenant en la lucha, el nivel de sus armas y sus armaduras no se comparan con el nuestro, si vamos a ir con ellos debemos acatar sus reglas -Sona termino de colocarse este uniforme, y al igual que su reina, admiro como este uniforme entonaba su figura, aunque no le dio mucha importancia.
-No lo digo por eso, aunque siento que me apreta del busto este uniforme -dijo Momo sintiendo sus atributos aplastados.
-Yo digo que se ven bien -apareció el caballero de Gremory con su uniforme prestado de la UNSC para él, su llegada sonrojo a la reina de Sitri, no había una relación entro ambos, solamente especulación, y esa especulación se debía que cada vez que estos dos se encontraban, ella bajaba de su papel como segunda al mando -los spartans dijeron que tenían esto, que es parte del uniforme -llevaba gorras de oficiales marines, esto dado que las largas cabelleras de las chicas impedían que el casco se mantuviera sobre sus cabezas. De los seis jóvenes solo Kiba tenía casco marines de acuerdo al uniforme en regla.
Entrego a todos los gorros mientras el comandante de Noble entraba detrás del rubio espadachín sin que lo notaran.
-¿Porque tenemos que llevar esto? -pregunto Momo para luego notar que la gorra era cómoda a diferencia de los cascos de antes -me queda bien.
-Para evitar que los maten al instante -dijo Takashi, líder noble -el covenant tiene implementados escudos de plasma en sus naves e infantería. Nosotros tenemos las armaduras y las siete capas de metal que conforma el uniforme marine. Aunque hemos visto que usan su magia para crear escudos, el jefe no lo siente como algo efectivo. Sin ofender.
Cuando Rias escucho esto no pudo evitar molestarse, durante todo el asalto del covenant a su mundo, ni siquiera ella sola pudo hacer frente al caos que desató el enemigo, jamás había luchado en un verdadero conflicto, siempre luchaba para evitarlos, en verdad eran dos cosas distintas. De no ser por los humanos... quien sabe que hubiera pasado. Como Sekiryuutei, quería devolverles el favor.
-Porque la culpa compañera -Ddraig después de mucho, hablaba con su actual portadora. Una conversación privada que tenían entre ambos a través de la mente de Rias.
-Me siento inútil Ddraig, mas de lo normal -exclamo Rias, terminando de atarse las botas.
-No es tu tarea vigilar la paz de tu mundo, compañera. De todos mis portadores, tu eres la mas rara, los otros se consideraban superiores a los demás, pero a pesar de mi poder en ti, te consideras una especie de guardiana con tu gente -decía el dragón rojo.
-Lo se, mi hermano, mi madre... todos me dicen lo mismo, no eres una guardiana o vigilante Rias. Pero nadie lo entiende, todo lo que hecho es porque no veo a otros hacer algo. Cuando kokabiel amenazo con iniciar la guerra nadie se preocupo hasta que yo actué -dijo con frustración -y no es que moleste que ellos no hayan salvado, sino es envidia, digan lo que digan de los humanos del pasado, los de ahora están unidos por una amenaza común.
No hubo respuesta por parte del dragón, ya entendía el pensamiento de la chica en la que estaba encerrado ahora. Lo que tenia enojada en realidad a Rias, era que su gente ni en las peores situaciones actúan en conjunto, cada clan sobreviviente a la gran guerra seguía con sus pensamientos conservadores.
-¡Arriba, ya! -grito líder noble -es hora de salir.
Caminaron hasta el hangar de lanzamiento. Donde un total de casi sesenta naves caza X-wing estaban aguardando para el despliegue. Caminando muy cerca de estos cazas los jóvenes demonios vieron como los pilotos y de estas naves terminaban los preparativos, motores calentados, misiles cargados y repuestos. Todos los X-wing que veían eran color gris, excepto uno en el que un spartan de armadura negra, parado sobre la nave, daba instrucciones a los pilotos que terminaban de afinar sus naves.
-Traten de mantener el sol a sus espaldas, cuidado con el fuego amigo y recuerden, la mayor de un piloto es saber retirarse, si no pueden ganarle retírense -decía el líder negro del equipo Spartan.
-¿Retirarse de una pelea? -pregunto Momo.
-Entre vivir y morir hay una línea delgada -hablo Issei, haciendo que este grupo de niños demonios se dieran cuenta que llegaron al pelican que los transportaría -la guerra no siempre importa ganar, importa regresar con vida a casa -detrás de Issei, el resto de spartans de Noble estaban preparados y listos para partir, solo esperaban la señal.
-Comandante, no voy a ser niñero de estos -protesto noble cuatro en cuanto los vio de nuevo -sigo creyendo que serán un estorbo señor.
-Sube al pelican Kenichi -fue la única respuesta que le dio su comandante, una orden que también acataron los demás miembros de noble, excepto Issei.
-Comandante -le hablo noble seis un momento -no es por compartir el pensamiento de Kenichi, pero en verdad siento que serán un contratiempo traerlos con nosotros.
-Ordenes son ordenes teniente, solo nos queda aceptarlas -dijo líder noble parado a los pies del pelican con Issei.
Miraron al grupo de jóvenes demonios y no pudieron evitar recordarles a ellos mismos, esas caras de madurez forzada y emoción por el combate en un conflicto de verdad, y aunque sus caras se veían de la misma edad que este grupo de spartans de la tercera generación. La verdad era que Issei así como sus hermanos y hermanas spartans tenían edades que sobrepasaban los veinticinco años. Era el sueño crio génico lo que les hacia verse mas jóvenes, sus cuerpos se conservaran, pero sus mentes crecían.
No obstante al mirar mejor entre los seis, el castaño Beta 312 seguía incrédulo ante la realidad de que la pequeña albina con rasgos felinos siguiera con vida tras ver como un sangheli le rompía el cuello.
-¿MM? -Koneko se puso inquieta ante la mirada atenta del humano -¿que? no me mires así.
-Sigo sin creer que sigas con vida -directa fue la respuesta de Issei para la pequeña felina humanoide.
-Soy una nekomata, tengo siete vidas. Desafortunadamente ya perdí cinco de esas vidas -respondió con alivio, por un momento pensó que era otro más de esos que tenía interés en su pequeño cuerpo. Por favor, era un soldado bien entrenado del que estaba dudando. En otras palabras, Koneko había muerto ya cinco veces, bueno cuatro sin contar con la que le causo el covenant antes.
-Je... -curioso para Issei esta información -te quedarás atrás de mi -le indico. No quería verla morir otra vez.
-Adentro, saldremos en corto -dijo noble uno, en seguida vio a los seis demonios subir sin mas cuestionamientos.
Más adelante en medio del grupo de X-wings, el jefe maestro junto con algunos de los miembros de su equipo Azul hablaban con el líder negro quien estaba listo para partir.
-Ya sabes el plan, Victor. Cuando el covenant los detecte deberán distraerlos en cuanto sean interceptados, después el segundo equipo hará lo mismo sobre el crucero -decía el jefe a Líder Negro, bueno realmente no era él quien era el correcto líder del equipo negro, era en realidad negro cuatro; cuando se trataba de combates negro cuatro se volvía líder negro
-Entendido jefe, solo una cosa. Otra vez debemos usar los nombres clave para la batalla, el enemigo ya sabe nuestras identidades -pregunto el provisional líder negro antes de que bajara la capsula a su x-wing de color negro, con una cruz teutonica en color rojo a los lados, solo este miembro del equipo negro tenía su propio x-wing pintado de forma distinta al estándar en las demás naves.
-Es lo que siempre le digo -habló Cortana desde el casco de Shirou.
-Suerte Hipo -dijo Ichigo junto a Rukia y a Shirou en riendo por el comentario de Cortana -¡suerte a todos! -grito a los escogidos para la misión.
-La suerte la necesitaran ellos, Ichi... Sam -bromeó el piloto, recordó el nombre clave de su compañero -¡prepárense para partir!
Bajo el cristal de la nave caza del líder negro, así mismo todos los pilotos en sus x-wings hicieron lo mismo, en formación para el despegue una voz en las altavoces se escuchaba para todos los no seleccionados para esta misión.
-Atención todo el personal, despejen la pista de despegue -fue la voz de Cortana la que se escucho en los altavoces.
A segundos de partir, el jefe tenía una breve charla con sus compañeros 034 y 087 , acerca de su decisión de ser parte de esta misión.
-Estas seguro de querer ir, Shirou -dijo el pelinaranja spartan con la pequeña soldado -retrasa unos minutos el despegue para preparar mi caza y acompañarte hermano.
-He pesado los últimos dos años detrás del timón de esta nave enviado soldados a misiones suicidas, es tiempo de ir con mis hombres -dijo John/Shirou.
-De acuerdo -tuvo que contenerse Ichigo -te estaremos esperando hermano.
-Buena suerte Jefe -dijo adiós 087, por ahora.
En la pista de despegue, en dos columnas de naves x-wing esperaban la luz verde, sus motores estaban encendidos y sus alas envueltas para ser abiertas a la primera señal de combate. Al final de la linea, en el pelican que se infiltraría, los miembros de noble estaban sentados y agarrados mientras que los jóvenes demonios estaban sentados y un poco inquietos ante el sonido retumbante de los motores de los cazas. Incluso Rias se notaba la preocupación.
-Descuida aun falta para lo mejor -bromeó noble cuatro.
-No le hagas caso -dijo Issei -pero si, mejor sujeten se y pónganse los cinturones.
-El jefe dijo que hay que usar nuestros nombres clave para esto, así que hay que hacerlo nos infiltraremos en líneas enemigos. Escucharon noble -dijo Takashi/Carter -¿Katt?
-Entendido Carter -respondió Korra/Katt, se hallaba en los asientos del piloto.
-¿Jun?
-Entendido comandante -hablo Tatsuya/Jun desde el asiento del copiloto.
-¿Emile?
-De acuerdo, comandante -dijo Kenichi/Emile.
-¿Jorge?
-Entendido -alisto su arma el gigante de Akatsuki/Jorge.
-¿Seis?
-Entendido, Carter -respondió Issei.
¿Era una broma? Una broma curiosa para Rias que el nombre clave de Issei fuese seis, como el número, tal vez era su número de la suerte, el seis. Sexto miembro del equipo noble.
Fue entonces que se dio la señal.
-La luz es verde pilotos, adelante, avancen pilotos ¡adelante! -grito el líder negro acelerando a máximo su cuatro motores.
Uno a uno los x-wing salieron sin romper formación sobre los cielos por encima de la capital del reino de los demonios. Desde el castillo principal de Lilith, ciudad capital demoníaca. Sirzechs junto a los otros reyes además de su esposa, vieron el momento cuando las naves cazas de los humanos salieron de la infinity a través del horizonte hacia el espacio, al final de la fila vieron el pelican en que de inmediato dedujo estaba su hermana, mismo pensamiento tuvo la mahou leviatán sabiendo que su hermana y parte de su sequito estaban a bordo.
-Allá van -dijo Grayfia ya que los reyes actuales guardaban silencio -¿crees que fue correcto dejar que Rias-sama y Sona-sama fueran con los humanos?
-Como hermano estoy en desacuerdo, pero como mahou, Rias es de las mejores guerreras entre los jóvenes, y Sona una gran estratega -dijo Sirzechs manteniendo su papel -solo espero que regresen con bien.
Casi treinta minutos de vuelo cruzaron los pilotos para viajar de un mundo a otro, fue como viajar de la tierra a Júpiter en cuestión de minutos para llegar al territorio del mundo de los asgardianos, un planeta color verde frondoso en casi todo su esplendor. Sin embargo no entrarían al planeta a combatir.
-Es aquí, nos dividiremos -dijo Shirou desde su X-wing estándar como la de los otros soldados -Victor, buena suerte.
-Buena suerte también, jefe -dijeron adiós por el momento, sabiendo que muchos no volverían.
En medio del espacio, a muchas cientos de millas, ambos equipos de naves se separaron. Treinta x-wing elevaron en grande su distancia con el pelican detrás, desviándose del rumbo al mundo asgardiano que estaba en conflicto constante con el reino de los caballeros según informes de Sona y Rias, los asgardianos eran aliados de los demonios.
Sin contar el tiempo, líder noble guió a sus escuadrones hasta encontrar a la vista el crucero covenant en la estratosfera del planeta.
-Allí están -dijo Hipo/Victor -escuchen desplieguen alas y prepárense para el ataque. Formaciones en V -indicaba y acataron las ordenes los treinta pilotos a su haber -líderes de escuadrón, reporte.
-Escuadrón charlie doce listo.
-Escuadrón delta cuatro, listo.
-Escuadrón cobra, listo.
-Escuadrón lanza, listo.
-Escuadrón Wyver, listo.
-Escuadrón Negro, listo -dijo calmado.
Era una vista espectacular la que tenían estos pilotos, era un increíble campo de batalla el que eligieron, por encima de ellos estaba el mar de las estrellas color negro, por debajo el verde y azul frondoso del planeta y mucho más adelante estaba el crucero que debían interceptar.
-Cual es el plan de escuadrón, líder negro -escucho la voz de la verdadera líder negro Margaret 053, cuyo nombre era Elsa.
Una carcajada por parte de los miembros activos de equipo fue lo que se escucho antes de Hipo darse cuenta que en su radar no detectava aun señales enemigas, no lo necesitaba para saber que ya venían hacia ellos. En medio de un ataque frontal, era cuestión de esperar a ser detectados.
-¡Todos, desplieguen alas! -grito y cumplieron.
-Los veo -dijo el líder Wyver. El radar no mostraba señal pero el color morado era visible para ellos en medio de un mar de estrellas blancas, era un número igual de naves seraph enemigas.
-Yo también -grito el líder cobra.
-Aguarden a mi señal -decía el líder negro -mantengan formación... mantengan formación -esperan a tenerlos encima -¡Ahora!
Justo el momento que los seraphs enemigos dispararon sus primeras ráfagas de plasma, los seis escuadrones rompieron formaciones para atravesar el mar de disparos enemigos. Y de inmediato empezaron a contra atacar. Como si fuera una lucha de lobos contra pumas en medio del espacio.
Plasma y misiles explotaban en medio del espacio muy encima del cielo, uno pensaría que al estar en la estratosfera el ruido pasaría desapercibido de los que estuvieran en la superficie del planeta, sin embargo, el eco de las explosiones y los destellos a miles de kilómetros en el espacio se llegaban a escuchar y ver en lo alto del cielo desde la ciudad capital de Asgard, era por encima de sus cabezas donde se libraba la batalla aérea desconocida.
Desde el palacio principal, en su balcón el viejo dios y rey veía con su único ojo en lo alto los destellos amarillos y azules en lo alto, más que tratándose de alguna especie de fuegos artificiales parecían ser mas que nada parecían explosiones.
-Padre -un pelirrojo hombre entro de improvisto en los aposentos del rey, lo vio en el balcón y fue a con él -dime que estás viendo también esos destellos.
-No son simples destellos, Thor -dijo su padre, Odin -tal parece que hay dos bandos luchando entre el cielo y las estrellas encima de nuestra ciudad -dijo con leve entusiasmo, jamás había visto nada parecido. Tal vez tuviera un solo ojo ya, pero ese ojo veía mas allá que cualquier otro que se haya arrancado el ojo para ver las runas perdidas.
Volviendo a la batalla, los pilotos humanos surcaban a sus enemigos mientras intentaban mantenerse con vida y derribar los antes que ellos lo hicieran primero. Los x-wing tenían capacidad para un piloto y un copiloto para proteger por detrás con una ametralladora, pero debido a la escasez de aviadores, ahora los x-wing ya no tenían como protegerse la retaguardia.
-Me lleva -un piloto tenía a tres Seraphs detrás de él pisándole los talones, maniobraba lo mas que podía para quitarse los de encima -¡no me los puedo quitar!
Respondiendo al llamado de auxilio, aquel X-wing negro llego por encima de su compañero en apuros, disparando tres misiles de su caza derribando con cada uno a estos malnacidos.
-¡Líder negro! -grito el nombre de su salvador.
-Así se hace Hipo, perdón Víctor -dijo quien era conocido como negro tres, nombre clave Otto.
Cuando negro cuatro subía a su x-wing cambiaba completamente, se volvía un As de la guerra en el aire, o este caso en el espacio. Compitiendo con leyendas como el barón rojo o el demonio negro de la segunda guerra mundial.
-¿Fueron todos? -pregunto negro dos al ver que ya no habían Seraphs enemigos.
-Y aquí vienen más -dijo Victor, del crucero enemigo salieron más cazas enemigos, eran el doble del número de antes -retomen formaciones, escuadrones -indico.
Desde el crucero Dawn of Salvation, el maestro de nave veía desde su panel de batalla que los humanos seguían siendo la misma plaga de siempre.
-"Malditos humanos, creen que podrán impedir nuestra misión, son tontos si creen que un ataque frontal será suficiente. Nuestras tropas en tierra ya empezaron con la excavación, el guardian pronto despertará" -si no subestimará el potencial humano.
Como si hubiera invocado al mal mayor, un pulso y un estruendo azoto su nave. Se trata de un misil anti plasma desarrollado por los humanos para derribar el escudo de plasma de las naves pesadas del covenant.
-"¿Que?" -quedo desconcertado con la sacudida el maestro de nave.
-"Señor, un segundo grupo de naves humanas nos atacan" -grito uno de sus oficiales.
El grupo de Shirou bajaba en picada contra el crucero cuales cazas stukas, para soltar una primera linea de misiles contra la desprotegida nave covenant, aunque el crucero intento rotar para que las artillerias anti naves abrieran fuego contra los x-wing, los misiles dañaron la coraza del crucero.
-"¡No!" -maldijo a los humanos el maestro -"ordena a la mitad del grupo volver y defender la nave."
-"Si maestro."
Cuando de nuevo los Seraphs y el primer grupo de naves humanas estaban por chocar y enfrentarse de nuevo en un número doble al del grupo del equipo negro. La mitad trasera de los Seraphs se elevo para volver al crucero y protegerlo. La verdadera batalla comenzó, el pelican de noble veían desde lo alto la batalla con lujo de detalle el caos del enfrentamiento espacial. A pesar de sus asientos, el grupo de Rias y Sona veían con impresión. Esto si era una verdadera batalla de facciones.
-Es asombroso -dijo Tsubaki -en especial el piloto del x-wing negro.
El primer grupo se integro al segundo tras atravesar la segunda intersección de Seraph para atacar al crucero enemigo, el caza de Hipo sobresalía a pesar del color negro de su nave, era perseguido por otros tres Seraphs enemigos, pero una maniobra cobra en medio del espacio basto, para ponerse detrás de sus perseguidores y abatirlos con un solo misil a cada uno.
-Hipo es el mejor piloto de los spartans -dijo Katt/Korra -le pusieron apodos como el diablo negro, o jinete oscuro por su nave. Pero el covenant le tiene puesto su propio apodo.
-¿Así? Como lo llaman -pregunto Kiba al reconocer
-Furia nocturna -respondió Issei.
El color oscuro de su nave, lo hacia casi in detectable ante los ojos de sus enemigos, y aunque sus radares lo detectaran, el color oscuro hacia pensara al covenant que él no estaba allí, hasta que un misil balístico humano aparecía frente a sus cabinas. Lo mismo fue para un puesto de artillería lateral del crucero que no vio venir al oscuro x-wing que venia de frente, todo por derribar a un lejano caza humano, vengo a su compañero abatido con su ultimo misil antes de recargar.
Jun y Katt vieron como el crucero comenzaba a tener fugas y aberturas serias por producto del daño de los constantes misiles que lanzaban sus compañeros, ya era momento de entrar y cumplir su parte del plan.
-Es ahora o nunca, noble -apareció la voz del jefe en sus cascos de noble -van a salir un grupo de banshees desde los hangares del crucero, es su entrada.
-De acuerdo -dijeron -¡sujeten se que entraron fuerte! -grito líder noble.
Motores en marcha y a toda velocidad, en picada acelero el pelican hacia el crucero covenant mientras rotaba para esquivar los disparos de los cazas humanos, poniendo en ruta el hangar abierto para la entrada del pelican.
-Vas bien, vas bien, vas bien -decía Korra mientras pilotaba el pájaro de hierro para atravesar el fuego cruzado siendo sacudido el pelican por las explosiones adyacentes. Ya sabía como se sentían los pilotos de los bombarderos de la segunda guerra mundial en plena misión.
En el hangar del crucero, mas de cuarenta naves banshee en formación esperaban estaban por despegar ya que el número de Seraphs llegaba cero muy pronto.
-¡No lograremos! -grito Momo ante la proximidad y el hecho de que las artillerías del crucero comenzaron a apuntar a ellos.
-¡Si lo haremos! -dijo sona apretando las manos al asiento, iban a colisionar directo contra los banshees por despegar.
Cuatro misiles de x-wing aparecieron adelantándose en el camino y destruyendo las hileras de Banshees antes de poder despegar, para que así entrara de golpe el pelican en el crucero.
-¡Preparense para entrar!
Un aterrizaje forzoso fue la forma de entrar para el pelican en medio del fuego azul, derrapando por la pista del hangar hasta chocar con un Phantom estacionado mientras que las tropas Covenant intentaban controlar el caos. El golpe fue fuerte para todos los que iban dentro.
-"¡Una nave humana!" -dijo un capitán elite tomando las armas junto a otros de raza rodeando el pelican, no pasaba nada, nadie salía de la nave humana hasta que un golpeteo de la puerta puso en guardia a los soldados Covenant que no daban la alerta de la infiltración -"cuando abran la puerta abran fuego sin piedad."
Que sería de Noble y los dos grupos de demonios, caerían en la trampa o detendrían al Covenant antes de que despertarán al guardián dormido ¿Asgard y Camelot se verían afectados por la guerra entre humanos y Covenant? Todo dependería del curso de está batalla.
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