Uzaki-san

 

Todo comenzó luego de que Uzaki Tsuki, la madre de Hana; estuviese viendo una de sus novelas en la televisión antes de conocer al senpai de su hija, Sakurai. Con la idea de que este muchacho tenía puesto sus interés en ella tras una serie de mal entendidos por parte suya, llego el momento en el que esos malentendidos, se volviesen verdades.

-¿Eh? ¿quieres que vaya a visitar a Sakurai-kun? Hana que me estas pidiendo -pregunto llena de nervios Tsuki desde la sala despidiendo a su hija quien se dirigía a su trabajo que tenia para costearse la universidad.

-Por favor mamá -suplicaba su hija, tuvo que darle la explicación de tan inesperada petición -verás, hace una semana que Senpai tuvo un accidente cuando salía del trabajo...

Al salir del café en compañía de Uzaki cuando el turno termino, un auto perdió el control en el camino desviándose peligrosamente hacia donde Hana y Shinichi iban por la cera. Ante los reflejos del chico, impidió que el accidente del auto fuera fatal para él y su molesta amiga, pero como resultado, Sakurai se fracturo el brazo al grado de tener ser enyesado.

-Cierto, aun no se ha recuperado -exclamo Tsuki tras recordar aquella anécdota.

-Si, y hace poco que le dio fiebre, debería ir a cuidarlo pero con su ausencia en el trabajo alguien tiene que tomar su trabajo -dijo Hana convenciendo a su madre luego de mostrarle cuando responsable podía ser.

-Esta bien, iré a visitar a Sakurai-kun y me asegurare de que este bien, puedes contar conmigo Hana -respondió con mucha paciencia.

Tsuki espero que todo fuera normal, solo se trataba de ir a cuidar a un joven universitario enfermo, como si en casa no tratase de vez en cuando así con sus hijos. Sin embargo, el miedo y las dudas aun prevalecían entre todos sus pensamientos acerca de Sakurai.

-Agradezco que haya venido a para asegurarse sobre mi, Uzaki-san; pero lo digo en serio estoy bien -decía Shinichi recostado en su cama con el brazo derecho vendado casi hasta el hombro, mientras descansaba, la irritación en su cuerpo le recubría, estaba saliendo de la fiebre que le azoto tras accidentarse.

-No es nada, Sakurai-kun además aun hace falta que de te gracias por haber protegido a Hana ese día -Tuski había vuelto a con Shinichi luego de tomar la molestia de ir a la cocina de Sakurai y prepararle un poco de caldo con arroz dentro para que comiera -aquí esta el almuerzo, espero que te guste.

-Gracias. Uzaki-san -el senpai de Hana, se sentó sobre misma cama para estar mas cómodo y comer, llevaba casi todo el día acostado como los tres días anteriores -huele bien.

Un halago viniendo de un joven, le sentó bien a Tsuki, quien yacía sentada en un banco junto a la cama de Shinichi.

-¿Quieres que te ayude a comer? -pregunto la mujer, tomando la cuchara con el caldo y el arroz del plato para darle de comer a Sakurai -vamos, di ah~

Incomodado, no le quedo mas opción que acceder al trato que la mujer le estaba dando, tratándolo como si un niño pequeño se tratará, estaba enfermo y eso era motivo con suficiente razón como para recibir tal trato. En cuanto probo el caldo de Tsuki, Sakurai quedo encantado con el sazón de la madre de Hana, y no se reservo el comentario.

Tan solo era un poco mas de medio día y Tsuki seguía acompañando al senpai de su hija ahora que volvía a estar dormido, los malestares de la fiebre persisten si no descansas lo necesario. En tanto él reposaba, Tsuki decidió darse la tarea de ayudar a Sakurai a mantener limpia su casa, limpiando sus pisos, lavando sus trastes, sacando la basura, acomodando sus pertenencias. Y entre las pertenencias, la madre de Hana encontró algo que debió esperar encontrar entre tantas cosas que pertenecían al joven.

-¿Una reviste de mujeres? ¡¿Maduras?! -encontró una revista para hombres entre los libros y cuadernos de Sakurai al ir acomodando sus cosas, era una revista en donde cada pagina, las mujeres se iban mostrando con menos ropa y posando cada vez en formas mas provocativas -lo sabia a Sakurai-kun le gustan... maduras. 

Después del primer día que Shinichi fue llevado a casa por Hana para conocerse, tuvo la mala impresión psicológica cuando vio que el chico no paraba de mirarle, sobre todo mirando un angulo bajo a la cara de Tsuki. Ella pensó que estaba mirándole su enorme y pronunciado escote, cuando en realidad estaba mirando a la gata que tenían de mascota y que en el momento, Tsuki en sus muslos descansando.

-No, no, no -se decía repetidamente devolviendo esa revista entre las pertenencias de Sakurai -de ninguna manera, y que si a Sakurai-kun le gustan maduras, estas mujeres son mas hermosas que yo, de ninguna manera estaría yo en la mira de un joven como él... -se puso nerviosa de solo imaginar que en esa cama Shinichi y ella tuvieran un encuentro carnal -¡de ninguna manera!

-Uzaki... -escucho a Sakurai llamarle, fue a verlo y lo encontró hablando entre sueños ¿podría ser que estaba soñando con Tsuki por casualidad?

-Solo esta soñando -pudo aliviarse un momento -es tan tierno cuando duerme... -susurro Uzaki-san al verlo descansar -¿are? -de pronto vio la cara pacifica de sakurai volverse tensa, como si estuviese teniendo un mal sueño o uno incomodo -¿acaso estará teniendo una pesadilla? -decía sin buscar despertarlo al analizar bien, Uzaki-san vio lo que podía ser la causa, un bulto largo y puntiagudo sobresalía debajo la sabana mientras el chico seguía teniendo el incomodo sueño por el que pasaba -¿eso... eso que tiene allí es una erección?

-Uzaki... -volvió a escucharlo llamarle, notando que su empalme iba temblando de forma desesperada.

-¿Será acaso, que esta teniendo alguna fantasía conmigo? -pregunto Tsuki temerosa, pero vio como Sakurai seguía estando incomodado mientras dormía, sin tener la mas remota idea de lo que en realidad estaba soñando Shinichi.

En la mente de Sakurai...

En su mente, El senpai estaba en un sofá sin poder moverse teniendo a Hana a su lado teniendo puesto un atuendo de conejita playboy. Abrazando de forma muy cariñosa a su senpai, embarrando sus grandes atributos sobre el pecho de Sakurai.

-Senpai, ahora estamos solos~ -decía sugestiva Hana -puedes hacer lo que quieras conmigo otra vez, Senpai~

Era lo que en su sueño veía el joven Sakurai. Por fuera, Tsuki veía como el pene de Shinichi palpitaba mas y mas a cada segundo, parecía que le iba a explotar.

...Fuera del sueño.

-Parece que le duele... -no paraba de mirar la erección que se cargaba Sakurai -¿será por eso que no puede dormir con calma?

-Uzaki... -otra vez, le escucho repetir.

-Solo... -Tsuki removió despacio la sabana y el corto pantalón que tenia encima Sakurai -solo quiero ayudarlo a sentirme mejor... -mas que ser una ama de casa o una madre, parecía que se tratara de una jovencita inocente. Al revelar el bulto de Shinichi, Tsuki quedo impactada ante el tamaño de lo que el senpai de su hija tenia -es... es muy grande... es como si fuera la de mi esposo, no; es mas grande -decía en su mente, de pronto vio como el pene de nuevo palpitaba, parecía que iba a explotar de solo la presión sanguínea.

-Uzaki... por favor -la forma en la que el senpai llamaba, Tsuki pensaba que a quien le hablaba era a ella.Si supiera que en su cabeza lo que soñaba era que Hana lo estaba provocando para hacer esas cosas sucias que Tsuki iba a hacer.

-Descuida Sakurai-kun, solo lo hago para... para hacerte sentir mejor... -la mujer, con gran pena y rubor hizo que su mano tomara el pene de Shinichi, le fue masturbando a medida que lo iba a haciendo, pudo ver como el rostro de dolor del senpai iba calmándose poco a poco.

-S-se... -Tsuki miro a Sakurai quien seguía durmiendo mientras ella no dejaba de masturbarlo -se siente bien... -escucho decir. Lo cual alegro a Tsuki, hacia bien las cosas. Pero en su mente, quien soñaba Shinichi que tenia la mano puesta en su miembro, era Hana.

Los minutos pasaban, y Tsuki comenzó a preocuparse. La sensación de calor de la polla de Sakurai iba transmitiéndose a su cuerpo a través de su mano con la que le tomaba su miembro.

-Ya deberías haberte corrido... -pensaba Tsuki, sabia como funcionaba el aparato reproductor masculino, y para este punto su miembro ya debería estar expulsando por lo menos liquido pre seminal. Era lo mínimo lo que el pene de Sakurai estaba liberando.

-¡Uzaki!... -levanto la voz entre sueños Shinichi.

-¿Eh? -tan solo logro pronunciar tal sonido, cuando Sakurai se vino finalmente justo cuando la mano de Tsuki estaba en la base del tallo del senpai -¡Kya! -grito al sentir el semen caliente del joven cayendo en su mejilla y su blusa, así como en su propia cama, todo mientras Shinichi seguía dormido -por fin, se vino ¿ya estas mejor? -respiro aliviada Uzaki, ahora solo le restaba limpiar lo que cayó del esperma en ella -te viniste mucho, Sakurai-kun ¿Será acaso que se masturbé seguido? O que tal si él y Hana... -podía ser que él y su hija tuviera una relación en secreto, una relación sexual muy activa -no será acaso, que esperaba que Hana viniera y...

En esa situación imaginada, Hana y Sakurai hacían cosas de adultos en esa misma habitación aprovechando que el chico estaba herido para tener su nido de amor. Por así decirlo. O podría ser que Sakurai se aprovechaba de su situación para que él y su hija hicieran cosas inmorales, sin ser esposos todavía. Creyó mas en lo ultimo.

-¡Lo sabia, Sakurai-kun es un depredador sexual! -pensaba Tsuki, su suposición era infundada mucho más por la  -Hana debió darse cuenta y seguramente ha hecho que Sakurai-kun se concentre solo en ella para que no se me acercará, Hana... cuantas cosas pervertidas sucia te ha hecho hacer Sakurai-kun.

-Mmmm... -le escucho murmurar entre sueños a Shinichi, vio entonces Tsuki que su miembro aun lo mantenía duro y palpitante.

-No, Hana yo tomaré tu lugar con Sakurai-kun.

-¿Que, que suena? -el sueño de Sakurai pronto se vio afectado, cuando una serie de ruidos incómodos y fuertes se hicieron presentes, eso sumado una extraña sensación de placer y comodidad inexplicable. Mas cuando abrió sus ojos vio a Tsuki-san con su boca, ella chupaba su pene hasta ser devorado todo por sus labios -¡Uzaki-san! -la mujer solo lo miro con enojo, para continuar succionando su polla hasta las bolas -pare, si sigue así...

Termino por venirse en ese mismo momento dentro de la boca de Tsuki. La escucho atragantarse, ella para nada escupió su polla en lo que Sakurai se vino, pero enseguida escucho a la mujer tragarse todo su esperma liberado y que en su boca pudo retener, sintió como la lengua de Tsuki pasaba de nuevo por toda su polla, limpiando cada rincón de su ahora sensibilizado pene.

-Uzaki-san porque... -decía mas no termino la frase, quedo deslumbrado al ver como Uzaki-san se quitaba sus ropas y revelaba un juego de lencerías negras, hecha de encajes. Mas eso solo hacia del atractivo cuerpo de la señora mucho mas apetecible, ahora entendía de donde saco Hana ese par grande que siempre cargaba -¡Uzaki-san!

-Sakurai-kun quería creer en ti como un buen chico, pero no me dejas de otra -decía en un tierno modo serio, se quito el sostén delante de los ojos de Shinichi, valiendo dos bledos que los ojos del chico quedaran perdidos en sus pechos enormes -voy a tomar el lugar de mi hija quieras o no.

-Espere, Uzaki-san; cálmese primero... -no entendía ni un carajo del porque de pronto la amable mujer se puso enojada y lujuriosa .

Incapaz de moverse por su brazo lastimado, Sakurai dejo que la mujer hiciera lo que quisiera con él, pero no estaba para nada de acuerdo. Viendo a Tsuki completamente desnuda, observo como tomaba con su mano su pene para hacer que entrará en su vagina, primero la cabeza se abrió paso entre los labios, poco a poco Tsuki logro hacer que mas de la mitad del miembro de Shinichi entrara en su coño.

-El pene de Sakurai-kun es mas grueso que el de mi marido... -pensó Tsuki al procesar el dolor.

-Su interior es mas apretado que el Hana... -dijo en su mente el senpai. Uno sentía que su miembro era asfixiado con placer mientras que la otra sentía que las paredes de su interior iban a reventar por lo grueso del miembro del chico -Uzaki-san... -exclamo Sakurai, momento en el que Tsuki empezó a moverse de arriba a abajo lentamente, una cara de orgasmo se dibujo en el joven universitario.

-Sakurai-kun... -hablo la madre de Hana -tu pene... aprieta mucho mi coño -pronto, se dejo caer sobre el cuerpo del senpai de su hija sin que su cuerpo dejara de moverse, su rostro quedo a corta distancia de Shinichi, sus pechos colgaban y apenas si lograban embarrarse contra el pecho del joven atleta. 

-Puedo... puedo sentirlo, Uzaki-san, se siente... bien -respondió, su mirada estaba perdida en el rostro sudoroso de Tsuki que tenia encima.

No mucho después, Uzaki se dio la vuelta sin dejar de estar montando el miembro de Shinichi, dejándole ver su espalda.

-Uzaki-san... -Shinichi se perdía al ver la espalda blanca de Tsuki, viendo cuan grande era el trasero de la mujer, mas de lo que se ocultaba bajo sus faldas. Con este angulo, él lograba ver los bordes grandes de los pechos de esta mujer -no voy a poder contenerme mas...

-Esta bien -dijo Tsuki sin parar de mover a bajo ritmo su cuerpo -hazlo puedes hacerlo dentro si quieres -podía sentir el pene de Sakurai volverse mas grande en su interior, ya sabía que iba a venirse el chico -perdóname cariño... pero voy a recibir el semen de un joven en mi interior -repetía en su cabeza -hago esto para proteger a nuestra querida Hana.

-¡Uzaki-san!

Solo sintió como el esperma de Sakurai se libero en su interior, llegando a lo mas profundo de su interior, la cantidad del fluido era demasiada para Tsuki. Tuvo que sacar el pene del joven antes de que terminara de eyacular, como consecuencia el resto del semen disparado cayó en su espalda en lo que se dejaba caer en el resto de la cama de Shinichi tras agotarse por la acción.

-Se corrió bastante -Tsuki lograba ver como de su vagina abierta, el blanco fluido de Sakurai iba derramándose de su interior como si jalea de un frasco caído se tratara.

-Me corrí bastante -pensaba Sakurai -esa sensación fue genial.

-Espero que con eso fuese suficiente, Sakurai-kun tiene una resistencia increíble -por mas de treinta minutos estuvo Uzaki moviendo su cuerpo para producir placer al chico -espero que este... ¿eh? -a lo lejos, vio como el pene de Sakurai seguía duro y palpitante -no puede ser...

-Uzaki-san -Shinichi logro levantarse en su cama, su polla la mantenía dura -le importaría si... -su pene quería mas.

-Oh no, debe ser broma -sintió terror al que la cosa de Sakurai se mantenía dura y fresca -pero si no hago esto. Posiblemente descargara toda su lujuria sobre Hana y eso no puede ser -pensaba la madre -Sakurai-kun -le hablo, él vio como con sus manos, Uzaki abría los labios de su vagina y a pesar de estar todavía liberando el semen de su interior le invito -...adelante, puedes meterme tu polla otra vez.

-Uzaki-san... aquí voy -

A pesar de tener su mano derecha vendada, eso no fue impedimento para Shinichi de lograr conectar su cuerpo con el de Tsuki fácil dado que su interior estaba humedecido por la ultima ronda, sin embargo Uzaki-san seguía sintiendo grande el miembro de Sakurai en su interior.

-Esta dentro -dijo lo ocurrido el senpai -voy a moverme, Uzaki-san.

-Si... hazlo, muévete Sakurai-kun -exclamo, en la pose que se coloco Tsuki iba sintiendo con cada embestida del joven, como la punta de su polla tocaba su útero -haa~ -soltó un gemido Uzaki, y aunque él se preocupo, Tsuki mostró ser mas fuerte que eso -Sakurai-kun tu pene... tu pene golpea hasta lo mas profundo de mi coño... -su mano en su boca tapando para que no le escuchara gemir.

-Hizo un lindo gemido, Uzaki-san -dejo caer su cuerpo sobre la espalda de la mujer, su mano herida tomo los grandes senos de Tsuki, mientras que la otra mano, hacia que ella le dejara escuchar los sonidos de placer que de su boca iban saliendo -por favor, déjeme escucharla.

-Sakurai-kun... eres un pervertido, haa~ -con vergüenza hacia los sonidos, ni siquiera su esposo le dejaba escucharla gemir cuando tenían sexo, Shinichi era el primer hombre que la escuchaba hacer estos ruidos lascivos.

-Uzaki-san, hace ruidos lindos -halago el joven.

-No, no digas eso -exclamo, a pesar de ser embestida cada vez mas rápido por Sakurai, lo cual significaba una sola cosa -sino, terminaré pervirtiendo me, Sakurai-kun...

-Uzaki-san, su interior se siente genial, voy a venirme... voy... ¡me vengo!

-¡Kyaaaa!

Su grito retumbo en la habitación, que bueno que las paredes absorbieron el ruido, sino a quienes tuviera por vecinos el joven hubieran escuchado el acto de amor desenfrenado que tuvieron por mas tiempo, casi hasta caer el atardecer.

-Uzaki-san, gracias -decía Sakurai cuando quedo satisfecho luego de seis rondas de sexo, estaba de rodillas delante de Tsuki a pesar de seguir desnudos en su cama.

-¡No, no digas eso! solo lo hice para proteger a Hana -exclamo la mujer, mas Shinichi no entendió esto, así que le pidió explicación -si, seguramente tu haces estas cosas con mi querida Hana ¿no es así? Te has aprovechado de ella antes y ahora usas tu condición para hacer mas cosas pervertidas con mi hija, pero como su madre estoy dispuesta a tomar su lugar como tu... amiga sexual si es lo que quieres.

-¿Que? -quedo mas confundido que aclarado el senpai -¿de que esta hablando?

-¡No finjas! -como niña pequeña enfrentaba al joven que seguía agachado -desde el primer día que nos conocimos, pusiste tu mirada sobre mi cuerpo, lo recuerdo bien. Pues si es así adelante, tómame, seré tu amiga sexual si es lo que tanto quieres, pero no pongas tu manos sobre mi querida Hana tu ¡depredador sexual!

-Em... Uzaki-san no entiendo de lo que esta hablando -tuvo que hacer memorias -espere ¡se equivoca! -le contó que lo que tanto miraba aquel primer día que Hana lo llevo a su casa, no fue a la misma Tsuki, o su escote ni ninguna parte de su cuerpo, era a la gata que tenia de mascota.

-¿Nuestra mascota? no era mi cuerpo lo que mirabas -pregunto.

-No me atrevería a mirar a una mujer que tuviese esposo o novio, además Hana es solo una amiga, ni siquiera he pensando en poner mis manos en ella -aclaro, ya sin tener que estar mas de rodillas -es mas, usted... Uzaki-san fue mi primera vez.

-¡¿Que?! que vergüenza -en verdad se sentía avergonzada de lo que hicieron, debió hacerle caso a ese pequeño pedazo de ella que le decía no hacer nada -yo soy quien lo lamenta Sakurai-kun, no quise hacer que tu primera vez fuese así.

-En realidad, me gusto... me gusto hacerlo con usted -respondió con rubor en sus mejillas.

-¿Si? -no espero que le dijera eso, no podía decirlo pero, a Tsuki también le gusto la acción dada por el senpai -supongo que podemos llegar a un acuerdo... -divago.

El tiempo paso y las heridas de Sakurai sanaron así como su fiebre desapareció. Volvía a tener su vida como universitario y empleado del café con sus amigos. Sin embargo, había algo nuevo en lo que su tiempo pasaba, algo que ocurría una vez por semana.

La puerta de su departamento sonó y Shinichi quien tenia el día libre de la escuela como del trabajo se encontraba.

-¿Si? ¡Uzaki-san! -se alegro de ver a la mujer quien era la que toco a su puerta.

-Sakurai-kun, sabes que puedes llamarme Tsuki cuando nos reunimos, me invitas a pasar -respondió.

Podías preguntarte a que venia a visitar a Sakurai si ya no estaba enfermo ni incapacitado de su mano. El motivo por el que Tsuki iba a la pequeña casa del senpai de su hija, una vez por semana era para darse mutua atención. Desde de que entraba en casa de Shinichi hasta el ocaso, ambos se volvían amigos sexuales. Solo ponía un pie en su casa y cuando Sakurai cerraba la puerta, él se abalanzaba sobre la mujer y ella se dejaba atrapar por los brazos fuertes del universitario senpai de Hana, despojándose uno al otro de su ropa, excitándose al no mas ver el cuerpo de su amante. 

-Sakurai-kun, pareces un bebé cuando bebes la leche de mis pechos -la cara del senpai estaba en medio de sus grandes tesoros, chupando la leche que no sabía que aun tenia almacenados en sus senos -eres un chico pervertido~

-La leche de sus pechos es muy sabrosa, Tsuki-san -chupaba uno de sus pechos y con el otro la acariciaba con sus manos.

-El cuerpo de Sakurai-kun es tan apetitoso~ -Tsuki, llevo al chico a su propia cama, luego de acariciar los abdominales que se tenia trabajado con su manos y sus pechos, tomándolo de su miembro, estimulándolo con su mano.

-Tsuki-san...

-Déjame complacerte también -dijo con una sonrisa.

La boca de Uzaki bajo hasta el pene de Shinichi, lamiendo primero la punta, lo largo y grueso del dote de Sakarui, para después dejar que su boca tomara todo lo que pudiera de él en sus fauces, incluso le hizo lo que a su marido nunca le hizo en la intimidad, usar sus pechos para darle placer a su pene, mientras la punta de su polla iba lamido.

-Tsuki-san... si sigue así...

-Aun no, Sakurai-kun -justo cuando iba a llegar al clímax ella dejo de moverse -hay otro lugar donde quiero que me des toda tu joven esencia. Cinco segundos después, Sakurai estaba encima de Tsuki, enterrando profundamente su polla en el tesoro de la mujer -¡Si, se siente bien Sakurai-kun, tu polla golpea mi útero muy bien!~ -mordía el hombro del chico al sentir como el orgasmo recorría su cuerpo.

-Adoro su interior, Tsuki-san... -de no ser por su complexión atlética, seguramente perdería muy fácil la habilidad de hablar al estar teniendo sexo con ella -¡voy a correrme dentro!

-Hazlo, lo quiero dentro ¡Sakurai-kun! -se puso ardiente el interior de su vientre de Uzaki Tsuki, el esperma del senpai rebosaba su interior hasta desbordarse.

-Soy una mala madre... -pensaba Tsuki, era embestida por Shinichi estando ella en cuatro sobre la cama -engaño a mi marido con el senpai de mi querida Hana... pero no puedo evitarlo -besaba al chico cada vez, luego de que se corría en su interior -me reúno con él una vez a la semana sin que mi familia sospeche, solo para recibir el amor de Sakurai-kun desde la mañana hasta el atardecer... -contra la pared, Shinichi la daba duro cuales animales en temporada de apareamiento se encontraran -todo por un malentendido.

-Tsuki-san... -Sakurai se masturbaba fuerte, teniendo a la mujer de rodillas ante él con la boca abierta y su cuerpo sudado y pegajoso.

-Dámelo Sakurai-kun, quiero que tu semen caiga en mi boca... -su boca esperaba al esperma del chico. Mas allá de su boca fue servido la esencia de Sakurai -delicioso~ -saboreo lo que cayó fuera de su boca.

-No hay vuelta atrás para mi, aunque la verdad, no quiero que termine -montaba agresivamente al chico justo cuando los rayos del sol iban ocultándose por el horizonte -mas, dame más Sakurai-kun~

-¡Tsuki-san!

-Es posible que tal vez ya tenga el hijo de Sakurai-kun en mi vientre, lo se porque mi periodo esta atrasado... -el encuentro de la semana termino, se despedía de su amante como debía ser, con un beso lascivo cuando estaban en la cama, antes de salir y vestirse para dejar todo hasta la siguiente semana -debería estar preocupada, pero no lo estoy. Estoy... feliz.

¿FIN?