Parecía tratarse de un sueño, eso creía Saeko teniendo a aquel niño que dejó una huella antigua en su corazón desde hace mucho tiempo. ¿Qué era ese sentimiento incierto que latía en la senpai de Komuro en ese instante? ¿Amor acaso? No lo aseguraba, la nostalgia se apoderaba de ella cada que pensaba en ese niño que sus memorias no dejaban de atormentarlo con sus recuerdos, pero se sentía indigna de amar.
Flashback
Una vez después de la practicas con su correspondido club de Kendo, uno de los chicos del club quiso acercarse a la bella chica que tenia como líder en un débil intento por invitarla a salir.
-Em... Saeko-taichou -timido se acercó un joven aprendiz del club de primer año -¿usted está saliendo con alguien en este momento?...
-¿Que? -aunque la pregunta fue inesperada, no la tomo con guardia baja.
-¡Perdón! Es solo que yo quería invitarla a salir y... -la autoridad que imponía Busujima era más grande que las esperanzas del chico por tener una relación con ella.
-Lo siento pero no te veo como lo que esperas -decía Saeko, sin buscar dañar mucho los sentimientos del chico -si bien eres un buen chico, te falta mucho entrenamiento para estar a mi nivel; además... -un leve rubor se marcó en las mejillas de Saeko, desviando la vista de su Kohai -es verdad. Hay alguien que me interesa, me estoy reservando para él.
-Comprendo -las esperanzas del chico fueron destruidas pero no fue tan mal como esperaba -espero que Taicho sea feliz con esa persona.
Después de que se alejara, sin remordimientos por rechazar al chico; Saeko se quedó mirando al techo esperando una respuesta divina para su dilema, si algún día volvería a tener la oportunidad de verlo de nuevo.
-Solo espero que podamos reencontrarnos... -suspiro.
Fin del flashbsck
La respuesta a esa pregunta llegó con un mes de retraso.
-Pregunte: ¿Qué estas haciendo aquí, Komuro Takashi? -aunque se alegraba de verlo, su seria y madura actitud seguía al margen. Sin decir mucho, el pelinegro saco de su bolsillo esa pequeña pero significante recuerdo que le dejo él cuando niños, recuerdo que le dejo sin saberlo -de donde lo...
-Lo dejaste caer anoche, y cuando lo vi me dije: que no podía creer que realmente conservaras algo como esto -entro en nostalgia cuando esos recuerdos le vinieron a la mente luego de encontrar esa piedra que una vez el encontró hace tiempo -entonces te recordé -dejo de mirar el corazón de roca para devolvérselo
Saeko tomo ese pequeño pedazo de roca, rozando su mano con la de Takashi, su rostro lucia normal, mas por dentro su corazón latía a mas de mil por segundo.
-Jamás pensé que nos encontraríamos aquí en Fujimi, Busujima Saeko -con eso basto para mover su corazón en verdad.
-Me alegro también de verte Komuro-kun -dijo y su arma la bajo a un costado de su cuerpo, acomodo su cabello para verlo directamente -ha pasado mucho Komuro-kun.
Aunque parecía una escena bella, el ver dos amigos de la infancia reunidos por obra del destino o lo que sea que controle el universo, desde la puerta de entrada al club de kendo Saya veía con muchos celos a su novio coqueteando con esa chica que conoció antes. Aunque ya habían hablado acerca de que Takashi le pertenecía a Saya, (aunque mas bien era que Saya pertenecía Takashi). No le gustaba la idea de ver a su chico soñado hablando a solas con otra.
-Cuanto mas piensa hablar con ella -susurro muy celosa la tsundere. Para nada le gustaba lo que veía.
Flashback
Luego de regresar con los suyos tras rescatado por dos de sus soldados, Takashi hablo con su chica acerca de haber encontrado ese pedazo de piedra peculiar que había olvidado.
-¿Como que ya recuerdas quien es? -exclamo Saya cuando el pelinegro se limpiaba la tierra y el humo que cayó sobre su cara en la seguridad de su pequeño cuartel en medio de la ciudad.
-La conocí cuando niños, de hecho me sorprende haberla olvidado -comento el chico sorprendido de si mismo -la tengo vista en la academia... -si apenas recordó de cuando era niño, con mucho esfuerzo podría recordar quien se trataría si la llego a ver en la academia -¡Morita! Aun tienes tus listas de las chicas de la escuela.
Morita tenia hecho una lista con los nombres, gustos y clubes que caracterizaban a cada chica y profesora de Fujimi, así como otras chicas fuera y dentro de los parámetros de la escuela; si la policía le encontraba esta lista bien podrían acusarlo de acosador o pervertido.
-Nunca salgo de casa sin ella -dejo de hacer lo que sea que estuviese haciendo con los otros chicos alrededor del mapa.
Fin del flashback
-Maldición... -cada segundo que pasaba viendo a Takashi con ella se irritaba mas.
-Cálmate Takagi, recuerda que plan tiene Komuro -abajo de ella cuando acechaba desde la puerta, estaba Morita viendo como ligaba a una chica mas -pero aun así, lo envidio -entonces susurro aun mas bajo mirando a Komuro -mira que tener a la chica lista de Fujimi como tu novia es mucha suerte para ti, amigo. Pero ir detrás de la capitana del club de Kendo de la escuela. ¡Dios! ¿es que eres el puto amo o que? que envidia... -en medio de esa depresión, y debajo de la falda de Takagi, logro ver el color de la ropa interior que llevaba la chica en ese momento -por lo menos tengo una linda vista.
-¡Cállate tonto! -piso su cara, como si no se hubiera dado cuenta que tenia su corta falda sobre la cabeza del oxigenado amigo de Takashi.
-Vale la pena... -dijo con el pie de la pelirrosa sobre su cara.
Era lo que peleaban ellos, porque Takashi delante de ellos conversaba acerca del tiempo pasado entre él y Saeko desde ese ultimo día.
-Siempre me pregunte donde estarías, nunca creí que nos volveríamos a ver aquí por lo menos -exclamo Saeko con esa postura madura en su voz y actitud.
-Yo no pensé en ti por mucho -dijo, mas fue hiriente esas palabras del chico -perdón, pero estuve ocupado -Takashi mismo se dio cuenta que sus palabras eran duras pero realistas.
-Ver aun viejo amigo convertido en un jefe Yakuza es increíble y a tan corta edad -exclamo, realmente le tenia sorprendido a la pelimorada.
-Dímelo a mi, ¿tu una sicaria? debí imaginar -exclamo con un tono de juego.
Su corazón latía mas y mas cada instante que pasaba frente a Takashi, aunque estaba alegre sabía correctamente que no debía estarlo.
-Escucha Takashi, me alegre verte de nuevo pero... era mejor no reencontrarnos.
-Porque lo dices -pregunto suave.
-...Lo siento, debo irme a casa -se dio la vuelta y se fue -exclamo la peli morada tomando su bokken y dirigiéndose a los vestidores. Escapando de su camino, quienes estaban detrás de la puerta.
-Espera, Busujima-senpai -grito su apellido, lo cual ruborizo mucho por dentro a la chica. Mas no fue por ella, aunque le dio gusto darse cuenta que alguien de su pasado que apenas si se acordaba de momento. Tenia asuntos mas importantes que atender, saco su teléfono y con un solo botón de marcado rápido, contacto a su experto en infiltración -¿lo lograste?
-Lo hice hace dos minutos -era ese chico hacker -una lastima que no todos los estudiantes de Japón lleven tengan acceso al internet en la escuela para sus celulares, la ventaja es que puedo usar tu teléfono como arpón para buscar otros dispositivos cerca e infiltrar un virus silencioso que bajo toda información a quince metros a la redonda -conto Ricardo.
Lo que paso fue esto: Takashi quería acercarse a Saeko para que Ricardo a través de su celular pudiera ubicar el teléfono de la capitana del club de kendo para infiltrarse entre sus contactos y ubicar a quien de los cabecillas del dragón negro la había contactado para matarlo en los ataques pasados. Sin embargo hallaron algo mas.
-Y bien ¿Qué conseguiste? -pregunto Komuro saliendo de las instalaciones del club para irse con sus dos compañeros que no parecían ser discretos al haberlos observado desde la puerta.
-Pues... -algo puso en duda a su sicario -mejor ven a verlo en persona, hay problemas.
Mas tarde... reunidos en su cuartel clandestino.
-¿Cual es el problema? -pregunto Takashi justo para ver la información en la computadora portátil de Ricardo para revelarle la foto descargada de la base de datos de agencias militares de una mujer adulta con fichaje internacional -¿quien es?
-Es bonita -dijo Imamura dado su atracción por las mujeres maduras -un segundo... -algo le llamo la atención de la mujer -¿no es nuestra directora Igawa Asagi?
-¿Saben quien? -pregunto incrédulo.
-Si, es la directora de la escuela, Igawa Asagi dicen que fue militar de las fuerzas de autodefensa, ella y algunas de las profesoras de academia antes de ser maestras ¿porque? -conto el conocimiento que tenia Saya acerca de estas docentes de Fujimi.
-Bueno, hay mas de una mentira en esa información -todos los cinco quedaron intrigados -esa mujer es una asesina, una sicaria. Pero no cualquier sicaria. Es la líder del grupo de sicarias femeninas auto llamadas Taimanin -mostro un nuevo documento en su computadora. Todos les llamo la atención.
-Sicarias, como ustedes -pregunto Hirano.
-Ellas están a un nivel superior, encabezan las listas de búsqueda de criminales de nivel internacional, asesinas ninjas profesionales, no hay país que no las busque por crímenes cometidos en sus naciones -contaba Helen -asesinato de políticos como senadores o gobernadores de estado, generales militares o cancilleres. Son asesinas profesionales, no dejan testigos, aunque sean daños colaterales o civiles. Todos los grupos policiales del mundo la buscan, me sorprende que la policía de este país no la busque, después de todo fueron de los primeros en catalogarlas como criminales de máximo peligro.
-¿Tanto así? -a Morita le parecía imposible que alguien así existiera.
-¿Que hace una criminal como ella en la escuela? -pregunto Hirano.
-No solo es ella, la mayoría de las profesoras en la escuela pertenecen al grupo de las taimanin -exclamo Helen, al parecer eran unas siete mujeres eran pertenecientes a este grupo de asesinas profesionales.
-La escuela fue reparada por el primer ministro Shido gano las elecciones como parte de sus promesas de campaña a la ciudad, seguro que adquirió la escuela para su beneficio -deducía Saya -con su poder en la política y su corrupción habrá contratado los servicios de las taimanin para proteger sus negocios.
-Para que entiendas. Junta a las taimanin y están al mismo nivel que Bogeyman, un poco menos -puso mas claro Ricardo la letalidad de las asesinas ninjas.
-¿Bogeyman? -un nombre desconocida para Takagi.
-Mejor que no sepan quien es -dijo el mexicano -pocos viven para contar acerca de su letalidad.
-Mi abuelo me hablo de él, ¿es cierto que mato a las cinco familias de nueva york en un noche? -pregunto Komuro.
-Las extermino hasta el ultimo miembro -esto maravillo a Takashi, un asesino de ese calibre para la NMM seria mas que beneficioso, por desgracia incluso su cartel tenia tachado a este ruso de sus listas, era un enemigo también para su nación.
-Un segundo, esa información la obtuviste cuando hackeaste el celular de Busujima-senpai, si ella tenia como un contacto, significa que es miembro de las taimanin -dedujo Hirano. Esa era una explicación de su talento como espadachín en las veces que intento matar a Komuro.
-Mas que eso, resulta que Igawa Asagi es la madre de Busujima Saeko -en la computadora mostro una foto de Saeko en comparación de la directora actual de Fujimi, esto dejo en leve shock a Takashi, todo tenia sentido para él ahora.
-Que bien... -esto si era un problema -podría ser peor la situación.
-Seguramente el resto del dragón negro sabe que vamos detrás de los jefes que poseen los códigos, harán que las taimanin sean sus guarda espaldas a todas horas -exclamo Takagi.
-Si... diles -miro Ricardo al ex dragón negro que tenia a su izquierda en la silla.
-Igawa Asagi, es una de las tres personas que Ichiro Shido tiene confiado uno de los códigos de su caja fuerte -dijo Kishimoto y la teoría se cambio -en vez de poner seguridad a los demás cabezas del grupo de dragón negro que poseen los códigos y de reasignar a otro el código que tenia Kirei es mas seguro suponer que Igawa posea los tres números clave de la caja fuerte.
Efectivamente como Kishimoto dijo, los tres códigos habían pasado a manos de la única mujer dentro del dragón negro, la única que con creces Ichiro podía confiar la copia de sus números clave de su caja fuerte.
Mas esos números no estaban guardados en su cabeza, Ichiro no dejaba que a quienes le entrego los dígitos, se los aprendieran de memoria, tenia que tenerlo guardados en algún pequeño baúl o bolsillo, en caso de la directora... esa era pregunta ¿Dónde los tenia escondidos? En este momento se encontraba teniendo una reunión con todos los profesores de la academia, tras acabar las clases.
-¿Ves algo? además de sus pechos -pregunto Takashi a Imamura quien era quien tenia mejor ojo para examinar a detalle con solo su vista, el cuerpo de una mujer madura.
Desde el otro edificio de la escuela, en el tejado que tenia vista hacia la sala de maestros en el salón grande donde los docentes tenían sus reuniones de cada semana.
-Pues... no -contesto el amante de las maduras -oye, si ahora ella debe tener los números consigo y saben tu cara, es obvio que no dejaran que lo veas -dijo tras dejar de ver por el binocular que usaba para espiar a las profesoras en su lugar -deben de planear su siguiente ataque contra ti.
-Que no mires donde estoy Imamura -Takashi estaba escondido detrás de una de las maquinas de aire acondicionado en el techo, había la posibilidad de que las taimanin ni el dragón negro, no supieran que Imamura, Hirano o Morita eran sus aliados en este juego complicado, aprovechaba la mala costumbre de Imamura por espiar a las profesoras cuando tenían sus reuniones para intentar encontrar donde tuvieran escondido el numero de la caja fuerte -Ricardo dijo que las taimanin son siete mujeres.
-Takagi-san dijo que hace cuatro años que la escuela fue reparada e instaurada Asagi-sensei como nueva directora -exclamo Imamura siguiendo su espionaje alias vigilancia, como si se tratara de ver a un pervertido estudiante espiando en los vestidores de gimnasio de las chicas -varios profesores y maestras ingresaron con ella, hay un pequeño grupo de profesoras que se mantiene alrededor de la directora.
-¿Así? Dame la lista con los detalles que sepas -se intereso Takashi.
-La primera Taimanin que sabemos es nuestra directora Asagi Igawa, sus medidas son 88/58/85...
-¿Que?
-Me pediste con los detalles que supiera de ellas -exclamo indignado por sus conocimientos.
-Bien continua -no le disgusto la información extra.
-Es soltera, pero dado que Busujima-senpai es su hija deduzco que es divorciada o tuvo algo amorío de joven, tal vez se separaron debido a la persecución internacional que hay detrás de ella.
-Habias dicho algo acerca de que fue militar de la autodefensas.
-Hizo una demostración de entrenamiento y artes marciales una vez al club de lucha femenina -contaba Imamura -debiste verla en ropa deportiva viejo -su nariz sangro con el recuerdo cuando les espió -por su talento debió pertenecer a algún grupo de fuerzas especiales, hirano dice que las fuerzas especiales de las autodefensas tienen entrenamiento con las fuerzas especiales rusas debido a la tregua militar entre ambos países o incluso fue parte de algún proyecto secreto del ejercito de autodefensa. Eso es lo que se de ella, una de las profesoras que puede ser taimanin, es su hermana Sakura-sensei maestra de matemáticas... su cuerpo tiene las medidas de 87/59/89. Dicen que también fue de las fuerzas especiales y parte del cuerpo de entrenamiento especial al que estaba integrado Asagi-sensei. Es la consejera de varios clubes deportivos.
-Tiene el trasero mas grande que Saya... -susurro Takashi, después de conocer el cuerpo de Saya y descifrar sus medidas gracias al entrenamiento de Imamura, sabia sus medidas de la Takagi -Quien mas.
-Murasaki Yatsu-sensei -menciono a otra de las profesoras -consejera estudiantil de la academia, dicen que fue parte de las fuerzas tácticas de la SAT, después de servir brevemente en el ejercito. Como es que tiene una relación tan buena con Asagi-sensei y Sakura-sensei, no lo se. Pero la he visto, es maestra en lucha con diferentes armas mas allá de la espada, hacha, lanza... sus medidas: 86/57/85 enseña japonés moderno a la mayoría de los terceros años.
-Otra de la que rodean mucho a la directora es Rinko Akiyama-sensei nuestra profesora de ciencias sociales, 87/60/90 apoya al club de teatro y artes -exclamo y libero sus conocimientos de la chica -dicen que entro al ejercito a los dos meses de cumplir la edad requerida por las autodefensas, pero al poco tiempo se dio de baja, es la mas joven de las profesoras, solo por un año de Shizuka-sensei.
-¿La enfermera? -pregunto Takashi.
-Si, aunque dudo que ella este relacionada con ellas como una Taimanin, es muy... inocente y tonta, pero lo es lo que le da su encanto como su bello y brutal cuerpo -dijo y Takashi no respondió sabia que su amigo tenia razón, el cuerpo de la rubia enfermera que tenia la academia era demasiado para ser de verdad, y las medidas de su cuerpo según Imamura son -108/62/94.
-¿Como es que te sabes medir el cuerpo de una mujer si no has estado con una?
-Es un don que Dios me dio -respondió.
-Van cinco, faltan dos mas de esas siete taimanin, ¿que otra profesora queda? -se asomo por poco Takashi.
-Quedan Kyoko-sensei e Ingrid-sensei -la primera era maestra de biología de la academia y consejera del club de pingpong, la otra era maestra de ingles para muchos salones de todos los años, se sabia que venia del extranjero -Hayashi-sensei, su cuerpo mide 98/59/88 no es tan unida a las demás profesoras, si la he visto conviviendo con las demás profesoras, pero mayormente la he tratando de tener una relación mas que laboral con Tejima-sensei.
-Eso oí, que tiene una relación con él.
-No esta claro realmente -comento -es curioso, todas las profesoras son solteras, o separadas, pero Hayashi-sensei es la única que se ve que busca una relación a su edad de 30 años -dijo Imamura.
-Debe andar desesperada.
-Si, además ella no ha demostrado algún talento en pelea como las anteriores, de hecho es algo torpe, a menor medida comparado con Shizuka-sensei -exclamo -en cambio con Ingrid-sensei... ella es mas solitaria, es la tercera de las profesoras con los pechos mas grandes de la academia después Marikawa y Kyoko-sensei, 92/65/83. Dicen que fue adoptada por una familia inglesa y criada en Inglaterra. Tiene un conocimiento táctico y deductivo, como si hubiera sido parte de alguna fuerza de inteligencia o parecido. Es fría pero no solitaria, es apegada a la directora y las cuatro que la rodean.
-¿Quien mas?
-temo que son todas amigo, de allí en mas son varones los profesores -dijo Imamura.
-¿Solo seis? Se supone que son siete, ¿quien es la séptima entonces?
-Busujima-senpai lo es ¿no?
-No, según los mensajes, ella es nueva en su organización. ¿Quién es la séptima de las taimanin? -se cuestionaba Takashi.
-¿Que es una taimanin? -una voz familiar pero que ya casi no oía y que la verdad, no quería volver a oír.
-¿Hisashi? -quedo paralizado cuando vio a su grisaseo amigo aparecer por detrás de él cual fantasma buscando un alma que chupar -Rei... -verla le dejo mucho mas paralizado.
Una cara molesta e indignada por la presencia del pelinegro en un lugar que esperaba estar solo él y su novio. Pero encontró al bobo de Takashi y uno de sus amigos.
-Takashi -dijo cabreada -¿Que haces aquí?
-Pues...
-Nos alistábamos para ver la lluvia de estrellas -dijo Imamura.
-Ustedes también, ¡que bien! -le pareció agradable la idea al peli gris.
-¿Lluvia de estrellas? -pregunto Takashi sin que le oyeran los dos inesperados.
-Que no viste las noticias, hablaron de ello toda la semana en clases -le contesto al oído.
-Y piensan verlo con un binocular... -pregunto por el objeto en sus manos del fumador amigo de Komuro.
-Si... bueno, Saya dijo que iria a traer un telescopio para ver mejor las cosas -invento el pelinegro.
-Morita dijo que traería las botanas, solo nos adelantamos para tener un buen lugar -agrego el amante de las maduras.
-¿Takagi? -esto no le pareció a Rei, que hacia la pelirrosa pechugona del salón con Takashi y sus amigos, sabia que era amiga de la infancia de Komuro así como ella pero... -porque estaría Takagi contigo, bobo.
-Ese es mi problema -respondió a las palabras agresivas de la castaña.
-Hey tranquilos -Hisashi sabia que ella y su "amigo" no se llevaban bien, pero no sabia el porque.
De pronto, el celular de Imamura sonó. Le enviaron un mensaje de texto.
-Oye dice Morita que necesita ayuda con las cosas -dijo mas era un pretexto para sacar a su amigo de ver a su ex... amiga, sabiendo su mala relación que tenían tras haberle contado hace tiempo.
-Vamos -iba adelante de su amigo.
-Les guardamos un lugar -comento Igou.
-Gracias... -fue incomodo para Takashi, respiro aliviado cuando se alejaron lo suficiente de esos dos -te lo agradezco Imamura.
-Creí que habías superado lo de ella -pregunto, por el bien de su amigo.
-Aceptar su relación si, pero... aun me causa dolor el solo verla, me atrevo a decir que ahora la odio -exclamo acerca de Rei.
El mal sabor se extendió en su boca, vino a su memoria esos recuerdos dolorosos, donde Rei le prometía de niños que seria su esposa, mas solo fue una mentira, pues sus lazos se separaron por culpa de ambos y sus destinos jamás se unirían.
¡Slash! giro Imamura su cabeza, para ver a su amigo haber azotado su cabeza contra el arco de una de las puertas de las aulas vacías.
-¿Estas bien? -pregunto, era raro verlo auto infringirse daño.
-No te preocupes -dijo Takashi, con su frente aun pegado en la pared -adelántate, luego te alcanzo.
-...Te dejo, viejo... -sabia que le hizo daño verla tan solo, tenia que dejarle solo un momento para aclarar sus emociones que según Takashi, él mismo decía ya no sentir nada por ella cuando era mentira, aun tenia sentimientos por Rei.
Entro al salón en el que se azoto la cabeza para poner sus manos sobre sus ojos y ahogar las lagrimas para que no salieran.
-Maldición -vocifero -como puedo olvidarla. Odio que tengas razón Saya... ¿Por qué aun la amo, sino me ama? -decía mirando por las ventanas.
-Problemas de amor adolecente, son de los mejores en el romance -ahora una voz desconocida y femenina tomo por desprevenido a Takashi, miro a ver a una chica con el uniforme de su escuela, complexiones delgadas y piel morena sentada del pupitre. Extrañamente takashi entro sin ver a alguien allí ¿de donde había salido? -es lindo ver que incluso un susodicho yakuza tenga problemas amorosos.
-Sabes de mi -pregunto Takashi, tras calmar sus lagrimas.
-Soy Yukikaze Mizuki, se quien eres Komuro Takashi, nieto del león de la península, y lo que pretendes. Admito que eres muy ambicioso y me atraen los chicos que son ambiciosos en verdad, pero tengo una misión -se levanto sobre el pupitre y revelo un arma poco peculiar, una pistola aparentemente de pólvora de las usadas hace algunos siglos atrás para apuntar a Takashi, ella era la otra taimanin -en la que te involucra verte morir.
-¿Y crees que lo conseguirás?
-A diferencia de Saeko-chan yo no tengo problemas para matarte -dijo y sin pensarlo jalo del gatillo, mas no se movió él sin impresionarse vio una espada katana interponerse entre él y la bala, era la espada de la hija de Asagi -que estas haciendo, Saeko.
-No dejare que lo mates -apareció, al igual que Yukikaze, Busujima tenia su ropa estudiantil puesta.
-Piensas que por ser hija de Asagi tendré piedad, cosas como el amor no es de una taimanin, por eso tu madre te rechazo en nuestro grupo, tu amor por ese chico te vuelve débil -dijo Mizuki, recargando su arma.
-Mi padre me enseño lo contrario.
Pistola contra espada lucharían, una por matar a Takashi a sangre fría, la otra por su amor de la infancia por ella. ¿quien ganaría? El acero o el plomo.
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