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 Milf of the dead

Hay varios salones y clubes que son operados en Fujimi, como cualquier otra escuela de japón, Takashi tenia el castigo impuesto de limpiar cada salón de los clubes tras el pleito que se armo en la salida de la escuela al final de las clases.

-¿Quieres que vaya contigo al centro comercial? -pregunto Takashi luego de que una chica que poco conocía y poca interacción tenía se acerco de momento cuando conversaba con Shizuka mientras le hacia compañía a la sala de profesores -¿no eres Yuki Miku?

Era la catalogada como: la chica mas ardiente de todo el colegio, aunque la reputación que le seguía era de la peor.

-No juegues con que no conoces mi nombre Takashi Komuro -hacia puchero como si fuera una chica inocente -y bien que dices ¿quieres perder la ocasión de tener una cita con la chica mas ardiente de Fujimi?~ -ella misma sabia acerca de los rumores que corrían alrededor suyo.

-Perdona Miku-san, pero Takashi-kun ya tiene planes para el resto de la tarde -respondió, mas bien defendió lo que era suya, Shizuka.

-¿Takashi-kun? -le tomo curiosidad -sensei, por la forma que llama a mi Kohai diría que lo trata como si fuera su novio.

-Pues... -quería dejarle en claro que Komuro era su novio, pero al mismo tiempo sabia que si decía tal cosa a la alumna problemática de la escuela, podría salir mal todo -t-te equivocas Miku-san, es imposible que un profesor y un alumno tengan una relación, es inmoral y anti ética para los estándares estudiantiles -como quería gritar, tomar a Takashi y decirle que si era su novio, en cuanto a él, no dijo nada; dejo que las palabras de Shizuka hicieran el trabajo.

-Entonces no le molestará que me lo lleve, sensei~ -tomo a Takashi del brazo y lo tomo como si fuera su pareja del baile en camino a la pista.

Rabia y celos fueron los que llenaron a Marikawa al ver como una estudiante se llevaba a su novio lejos, pero no podía decir nada, como ella misma dijo, si se descubriera que un profesor y un alumno tenían un romance eso seria penado.

-¿Estas bien, Shizuka?

-Oh, Kyoko-chan -apareció la profesora de ciencias de segundo año, salía del aula de profesores cuando vio a la enfermera mirando con celos a alguien, lo cual le llamo la atención, Shizuka siempre se muestra alegre todos los días y en cualquier momento -si, todo esta bien.

-Pues no parece -comentó Hayashi Kyoko, el nombre de la profesora pelirroja castaña de ciencias de Fujimi. La mujer miro entonces a donde su joven compañera de trabajo (por tres años menos que ella) estaba mirando a Komuro siendo arrastrado por Yuki, por así decirlo -¿que pretende Miku Yuki con Komuro? -conocía al chico, sabia que se saltaba ciertas clases pero no era mal estudiante, no lo suficiente como para estar tan cerca de la chica mas problemática de la academia, lo cual era preocupante.

-¿Puedes explicarme que es lo que pasa, Yuki? -pregunto Komuro tras ver como los demás estudiantes los miraban y hablaban entre ellos en murmuros, debía ser inaudito ver a un chico común como él saliendo con una chica tan galante como ella.

La pelinaranja continuaba abrazada al brazo de Takashi, con su cabeza recostada en el hombro del chico, se veía complacida y enamorada, lo que hacia que las estudiantes y varones creyeran que estos dos eran pareja. Algunos estaban incredulos mientras que otros estaban celosos de esto.

-Le preocupa a mi novio lo que piensen los demás de nuestra relación~ -dijo ante todos.

-Un momento -ahora comprendía un poco mejor el juego que traía Miku, iba a confrontarla cuando la voz de Saya apareció en el radar de Takashi, sin embargo no parecía estar pasándola bien.

-¡Ya suéltame, tu bastardo! -Takashi vio a la pelirrosa tratando de quitarse al matón buscapleitos de la academia, quien la tomaba por la fuerza del brazo con malas intenciones, teniendo a otros tres amigos rodeando malamente a la hija de los Takagi.

-Ya no pelees, descuida que vamos a divertirnos ¿no chicos? -decía Tsunouda, había jalado a Saya del brazo para poner su mano restante en las caderas de la chica y pretender bajarla más sin importar que estuvieran en la academia frente a todos.

-"¿Que están haciendo?" -gritaba mentalmente mientras miraba para atrás, donde todos mostraban temor ante la presencia de Tsunouda, era el mas temido de la escuela incluso ella lo había evitado hasta ahora que inesperadamente vino a por ella -"no van a hacer nada, por favor... alguien ayúdenme... ¡Takashi!"

-Oye, quien te dio permiso de tocarla -apareció Takashi retirando la mano de Tsunouda antes que tocara indebidamente a Takagi -mas vale que la dejen, idiotas.

-Miren quien decidió aparecer, como te siente cogerte a la mas perra de la escuela como tu novia -exclamo Tsunouda.

-¡Tsunouda basta! -grito Yuki estando detrás de Komuro.

Al oír eso, Takashi solo miro molesto a Yuki quien mostró remordimiento.

-No se que demonios se traen ustedes así que solo diré esto, lárguense y déjenla en paz -tomo a Saya de sus hombros, la alejo del matón y sus amigos cual guardían fuera, en la cara de Takagi sus miraba a Komuro con brillo al ser tomada por fuerza por él. Estaba por llevarse a la pelirrosa cuando...

-No te basta en cogerte a Yuki, también quieres cogerte esta perra también -eso no le gusto, sin embargo dejo que Tsunouda explicará -Miku me contó que sale contigo, lo cual me pareció una broma estúpida hasta que los vi -los vio como los demás del colegio al salir -ya que tu me quitaste a la chica mas ardiente del colegio yo pensé en quitarte a tu linda perra amiga.

-Entonces buscaste tu muerte, imbécil -exclamó.

Le había dado la espalda, solo para voltear y Takashi darle un golpe con su puño cerrado directo a la cara malnacida de Tsunouda frente a todos. Todos quedaron estupefactos, lo que nadie había hecho en contra del abusador del colegio por fin alguien lo había echo, su nombre era: Komuro Takashi. La cabeza de Tsunouda se fue para atrás, una delgada linea de sangre se vio mientras que sus colegas miraban estupefactos.

-¡Argghh! -grito de dolor al reponerse Tsunouda, sus dedos tocaron su nariz y se mancharon de sangre -maldito...

-Nadie pone la mano a Saya ni a ninguna otra que yo conozca, mucho menos la llama "perra" -se planto delante de él.

-Quiero verlo...

Fue estúpido por parte de Tsunouda, contraatacar a Takashi y sus amigos ir detrás de su jefe a ayudarlo. A pesar de no tener ningún entrenamiento para luchar, mostró tener fuerza como para enfrentar solo a los cuatro buscapleitos de la escuela.

-¡Takashi! -grito Saya al ver como lo rodeaban, creyendo que acabarían con el pelinegro.

-¡Tsunouda basta! -grito Miku ante el conflicto que ella causo.

Los estudiantes seguían allí de estáticos, sin poder apartar la mirada de la pelea. Shizuka desde mas atrás junto a Kyoko se pasmaron en cuanto empezaron a luchar los estudiantes, pero fue Hayashi quien recupero la compostura y fue a buscar ayuda con sus colegas profesores para encargarse del problema. No obstante entre la trifulca, Miyamoto apareció junto a otros de los amigos de Takashi como Morita, Imamura e Igou que se abrieron paso al ver que era su amigo quien estaba peleando contra cuatro.

-Takashi... ¡hay que ayudarlo! -grito Rei al resto de amigos de Komuro.

-Si... pero ¿ayudar a quien? -pregunto Hisashi sorprendido que su amigo mas que enfrentar a los cuatro, les estaba dando una paliza a todos ellos, solo. Rei solo quedo sorprendida y decepcionada ante la respuesta del peligris que decía ser amigo de Komuro, obvio tenían que ayudar a su amigo, pero ni siquiera él fue a ayudarlo.

Por fin, los profesores aparecieron para separar a los estudiantes, y dispersar al resto que solo estuvo mirando.

-¡Ya fue suficiente, cálmense! -grito en profesor Tejima de educación física, fue él quien tomo a Takashi de los brazos y los separo. Sus demás compañeros profesores agarraron a Tsunouda y su pequeña banda. La frente de Takashi estaba sangrando bastante y de su boca también.

-Vas a pagar idiota -grito Tsunouda cuando dos profesores lo tuvieron que sostener ante el forcejeo del chico por ir seguir golpeando a Komuro -y verás como me cojo a puta de tu amiga.

Un solo movimiento de Takashi con el que se soltó del profesor Tejima, para una ultima vez dar con su puño al rostro del pelo pintado de Tsunouda, esta vez dejándolo inconsciente.

-¡Controlate muchacho! -grito el profesor, esta vez con tres profesores mas apartando a Komuro del inconsciente bravucón que quedo tendido en el piso.

Komuro termino en la dirección de la escuela mientras que una ambulancia se tuvo que llevar a Tsunouda al hospital, al parecer le pego demasiado duro Takashi con ese ultimo golpe. Afortunadamente no tuvo que acudir la policía ni nadie mas, Takagi hablo con los profesores, Takashi también, Miku hablo al respecto y muchos otros también fueron testigos luego de perder el miedo a Tsunouda y ver como alguien como ellos le dio una paliza al sujeto.

-Takashi, en verdad te lo agradezco -estaba hablando con Saya estando con él chico en la enfermería luego de que Shizuka fuera a buscar mas material para tratar sus heridas que seguían abiertas -de no ser por ti, no quiero ni pensar que me habrían hecho.

-Nunca tendrás que hacerlo, nadie toca a mi Saya sin mi permiso -dijo sin mucho pensar. Uso palabras que puso a latir rápido el corazón de la pelirrosa.

-Tu... Saya ¿que es lo que dices? -pregunto avergonzada de escucharlo.

-Perdón se escucho raro -rascaba la parte trasera de su cabeza luego de escucharse decir tal cosa tan extraña -aun sigo alterado por lo que acaba de ocurrir. Además me puse a recordar cuando viví contigo y tu familia en la mansión, Yuriko-san nos decía que nos comportáramos como hermanos, pero nunca nos tratamos así.

-Es cierto -rió Saya al recordar esos días, agradeciendo que nunca llegaran a establecer tan lazo, porque de haber ocurrido y sus sentimientos por Takashi hubieran surgido como tal, las posibilidades de que Komuro se fijara en ella serían menores a las de ahora -en verdad te doy las gracias Takashi.

-¿Eh? -el dolor y el sangrado de sus heridas lo distrajo de oír lo ultimo de Takagi, mas reacciono cuando en su mejilla los labios de la pelirrosa se posaron en un beso de agradecimiento -¿Saya? -no esperaba esto, aunque tampoco esperaba nada.

Al momento de mirarla, Takashi solo vio cuando la pelirrosa se puso de pie sin darle la cara y con sus manos cruzadas detrás de su espalda se iba caminando fuera de la enfermería escolar.

-Será mejor que te deje descansar, sensei debé de estar viniendo para tratarte -salió de la enfermería.

Tan solo salió Takagi de la enfermería, Shizuka Marikawa apareció en la puerta abierta con el material suficiente para tratar la herida de su estudiante favorito.

-Supongo que paso algo interesante -bromeo la rubia al darse cuenta que la chica Takagi abandono su sala mientras sonreía con mucha gracia.

Poco después, Shizuka trato cada herida abierta de su novio con mucho cuidado hasta acabar.

-Fuiste muy valiente allí Takashi-kun, te visto como un héroe sin dudas -decía Marikawa dejando las pinzas y el algodón con la sangre y el yodo con el alcohol con el que limpió las heridas de Komuro, en una charola medica con agua para desinfectar el material -Takagi-chan debe ser una chica importante para ti.

-Ella ha sido mi amiga desde la infancia -reveló, Takashi se dio cuenta que la enfermera suya se mostraba envidiosa y triste por alguna razón cuando dio la vuelta para manejar su equipo -si alguna vez viera a un idiota como Tsunouda tratando de tal manera a Shizuka, le haría lo mismo -fue y abrazo a su profesora desde atrás -porque Shizuka también es importante para mi -con eso alegro a la enfermera.

-Takashi-kun~ -contento a la rubia -vuelve a tu lugar mi tierno héroe, aun tengo que tratar tus heridas -lo hizo retomar su asiento -ahora dime, te duele tu cabeza aun.

-Si, pero... hay otro lugar que me esta molestando en este momento -después de tal pelea, quería un poco de diversión.

-¿Así? Donde~ -pregunto al entender a su pequeño novio, sin dudar abrió la bragueta del pantalón de Komuro para revelar su empalme -oh vaya pero miren que inflamado esta~ -decía inocente, pero ella ya no lo era -debo de encargarme de ello, por favor héroe~ déjeme darle un servicio especial.

Las rodillas de enfermera se pusieron en el suelo, y su boca fue devorando el pene de Takashi, el entrenamiento que había adquirido con la lujuria desbordada de Komuro le permitía hacer que en cualquier momento que él se lo pidiera, se comiera su pene de una sola mordida y en poco tiempo ella se encendiera de lujuria en poco momento.

-Sensei... lo hace de maravilla... -se quedaba corto de aliento.

-Por favor héroe~ -su lengua acariciaba la punta de su polla, Marikawa le mostraba su habilidad con la boca -deme su leche en mi boca~

-Te le daré mas allá de tu boca, sensei -muy complacido estaba.

Los días fueron pasando y las consecuencias de su pelea de Takashi iban recibiendo su debido castigo y sus debidas recompensas. Yuriko se entero de su hija de lo ocurrido cuando la escuela contacto con los padres de los involucrados, alegrados porque su hija estuviera a salvo, soichirou agradeció a Takashi por su acto con una muestra de su respeto a un hijo legitimo a como él le llamo, mientras que Yuriko, espero para agradecerle de la manera correcta, mas bien su manera.

Muchos en la academia miraban a quien siempre habían visto como un chico mas del montón, ahora lo presenciaban como un héroe muchas chicas le saludaban y otros chicos mostraban respeto al alumno que se enfrente al mas temido estudiante de fujimi hasta romperle la cara (literal). Chicas que ya conocían a Komuro, ahora tenían mas interés en él, lo querían para un buen partido, incluso una que otra comenzó a mirarla con mejores ojos.

Lo que ponía celosas a todas las que ya tenían interés en Takashi. No obstante, en las tardes Takashi cumplía su sentencia luego de enviar a Tsunouda al hospital. Un castigo leve decían los profesores tenía que ser ayudante de los profesores en lo que necesitaran lo cual era un fastidio, ya que se hizo de poco tiempo para ir a ver a Shizuka como solía hacer en las tardes, aunque sus acciones eran reprochables, lo que hizo fue admirable.

-¿De verdad me perdonarás? -decía Yuki Miku luego de tomar valor e ir a buscar a Komuro y contarle que había ocurrido.

-Tsunouda siempre fue un imbécil, tarde o temprano iba a caer -decía Takashi cuando estaba en el laboratorio ayudando a la profesora Hayashi a organizar el lugar, la maestra salió y Miku aprovecho para hablar con Komuro -pero porque decirle a ese bruto que yo era tu novio.

-Porque no paraba de presionar conque fuera su novia -respondió Yuki -tal vez sea una perra como dicen los rumores, pero no soy tan estúpida como ceder a ser la novia de un patán como él.

-¿Esta bien?... pero eso no explica porque de todos se te ocurrió mencionarme a mi digo hay otros chicos como Hisashi o... -decía Takashi.

-Bueno, la verdad, es que siempre me has parecido un chico, interesante y si tuviera una oportunidad seria con alguien, me gustaría que fuera contigo -esto puso en nervios a Takashi, en otro contexto esta chica se le estaba declarando a Takashi.

-Espera... -Takashi solo vio cuando ella venía hacia él cuando debió tomar las cajas de ensayos para llevarlos al almacén del fondo pero la cara de Yuki y sus intenciones le hacían permanecer inmóvil.

-Miku-san -apareció Hayashi Kyouko en la puerta del laboratorio, volvió antes de lo esperado -puedo preguntar ¿que esta haciendo aquí?

-Bueno, sensei... -temerosa, se aparto de Takashi con cada paso que daba la profesora de ciencias para hacer que la pelinaranja chica se alejara de Komuro, treintaiñera.

-Sino vino a ayudar a Komuro-kun con su castigo, será mejor que se retire -encaro la profesora.

-Si, sensei; hasta luego Takashi-kun~ -dijo con seducción en su voz, sin importarle que la profesora estuviera allí.

-No deberías juntarte con una chica como ella, con esa reputación que trae lo mejor es que la evites a toda costa Komuro-kun -exclamo Hayashi volviendo con el chico.

-No sea así con ella, Yuki es una buena chica, solo que ha tomado malas decisiones -respondió.

-Exactamente, ese es el motivo -seguía diciendo -sabes, tal vez ya te lo han dicho toda esta semana, pero también quiero decirte que lo que hiciste fue admirable, Komuro-kun.

-¿Usted también, sensei?

-No hay muchos hombres que se atrevan a defender a una mujer de un buscapleitos como lo es Tsunouda-san en este país. Afortunadamente fue su ultima fechoría, fue expulsado de escuela y gracias a que lo enviaste al hospital se descubrió que el chico era un drogadicto como se temía, ahora él y sus amigos están lejos y separados de Fujimi. Salvaste a esta escuela. Incluso a mi, me dejaste asombrada.

-No es para tanto -dijo Takashi.

-Ya como sea, lleva esos matraces y tubos de ensayos, tienes que acomodarlos en sus lugares -dijo la profesora.

Al ver como el chico cargaba él solo, todo el pesado y delicado equipo sin problemas hasta llegar al almacen iba pensando hayashi acerca de la buena parte que hay en Takashi.

-"Joven, modesto, valiente y fuerte" -pensaba Hayashi acerca de Takashi, como si también fuera una de las estudiantes que se hechizaron ante él luego de verlo pelear -"que estas pensando Hayashi, Komuro-kun es uno de un estudiantes... además, un chico como él jamás estaría interesado en una madura de treinta años como yo" -suspiro, dejando al chico solo en el almacén -"desperdicie mi juventud, si solo Tejima-sensei no fuera tan bruto también."

-"Parece estar insatisfecha con su vida" -pensó Takashi, mirando de reojo desde la puerta del almacén hacia la mujer cuando se componía los lentes, una expresión de frustración en su cara vio.

-¡Oh! Hayashi-sensei -una voz demasiado varonil se escucho entrando en la puerta del laboratorio, Takashi se agacho solo para mirar a escondidas que se trataba del profesor de educación física, Tejima. Takashi tenía oído por rumores, que él y Hayashi tenían una relación, pero nunca había algo solido, solo eran rumores por la convivencia de estos.

-Tejima-sensei -exclamo alegre la profesora de ciencias -que hace aquí.

-Vine a traerle un pedido extra que hice de Ichiraku, usted quería que fuéramos hoy a comer allí pero surgió un problema y debo salir de la ciudad -dijo al entregarle la bolsa con el pedido de comida en la mano a la profesora.

-Gracias... -no era lo que ella esperaba Hayashi.

-¿Pasa algo?

-No, es solo que... había esperado para ir con usted a tan buen restaurante por todo un mes... -sonaba decepcionada la mujer, más el otro profesor no lo notaba.

-Por eso le traje un pedido especial de la casa -dijo, sin captar la indirecta. Takashi que seguía allí oyendo a estos dos adultos, uno de ellos un idiota.

-La comida no era lo importante -exclamo molesta, y ni aun así el hombre logro entender entre líneas lo que esta linda profesora decía. Lo cual la misma Hayashi podía darse cuenta -gracias por el detalle -dijo.

-Descuide, la veré después Kyouko-sensei -se despidió Tejima y dejo a la mujer con gran decepción en su cara a pesar de la sonrisa falsa que esta tenía.

Tan solo salió, Takashi termino de acomodar las cosas a medida que los había visto y su instinto despertó, como si de un mecanismo se tratará con tal de consolar a la madura mujer; se activo.

-Me lleva... -vociferaba en voz baja Hayashi. A sus treinta años y no tenía ni una relación amorosa, toda su juventud la entrego a sus estudios pero cuando se dio cuenta que en la vida también se necesita de otro para no morir solo, su vida comenzó a sentirse insatisfactoria.

-Es un idiota.

-¿Komuro-kun, que palabras son esas? -vio al chico salir del almacén, supuso que termino de acomodar lo ultimo que le asigno.

-Solo digo que Tejima-sensei es un idiota y usted lo sabe -volvió a decir Takashi.

-No puedes referirte de tal forma a uno de tus profesores aunque no te agrade -dijo Hayashi manteniendo su papel como profesora.

-Lo que intento decir es que si yo fuera él dejaría cualquier otra actividad pendiente para tener una cita con Hayashi-sensei -no hubo pena ni vergüenza en sus palabras tan directas estando delante de la profesora, pero pronunciar tales palabras fueron un clavo en las emociones de Hayashi.

-¡¿Que?! ¿que estas diciendo Komuro-kun? -dio un paso atrás Hayashi ante las palabras del chico.

-Solo digo que usted puede tener una oportunidad con alguien más que Tejima-sensei -comento.

-Dices eso porque eres joven, pero a mi edad; nadie se fijaría en una soltera de treinta años -olvido su papel como maestra y solo era una mujer despechada.

-Hayashi-sensei es atractiva a su edad -volvió a decir sin pena, entonces ataco -ya se, porque no vamos a algún lado usted y yo.

-¿Hablas de una cita? -le pareció indebida la proposición, sobre todo viniendo de un chico de doce años menos que ella -Takashi Komuro, soy tu profesora... -vio en su cara determinación y calma, era un buen estudiante, un buen chico.

Kyoko accedió a la solicitud de Takashi, acordaron encontrarse en un día que no hubiera escuela y hasta entonces, Hayashi se mantuvo nerviosa e incomoda hasta que el día de la cita llego.

-Una cita con un estudiante ¿tan bajo he caído? -pensaba Hayashi vistiendo una blusa blanca sin mangas, solo tirantes gruesos que pasaban por sus hombros, un sombrero veraniego debido a la época de calor esperando en la sombra a la entrada del balneario publico, donde muchos jóvenes con sus parejas entraban con sus parejas y amigos a divertirse, habían familias que entraban también pero con hijos que no llegaban ni a los diez años. Se sentía rara entre tanto joven allí esperando.

-Hayashi-san -apareció Takashi entre jóvenes con ropas sencillas listas para quitarse y entrar al agua.

-Komuro-kun... -fue extraño para la profesora ver al chico vistiendo ropas casuales y veraniegas, era comienzo del verano y el calor comenzaba sentirse.

-Que linda se ve, Hayashi-san -halago a su profesora, no iba a decir que ella era su profesora en publico porque no se habían reunido como maestra y alumno, sino como dos personas casuales.

-Gracias... mm...

-¿Pasa algo, Hayashi-san? -pregunto Takashi al ver que de repente la mujer se puso incomoda, a medida que veía a la gente entrar y salir.

-En verdad debemos tener nuestra cita aquí -se planteaba muchas ideas, que tal si la gente hablaba a sus espaldas, que una mujer de su edad saliendo con tal joven tan joven...

-Si le parece incomodo, se de un lugar mucho mas relajado. Hayashi-san -exclamo Komuro, intrigando a la mujer.

Mas intrigada y temerosa se puso Hayashi al ser conducida por Takashi hacia las afueras de la ciudad hacia el bosque, en un pequeño sendero perdido por el que caminaron entre el bosque y el calor, preguntándose a cada momento a donde la llevaba hasta encontrar finalmente un pequeño oasis en medio del bosque.

-Este lugar... ¿es real? -fue lo primero que dijo Kyoko al ver un estanque de agua cristalina con un césped cuidado, flores y arboles con frutos comestibles. Se podía escuchar a las aves cantar y ver sus nidos entre los arboles, era un jardín del edén oculto.

-¿Es increíble no? -dijo Komuro -en la secundaria, la escuela nos trajo al bosque para conocer el bosque local, en medio de todo yo me perdí, no debieron notarme porque nadie se sorprendió cuando me encontré de nuevo a todos; pero cuando me separé del resto de la clase encontré este sitió. Al parecer nadie mas conoce este lugar, no le he mostrado este lugar a nadie, Hayashi-sensei es la primera persona que se lo enseño.

-En verdad -esto hizo sonrojar a la treintona mujer.

-Vamos, sensei -entonces se quito aquella camisa y monstruo su cuerpo a su profesora, como el resto de maduras que se había enganchado se quedo estupefacta ante el cuerpo del chico bajo la ropa, quedando solo con un pantaloncillo playero -vamos a nadar.

Dio un salto al estanque Takashi, salió para ver a la mujer tras quitarse ese vestido de verano y revelar que traía abajo un bikini color naranja en ambas piezas, el sostén era corto debido a sus grandes atributos, una delgada linea elástica que corría del centro del escote del sujetador para rodear el cuello de la mujer, una linea delgada corriendo por su espalda uniendo lado a lado el sujetador. Bragas que a los lados se veía un atado de la prenda para sujetarse a la piel de su portador.

-Allá voy -saltó al agua muy cerca de Takashi y se mostró a un lado de él con una sonrisa también.

El sol iba moviéndose desde el cielo, las horas pasaban y el tiempo entre ambos fue duradero, nadando, jugando y contándose historias personales, reservando hechos privados. Cuando el agua los dejo agotados, salieron al césped, con una manta para picnic se sentaron a comer los bocadillos que Hayashi decidió llevar para Komuro, recibiendo halagos del estudiante que llegaron a ella, aunque sabía que en este momento no eran eso, solo dos conocidos en una cita.

-Vaya, el sol comienza a calentar, es tan agradable como para estar debajo del sol un rato pero no quiero quemarme la piel -dijo Hayashi acostada sobre una toalla larga en el césped mientras miraba el sol pasando por su máximo resplandor.

-Traje bloqueador, sensei ¿quiere? -pregunto por formalidad.

Al oír esto, Hayashi tuvo una idea.

-Porque no mejor me colocas tu el bloquear en mi espalda Komuro-kun~ -dijo sugestiva, se había dado la vuelta en la toalla mostrando su espalda descubierta.

-¿Segura? -mostró dudas.

-Eres un buen chico, mucho mejor de lo que espere, así que por favor, untame del bloqueador por todo mi cuerpo... Takashi-kun -había algo en este chico que la hizo mas que apreciarlo.

En seguida, Takashi puso del bloqueador en sus manos y desde la espalda baja de Hayashi fue untando el bloqueador mientras masajeaba la espalda de su profesora en este ambiente cálido al natural.

-Si~ se siente bien... -aguantaba los gemidos Kyoko ante la talla de este masaje.

-Kyoko -sensei tiene una piel muy suave -alagaba a la mujer, al sentir ese gemido, quería Takashi escucharla gemir mas -un bello cuerpo, y una voz maravillosa.

-No... no digas eso, me sentiré... rara...

-Sensei, por favor déjeme consentirla -susurró a su oído mientras ella seguía acostada boca abajo -quiero que sensei se sienta mejor~ -mordió el lóbulo de la oreja izquierda de la mujer mientras la mano derecha de Takashi se metió bajo las bragas del bikini de su profesora, y el bloqueador en sus manos iba distribuyéndose mientras él apretaba los glúteos de Hayashi.

-Que dices... ¡Haaa! -soltó un gemido cuando -Takashi-kun, tu mano... donde la estás metiendo...

-Me aseguro de que dar un masaje a cada sección de su cuerpo, sensei -su dedos estaban metidos en el coño mojado de su profesora, haciendo ruidos lascivos mientras sus dedos entraban y salían con sus caricias -mire sensei, mis dedos están cubiertos por sus jugos~.

Dejo de acariciar su coño y le mostró los dedos con el que hizo magia en menos de cinco minutos, solo para enseñarle como él se atrevía y limpiaba esos fluidos que ella soltó de su vagina, con su boca Komuro.

-¿Que? Espera... ¡no bebas eso! -se levanto de golpe Hayashi y con ello, el sujetador que traía encima se resbalo, sus pechos quedaron expuestos a vista de Takashi, fue por mano de él -¿Eh?... ¡No! ¡no mires Takashi-kun! Tu planeaste esto verdad ¿porque? -dijo, cuando dio la vuelta estando sentada para tapar sus pechos grandes con sus manos, no eran tan grandes como los de Shizuka, pero si le competían.

-Porque Kyoko-sensei es una mujer atractiva -exclamo Takashi acercándose y sentándose detrás de la mujer y sus manos meter debajo de las manos de su profesora y tomarla de sus pechos, acariciándolos con suavidad -quiero consentir el cuerpo de sensei yo mismo~

-Pero... soy vieja para ti, soy tu profesora además -harto de oírla decir eso, tomo con su mano el mentón de la profesora para hacer que sus labios la callaran. Mas de sus labios al chocar con los suyos, paso su lengua a tomar la lengua de Hayashi mostrarle cuando maduro era para ella -Takashi-kun...

-Kyouko-Sensei es hermosa para su edad -una de sus manos acariciaba los pechos de la mujer, mientras que con la otra mano tocaba el coño de la profesora, explotando su libido mojado -quiero complacerla, quiero que sea feliz...

-En verdad quieres hacerte cargo de mi -podía sentir el miembro erecto de Takashi chocando con su espalda baja estando sentados.

Volvieron a la toalla, primeramente decidió darle placer a su profesora, le quito las prendas de su bikini y donde la mano de Komuro le tocaba, para poner su boca y ser su lengua la que la que le diera placer.

-¡Takashi-kun, mmmmm! -gimió en un grito, fue mordiendo suave uno de los dedos de su mano -eres... eres asombroso, tu lengua se mueve de manera asombrosa... -

Las manos de su estudiante pasaban por sus piernas abiertas, Kyoko sentía la fuerza de Komuro al ser sostenida por él, la lengua del chico hacia estragos en su vagina.

-Eres demasiado bueno, mi vagina jamás había sido acariciada con tanta pasión -en verdad estaba decidido Takashi en complacerla. De repente, una sensación eléctrica recorrió su cuerpo, principalmente desde su punto G -"no puede ser... estoy a punto de venirme y todo la técnica de uno de mis estudiantes~" -su mano en su boca, la limito a pensar pero su boca no pudo estar mucho tiempo callada -voy a venirme Takashi-kun...

-Hágalo sensei -la lengua del pelinegro, pasaba alrededor de los labios de la vagina de Hayashi -deje que su estudiante pruebe sus dulces jugos~

-¡Haaaaaa! -la combinación de palabras y talento de Komuro hicieron a Hayashi alcanzar el orgasmo, el cuerpo de su profesora quedo agitado así mismo quería mas de esta sensación -hacia tiempo que no alcanzaba un orgasmo, no recuerdo haberlo alcanzado tan rápido...

-Sensei... sus jugos saben genial -exclamo Takashi.

Miro entonces a su alumno quien limpiaba de su boca los jugos de Hayashi, sin desperdiciarlos, en eso vio el tallo varonil de Takashi, el que se froto antes contra su cuerpo, duro y grande, hipnótico y viril, fueron las palabras que pensó Hayashi al mirar profundamente el pene de Takashi.

-¿Sensei? -vio a la pelirroja madura acercarse a gatas a su miembro.

-Por favor, Takashi-kun; ya que tu me complaciste con tu boca, dejame hacer lo mismo por ti -estaba roja sus mejillas al tener algo tan sorprendente delante de su rostro.

-Sensei~

La boca de Hayashi se abrió y devoro de un solo mordisco su miembro. Los labios de la profesora de ciencias pasaba por toda su polla, la lengua le acariciaba como si una serpiente se envolviera suave y recorriera su miembro.

-Dios~ tu polla es demasiado para mi Takashi-kun -decía, aun tenía en su boca el pene del pelinegro -tu resistencia es mas que buena y el sabor que libera tu polla también es delicioso -llevaba un buen rato devorando su cosa, sin buscar parar.

-Si le gusta el sabor de mi pene, entonces le va a gustar el sabor de mi leche -tomo a Hayashi de su cabeza para ir moviendo su cintura e ir embistiendo contra la boca de la profesora.

Sonaba lascivamente sus actos alrededor de este ambiente natural, si alguien anduviera cerca seria atraído por el extraño ruido situado en medio de la naturaleza. La rudeza de Takashi era intensa para Hayashi, sentía desfallecerse en cualquier momento, se quedaba sin aliento.

-¡Hayashi-sensei! -grito repentinamente Takashi, su esperma se libero en la boca de la profesora hasta casi ahogarla.

-¡Gmmmm! -hizo ruido la boca de Kyoko al ser inundada del semen de Komuro, bebiendo lo que pudo hasta que no pudo resistir tanta cantidad de su esperma -aaa... -se quedo corta de aliento, escupió el pene de Takashi cuando aun seguía viniéndose, termino su cara manchada del esperma cerca de sus ojos -cuanto te corriste ¿que es lo que comes?... -decía Hayashi haciendo que en la palma de su mano cayera el exceso de semen que soltó Takashi en su boca, para beberlo sin desperdiciar ni una gota -y pensar que este delicioso semen va a llenarme~ no quiero esperar -tomo a Komuro y lo derribo sobre la tela.

-Hayashi-sensei, no pensé que fuese una pervertida -sonreía Takashi, tenia encima a la profesora, su endurecido pene era aplastado por el trasero de la madura, quien movía sus caderas frotándole su miembro.

-Eso es porque Takashi-kun me ataco primero~ -sus manso descansaban en el pecho de Komuro -no pensé que un chico de tu edad fuera tan bueno para complacer a una mujer como yo, o que tuviera un monstruo entre sus piernas, dime ¿así son todos los chicos de tu edad?

-Solo yo, sensei.

-Llamame solo por mi nombre, Takashi-kun~ -se acerco a la cara del chico y le devolvió el beso que le dio al principio, siendo un beso simple pero cargado de emociones por parte de la maestra de ciencias para Takashi.

-Kyoko...

-Takashi-kun... ¡Haaaaaa!

Durante le beso, la mujer acomodo la polla del pelinegro debajo de su trasero y cuando volvió a sentarse en la pelvis de Komuro, su coño fue atravesado por el miembro del joven, clavándose poco a poco el grueso miembro en su interior.

-Dios es tan grande~ mi coño se ensancha con el grosor de tu pene, Takashi-kun... -exclamaba Kyoko mirando para atrás, el como su vagina tenía devorada por completo el pene del pelinegro.

-Tu vagina es apretada también, Kyoko... -sentía el apretón de su polla.

-Me iré moviendo, así primero... -despacio se iba moviendo despacio para asimilar el tamaño de Komuro, no era una mujer virgen Hayashi, sin embargo eran pocas las veces que ha tenido interacción sexual con un hombre, pero ninguno de ellos hasta ahora tenia un tamaño que igualará al de Takashi, cuando el ritmo fue aumentando en los movimientos de las caderas de Hayashi, el chapoteo de los fluidos sexuales de ambos comenzó a hacerse presente -tu pene es demasiado bueno Takashi-kun, llega muy profundo en mi~ golpea mis puntos débiles.

-Me alegra saber que Kyoko esta disfrutando, yo también lo disfruto sensei~ -exclamo Takashi atraído de estar mirando los pechos de su profesora, rebotando.

-¿Quieres morder mis pechos?~ -pregunto -no aparta la mirada de ellas, adelante -se inclino al rostro de su alumno -adelante Takashi-kun, son tuyas, has lo que quieras con ellas~

Tomo la palabra de Kyoko, con su boca agarro uno de los pechos y con su mano tomo su pecho restante para desatar mas placer a la mujer al grado que su cuerpo dejo de moverse, entonces las piernas de Takashi se acomodaron, las caderas del pelinegro empezaron a moverse, golpeando rudamente la carne de la profesora.

-Si~ muévete así, puede sentir como tu pene se vuelve mas grande en mi interior... -Hayashi podía sentir como un segundo orgasmo iba viniendo desde adentro de su cuerpo -no me hagas esperar mas, quiero que tu leche este en mi interior...

-¡Toma toda mi leche Kyoko! -grito antes de venirse.

-¡Mmmmmm... Haaaaaa! -sonó el gemido que dio la profesora, corriéndose al mismo tiempo que su estudiante -que genial sensación~ nunca pensé que un joven me hiciera sentir tan bien... mucho menos uno de mis alumnos -la polla del chico seguía incrustada en su interior a pesar de estar el semen saliendo de su coño -vamos, dale más placer a esta madura mujer.

-Le daré tanto placer a Kyoko, que no podrá vivir sin mi -dijo Takashi, teniendo la cara de la mujer muy cerca de la su rostro.

Se aseguraría de que su sensei, se volviera una más como las otras tres mujeres que tenía a voluntad de su poder sexual, porque eso es lo que tiene él.

La pierna izquierda de Hayashi era levantada por las manos de Takashi, penetraba a su profesora estando ella acostado de lado, el ritmo que mantenía el pelinegro era perfecto para Kyoko, quien no podía dejar de mirar con ansias cada que el miembro del chico entraba y golpeaba con fuerza sus paredes.

-Esta pose es tan vergonzosa~ -decía su profesora -pero no puedo evitar aceptar lo bien que se siente esto... tu resistencia es fenomenal Takashi-kun -casi enseguida, la hizo cambiar de pose, en cuatro sobre la tela mientras seguía moviendo sus caderas golpeando el trasero de Hayashi -puedo sentirlo... tu polla se vuelve a ensanchar en mi coño, va a estallar...

-¡Sensei! -grito para tomar las caderas de Hayashi y pegarla a su cuerpo para verter su leche de nuevo, dentro.

-¡Kyaaaaa! -gimió de placer, una especie de gemido que no vio venir el chico de ninguna manera se espero.

-...Sensei, ese gemido, fue muy tierno -Takashi tenía recargado su cuerpo en la espalda de la madura mujer, Hayashi a pesar de estar agitada se mantenía firme en la posición de perrita que estaba gracias a la fuerza de sus rodillas -quien diría que la firme y estricta, Kyoko-sensei hacía ruidos tan pervertidos.

-El pervertido eres tu, Takashi-kun~ -miraba a la cara de Komuro que la tenia pegada a la suya -invitar a tu profesora para tener una cita y luego seducirla con ese increíble cuerpo joven que tienes para tener sexo en un lugar publico...

-Es verdad... me atraen las mujeres maduras y atractivas como Kyoko-sensei -dijo a la mujer.

-Eres todo un gigolo~ -se sonrojo al oír las preferencias de Komuro -lo único bueno es que no hay nadie aquí que nos viera o nos escuchara.

-Claro que lo hay -las caderas de Takashi empezaron a moverse de nuevo.

-¿Que? -eso no le pareció a Kyoko, las manos de Takashi pronto la tomaron de sus pechos y un movimiento brusco del chico hicieron que pasaran a una pose mas atrevida. Takashi recostado en la tela con Hayashi encima de él, su cuerpo expuesto a la vista y la pelvis del chico volvía a moverse con rudeza -¿Takashi-kun a que te refieres, hay... hay alguien observándonos?

-Dios, por su puesto -exclamo el pelinegro.

-¡¿Que?! -exclamo con miedo.

-No soy creyente, pero si Dios es real él nos esta viendo en este momento, quiero que vea como Hayashi-sensei se convierte en mi mujer -dijo, estaban cerca del estanque, los arboles no llegaban, era un pequeño pedazo entre el bosque donde el sol caía plenamente y la vista al cielo era magnifica.

-No... Takashi-kun para... -machacaba el cuerpo -esta intensidad... mi mente se queda en blanco, adoro esta sensación.

-Sensei quiero que lo diga, quiero que Kyoko sea mi mujer -estaba a punto de hacer que la mujer alcanzara su limite de placer.

-Soy tu profesora... y tu mi alumno... -apenas si pudo formular -...lo haré

-¡Dígalo mas fuerte sensei! -un poco mas y Takashi llegaba a su máximo también, otra vez.

-¡Lo haré, seré tu mujer Takashi Komuro! ¡ahora hazme acabar!

El ritmo bestial de Komuro hacia que su mente quedara en blanco, la vagina de Hayashi tomo la forma del pene de su estudiante, y su vagina pronto comenzó a derramar sus fluidos al alcanzar el orgasmo.

-¡Kyyyyaaaaaa!

Eso basto para hacer que las aves de los alrededores salieran dispersadas en parvada.

El techo de Fujimi, el cuarto piso del edificio de la academia llega un buen viento siempre llega en toda hora. Un lugar perfecto para Takashi cuando se salta las clases, es inspiración para las historias que guarda en su cuaderno.

-Komuro Takashi ¿otra vez saltando las clases? -la profesora Kyoko apareció inesperadamente en este lugar, mas Komuro no se sorprendió ni asustó ante la presencia de la mujer -que voy a hacer contigo~ -su mujer.

Eran las clases de álgebra en la academia Fujimi, era un nuevo día de escuela. Sin embargo, mientras los demás estudiantes intentaban no dormirse en el aula escuchando como resolver problemas con formulas que tal vez no aplicaran en la vida normal, dos estudiantes de la clase se preguntaban por el chico ausente del salón.

-Otra vez Takashi esta saltándose de la clase -exclamo Rei, mirando el asiento vació de Takashi entre los demás estudiantes.

-Ese tonto, me sorprende que no tenga miedo a las represalias de saltarse las clases a diario -dijo Saya mirando también el lugar vació de Takashi -pero así es como me gusta como es -así era el tonto del que se enamoro -de seguro esta en el techo con su cuaderno, escribiendo como siempre.

Estaba haciendo otra cosa en realidad.

Takashi tenía a Kyoko contra la pared del club de astronomia en aquel tejado, sostenía las piernas de la profesora mientras le daba duro contra la pared, sin que alguno de los dos se quitara la ropa, solo la falda de Hayashi que tenia recogida. Y su cara clavada en el escote de la vestimenta de la mujer.

-Haaa, Takashi-kun~ eres una bestia -decía Hayashi disfrutando de las caricias sucias que le da el pelinegro -saltarte las clases para tener sexo en la academia con novia que también es tu profesora es ta... excitante~

-Kyoko-chan, voy a venirme... -decía Takashi, con su cara recargada en los pechos de la profesora.

-Suéltalo dentro, mi amor~ quiero tu leche dentro... ¡haaa!~

Un gemido controlado, estando en el tejado de la escuela, de dejar salir su voz como debía, habrían de ser descubiertos.

-Hagamos lo una vez mas, sensei -dijo Takashi, mas Hayashi se estaba acomodando de nuevo la ropa.

-La próxima clase ya va a empezar, Takashi-kun; debes presentarte -comento Hayashi -además, esta noche iré a visitarte a tu casa para tus practicas de puntos extra -dijo al oído del chico, pasando su palma en el bulto aun caliente que guardo Takashi en sus pantalones.

-Sensei~

-Quiero que ahorres energía para que mi fantástico novio me coja hasta el amanecer~